Retorno al infierno de la infancia

Marie Laberge no inventa nada. Crea una situaci¨®n y unos personajes posibles y, a partir de ah¨ª, los hace dialogar. Es una f¨®rmula en apariencia sencilla que obliga a hacer equilibrios con las palabras para no caer en las numerosas trampas que tiende la realidad cuando lo que se quiere es imitarla, construir un universo veros¨ªmil. Tal vez por esto, Laberge se aproxime a los c¨®digos cinematogr¨¢ficos, porque es ah¨ª donde el naturalismo se ha mantenido, donde las convenciones nos hacen creer que lo que vemos es la pura realidad.

Una situaci¨®n posible es, por ejemplo, una casa familiar el d¨ªa de Navidad. El reencuentro de cuatro hermanas y la madre. Pero esta vez no ser¨¢, en ning¨²n momento, una reuni¨®n feliz. De lo que hablar¨¢n es de la madre, que padece Alzheimer, y de la hermana peque?a, que, tras un accidente, sufre amnesia total y no ha retenido ni el m¨¢s peque?o recuerdo de la infancia. Es una reuni¨®n que dejar¨¢ aflorar todas las rencillas, los ego¨ªsmos, las angustias, los odios. En realidad, la situaci¨®n y los personajes son posibles porque la malla que la canadiense Marie Laberge teje con las palabras va creando psicolog¨ªas s¨®lidas, transforma el t¨®pico y lo hace humano. Oblidar es un texto sobre todo lo que olvidamos del pasado para poder soportarnos. Un olvido que se hace imposible cuando retornas a los or¨ªgenes. Es entonces cuando regurgitas lo que has olvidado: un retorno al infierno de la infancia.

Lurdes Barba, junto con las int¨¦rpretes, se ci?e al gui¨®n, que exige un trabajo interior. Antes de llegar afuera, las palabras han de haber transitado por la mente. Es un trabajo delicado de construcci¨®n de personajes marcado por el cron¨®metro de los sentimientos. Como las olas que s¨®lo revientan tras hincharse el mar, tambi¨¦n las palabras han de cargarse de sentido antes de lanzarse al p¨²blico. Un excelente trabajo de direcci¨®n.

Merc¨¨ Angl¨¨s, Rosa Cadafalch, Anna G¨¹ell y Judith Lucchetti interpretan a las hermanas. Andr¨¦s Moreno es un personaje que s¨®lo llega para ser expulsado, un individuo inc¨®modo del mundo exterior que se introduce en ese otro mundo cerrado de la familia. Ellas est¨¢n muy bien. Hacen un trabajo matizado, delicado, sin trampas. Anna G¨¹ell me gusta especialmente porque se aleja de una imagen en que hab¨ªa quedado encasillada. Forman un equipo s¨®lido que hace que la situaci¨®n, los personajes y los di¨¢logos sean, sobre el escenario, definitivamente posibles. Una ¨²nica cr¨ªtica. Oblidar es un espect¨¢culo para el invierno, reflexivo.