Las 'pubilles' no quieren plan

Que el Plan Hidrol¨®gico Nacional (PHN) lo empapa todo en las tierras del Ebro no es nuevo, pero que haya llegado a remojar hasta las enaguas de una figura tan tradicional en las fiestas de las poblaciones de la zona como la de la pubilla no se lo esperaba nadie. Si la pol¨¦mica se inici¨® con las l¨¢grimas de la pubilla de Santa B¨¤rbara mientras iba cogida del brazo del consejero de Medio Ambiente, Felip Puig, ahora se retoma de la mano de las j¨®venes de Amposta. La plataforma de defensa del Ebro de la localidad sostiene que las respuestas de las pubilles a un cuestionario fueron censuradas porque se refer¨ªan como principales preocupaciones al PHN y al trasvase del Ebro.

La plataforma cree que el alcalde de la localidad, el convergente Josep Maria Roig, ha atentado contra la libertad de expresi¨®n, y solicita su dimisi¨®n. Roig explic¨® ayer que en ning¨²n momento las j¨®venes fueron censuradas -'nunca han hablado en p¨²blico', dijo- y se refiri¨® al asunto como un 'montaje de la plataforma'.

La denuncia se produce d¨ªas despu¨¦s de la celebraci¨®n de un tenso pleno en Amposta en el que no se escatimaron insultos y, con los votos de CiU, el gobierno municipal rechaz¨® una moci¨®n para dar apoyo econ¨®mico y log¨ªstico a la organizaci¨®n antitrasvase. Seg¨²n los miembros de la plataforma, el locutor que presentaba en p¨²blico a las pubilles en las fiestas de Amposta, el pasado 21 de julio, censur¨® la preocupaci¨®n que una decena de las j¨®venes aseguraron sentir por la aprobaci¨®n del PHN en un cuestionario que hab¨ªan completado por escrito previamente. El presentador no olvid¨®, aun as¨ª, recordar que asuntos como las drogas y la inseguridad ciudadana s¨ª eran motivo de reflexi¨®n para las j¨®venes.

'?Vivan las pubilles!, ?fuera Puig!'. Con ¨¦stas exclamaciones salieron al paso el pasado 14 de julio en Santa B¨¤rbara los cerca de 200 manifestantes que boicotearon la lectura del preg¨®n del consejero de Medio Ambiente cuando vieron que la pubilla mayor, que acompa?aba de bracete a Puig, irrumpi¨® en llantos, agobiada por la presi¨®n del momento. Este suceso no pas¨® por alto en el territorio, y mientras que unos lo presentaron como un ejemplo de la insensibilidad de los manifestantes hacia las festividades o hacia las propias pubilles, otros no han perdido la ocasi¨®n de hacer chanzas y referirse a que las l¨¢grimas de la joven (por supuesto antitrasvasista, seg¨²n ellos) las motiv¨® el hecho de ir del brazo del consejero.