La violencia racial entre asi¨¢ticos y neonazis se extiende por el Reino Unido

Seg¨²n la polic¨ªa, que acudi¨® al barrio de mayor¨ªa asi¨¢tica de Manningham con oficiales antidisturbios, perros y agentes a caballo, cerca de un millar de j¨®venes les lanzaron ladrillos, bombas incendiarias y botellas en un arrebato de violencia que sorprendi¨® incluso a los representantes municipales locales. En el momento ¨¢lgido del choque, las fuerzas del orden fueron golpeadas por los manifestantes con bates de b¨¦isbol y ladrillos.

'Nadie esperaba que las cosas se desmandaran de este modo. Muchas tiendas han sido destruidas, y ya basta de l¨ªos', dijo ayer Mohammed Amran, miembro de la Comisi¨®n para la Igualdad Racial, mientras contemplaba las lunas de escaparates rotas y los comercios quemados durante los enfrentamientos. Mohammed Riaz, un concejal del distrito asaltado, calific¨®, por su parte, la situaci¨®n de irreal. 'No puedo creer que esto suceda en una localidad inglesa. La situaci¨®n carece de sentido', dijo.

Poco antes de los choques, la Liga Antinazi hab¨ªa congregado a unas 500 personas, en su mayor¨ªa de origen asi¨¢tico, en la plaza del Centenario de Bradford. Testigos presenciales aseguraron que el grueso de la marcha se dispers¨® de pronto para enfrentarse a un grupo de j¨®venes brit¨¢nicos blancos que sal¨ªan de un pub e insult¨® a los que desfilaban. Uno de los clientes del bar fue apu?alado en la espalda. Algo despu¨¦s, un var¨®n indio recibi¨® una cuchillada en una pierna. A partir de entonces, la situaci¨®n se desbord¨® y la polic¨ªa pidi¨® anoche a los habitantes de la ciudad que se quedaran en casa para evitar altercados.

Las autoridades brit¨¢nicas no quisieron entrar en detalles sobre la identidad y el origen de los 36 detenidos, que la polic¨ªa identific¨® luego como '13 blancos y 23 asi¨¢ticos, todos ellos, menos dos, vecinos de Bradford'. Greg Wilkinson, ayudante del comisario, reconoci¨® que la situaci¨®n estuvo a punto de desbordar a sus agentes, pero los violentos ser¨ªan detenidos en las pr¨®ximas semanas.

Estos nuevos disturbios suceden a los registrados en abril pasado en la propia ciudad, cuando j¨®venes asi¨¢ticos y blancos se pelearon a brazo partido tras una boda celebrada por el rito hind¨². En aquella ocasi¨®n hubo ocho heridos y varias tiendas quedaron destrozadas por las bombas incendiarias. A finales de mayo, otra localidad brit¨¢nica, Oldham, fue el escenario de tres d¨ªas de luchas callejeras que enfrentaron a 500 j¨®venes, originarios en su mayor¨ªa de India y Pakist¨¢n, con la polic¨ªa. Portavoces de esta ¨²ltima negaron despu¨¦s que bandas de ambas procedencias hubieran convertido parte de la ciudad en 'zonas de exclusi¨®n' para sus convecinos blancos, que tendr¨ªan prohibido el paso en algunos barrios. La cifra de detenciones ascendi¨® entonces a 50 personas.

En Burnley, tambi¨¦n al norte de Inglaterra, el asalto a un taxista asi¨¢tico deriv¨® en junio en otro brote violento que se prolong¨® durante todo un fin de semana y dej¨® el mismo rastro de heridos y tiendas asaltadas.