La apasionada y turbulenta Frida Kahlo vuelve a la vida con Salma Hayek

Acci¨®n!'. Frida Kahlo humedece la leng¨¹eta del sobre, y, melanc¨®lica, desv¨ªa la mirada al cerrarlo. '?Corten!', ordena Julie Taymor, la directora de Frida, pel¨ªcula que se acaba de rodar en M¨¦xico. El recorrido de la lengua se repite hasta ocho veces. 'Are you ready Salma?'. La mexicana Salma Hayek est¨¢ lista, dispuesta a repetir la escena cuantas veces sea necesario. No en vano es la producci¨®n de sus sue?os, de una pel¨ªcula sobre la vida de una compatriota que le ha sorbido el seso durante seis a?os. 'Much better', dice Taymor. Se rueda la peripecia de Frida Kahlo artista, mujer o esposa contada desde su propia subjetividad, no con un perfil documental.

Los estudios cinematogr¨¢ficos Churubusco, situados en una esquina de Ciudad de M¨¦xico, bullen en espa?ol e ingl¨¦s, en sus paredes se reproducen frescos y en las estanter¨ªas se acumulan los botes de pintura. La c¨¢mara enfoca, a 30 cent¨ªmetros, los labios rojos y humedecidos de Frida Kahlo (1907-1954), una mujer que fue apasionada y turbulenta, adelantada a su tiempo, casada con el pintor Diego Rivera (1886-1957), con quien compiti¨® en talento y compromiso social. ?l era un mujeriego empedernido, y ambos, comunistas. Aquella mujer de rompe y rasga fue bisexual, ten¨ªa relaciones con mujeres abiertamente, frente a su marido a veces, y era valiente, y libertina a su manera. Sostuvo un discreto romance con el pol¨ªtico ruso exiliado Le¨®n Trotski, perseguido entonces por la dictadura de Stalin. Su nieto estuvo en M¨¦xico durante el rodaje.

Para Frida, la lealtad fue m¨¢s importante que la fidelidad en el matrimonio. 'Ella era capaz del amor incondicional, al que es tan dif¨ªcil de llegar', dice Salma Hayek.

La pel¨ªcula narra la historia de dos mexicanos de trayectorias singulares, convertidos casi en leyenda. El gui¨®n es de Hayden Herrera, y Julie Taymor (Broadway's The Lion Kings, Titus) dirige la pel¨ªcula, en la que numerosos amigos de Salma Hayek, entre ellos Antonio Banderas, intervienen con peque?os papeles, m¨¢s que nada para ayudar a la veracruzana de 33 a?os. El actor australiano Geoffrey Rush, ganador del Oscar al mejor actor, por la cinta Claroscuro, protagonista de Letras prohibidas y de Quills, interpreta a Trotski. El filme es en ingl¨¦s, con algunos giros en espa?ol, como cuando la protagonista llama 'panz¨®n' a su esposo, y ¨¦ste le dice a ella 'friduchita' o 'coraz¨®n'.

Dolores Olmedo, responsable del fideicomiso que guarda buena parte de las obras de Diego Rivera, pidi¨® 100.000 d¨®lares a la actriz Jennifer L¨®pez para permitir la utilizaci¨®n de algunos cuadros de los que es propietaria. No se los dieron. Tambi¨¦n reclam¨® lo suyo a la productora de Salma Hayek, pero regatearon y finalmente se lleg¨® al acuerdo. 'Dolores me dijo que yo era la ¨²nica persona en el mundo a la que le confiaba hacer la pel¨ªcula. Tengo la madurez perfecta para hacerla', subraya la mexicana despu¨¦s de almorzar en el buf¨¦ de los estudios. 'Agua natural y nada de grasa, por favor', pide al cocinero. En una mesa contigua, Geoffrey Rush, y la perilla encanecida del disidente comunista, finalmente asesinado en M¨¦xico por Ram¨®n Mercader, una agente de la URSS.

El brit¨¢nico Alfred Molina (Boggie Nights), de 48 a?os, vive en Los ?ngeles, y habla bastante bien la lengua de Cervantes. Ha le¨ªdo mucho sobre Diego Rivera, uno de los mejores pintores mexicanos de todos los tiempos. Engord¨® 15 kilos para parecerse al maestro, y le aumentaron la nariz con un postizo para emparejarla. 'Me he zambullido en su obra, he visitado exposiciones en Am¨¦rica y Europa, y he hablado con mucha gente que le conoci¨®. Me siento en M¨¦xico penetrado por el esp¨ªritu de Diego'. Lo m¨¢s dif¨ªcil es simular que sabe pintar. 'Definitivamente no tengo cualidades para la pintura'. Lo dijo muy claro el primer d¨ªa. No import¨®. Un equipo de profesionales le ense?¨® a manejar el pincel.

Rivera cre¨ªa en el matrimonio, de hecho se cas¨® tres veces, pero a la antigua. 'Era muy convencional. Con una esposa, ¨¦l pod¨ªa trabajar, mientras ella se dedicaba a la cocina, y a los hijos. Era lo normal en aquellos tiempos'.

La protagonista ha empujado el proyecto acometido ahora por Miramar Films durante seis a?os, y debi¨® vencer la competencia de otras aspirantes, y dificultades serias. 'Fue muy duro, muy duro, muy dif¨ªcil. He estado con diferentes compa?¨ªas. Pero en este momento ya no me acuerdo. Estoy tan feliz haci¨¦ndolo, que se me olvidaron las pesadillas, las noches de no dormir y llorando, las depresiones y los pleitos'. Incluso despu¨¦s de tener todo en la mano, sigui¨® llorando, aunque esta vez de emoci¨®n. 'Ve¨ªa a cualquiera y lloraba. Agarraba el pincel y lloraba. Estaba inservible'.

Los estudios Churubusco reconstruyeron las habitaciones de la casa donde vivi¨® el matrimonio, colg¨® varias r¨¦plicas de sus obras, edific¨® un jard¨ªn interior, y el equipo se desplaz¨® a barrios del Distrito Federal, entre ellos el colonial Coyoac¨¢n, San ?ngel, y otros hist¨®ricos de M¨¦xico. Algunos exteriores fueron filmados en Teotihuac¨¢n, con la Pir¨¢mide de la Luna, el Palacio de los Jaguares, y la Calzada de los Muertos. Frida y Trotski ascendieron all¨ª, trabajosamente a veces, hasta el primer descanso de la Pir¨¢mide de la Luna, en el primer asentamiento urbano planificado de Mesoam¨¦rica, en la Ciudad Sagrada. La escena debi¨® repetirse tambi¨¦n alrededor de ocho veces, pero todo era poco para buscar la perfecci¨®n.

?Por qu¨¦ elegiste a Julie Taymor como directora? 'Porque es mujer, es artista y tiene ojos surrealistas, entiende esa parte de Frida que es para adentro'. El elenco de Frida es granado: 'Ashley Jud (Siempre a tu lado, Doble traici¨®n) da vida a la primera mujer de Rivera, Mia Maestro (Historia de Arturo Sandoval) es Cristina, la hermana de Frida, y Edward Norton (American History X) interpreta a Nelson Rockefeller.

'Casi todas las personas que act¨²an en la pel¨ªcula son amigos que me hicieron un favor porque no les est¨¢n pagando, y a veces son papeles chiquititos'.