'Posiblemente sea una medida que tengamos que tomar'

En la entrevista publicada ayer por Diario 16, Jes¨²s Cardenal, fiscal general del Estado, deja muy clara cu¨¢l es su postura respecto a la actuaci¨®n del fiscal Bartolom¨¦ Vargas en el caso Ercros. La pregunta es: 'Si de forma reiterada ustedes no han estado de acuerdo con el criterio del fiscal que lleva el caso Ercros, ?no ser¨ªa mejor relevarlo por otra persona?'. Y Cardenal responde: 'As¨ª est¨¢ previsto en el propio Estatuto y es una soluci¨®n a la que se puede llegar, porque tenemos el parecer de un fiscal que se opone con el mayoritario en la Junta de Fiscales de Sala. Posiblemente sea una medida que tengamos que tomar, pero la decisi¨®n a¨²n no est¨¢ tomada'.

No es la primera vez que esta idea aparece en la mente del fiscal general del Estado. De hecho, la actuaci¨®n de Vargas, que decidi¨® en marzo de 2000 aconsejar la imputaci¨®n del ministro de Asuntos Exteriores, ya le vali¨® entonces la enemistad de Cardenal. Tanto que el m¨¢ximo responsable de la fiscal¨ªa decidi¨® apartar a su subordinado del caso. Antes le hab¨ªa pedido que cambiase el informe en el que propon¨ªa que el Tribunal Supremo se hiciera cargo del caso porque hab¨ªa encontrado indicios de un posible delito de alzamiento de bienes de Josep Piqu¨¦.

Revuelo judicial

La decisi¨®n caus¨® entonces un enorme revuelo pol¨ªtico y judicial. La medida de apartar a un fiscal de un caso es muy poco habitual. La oposici¨®n critic¨® con dureza a Cardenal por actuar 'en defensa del Gobierno' y la Uni¨®n Progresista de Fiscales le acus¨® de haber 'vulnerado el Estatuto del Ministerio Fiscal'. La Asociaci¨®n de Fiscales, por su parte, lleg¨® a decir que 'el modo de llevar a cabo la decisi¨®n implica la aceptaci¨®n por parte del fiscal general de dos tipos de justicia: una para los poderosos y otra para el resto de ciudadanos'. Unos meses despu¨¦s, el propio Cardenal compareci¨® en el Congreso para explicar esta pol¨¦mica iniciativa y se escud¨® en el fiscal Aranda, superior directo de Vargas.

Al final, el fiscal fue reintegrado y cuando volvi¨® a pedir que Piqu¨¦ fuera imputado, recibi¨® el respaldo de los fiscales del Supremo. La decisi¨®n fue un varapalo para Cardenal, que sin embargo no cedi¨® y convoc¨® a la Junta de Fiscales de Sala para poder revertir esa decisi¨®n. Finalmente, este ¨®rgano adopt¨® una decisi¨®n salom¨®nica que logr¨® evitar lo que el fiscal general quer¨ªa impedir a toda costa: que Piqu¨¦ tuviera que declarar en el Supremo como imputado.

La Junta de Fiscales de Sala opt¨® por la condici¨®n de testigo. Adem¨¢s, y para evitar la imagen de Piqu¨¦ s¨®lo, decidi¨® que deb¨ªan ser todos los miembros del consejo de administraci¨®n de Ercros los que acudan como testigos.