La guerrilla albanesa de Macedonia acepta entregar sus armas a cambio de una amnist¨ªa
Con el desarme se cumple la segunda de las tres condiciones de la OTAN para entrar en el pa¨ªs
La primera condici¨®n, la firma del acuerdo de paz, se logr¨® el lunes. Ahora s¨®lo falta que el alto el fuego se mantenga y resulte duradero, condici¨®n para el despliegue de los soldados de la OTAN (el Consejo Atl¨¢ntico se re¨²ne hoy en Bruselas para planificar la operaci¨®n). Seg¨²n inform¨® la televisi¨®n macedonia, las armas del ELN se recoger¨¢n en 15 puntos y se proceder¨¢ al desarme de los alzados en tres estapas. Se entregar¨¢n primero las armas pesadas. A continuaci¨®n, las autom¨¢ticas, y en una tercera entrega, las armas cortas.
El d¨ªa despu¨¦s de la firma del acuerdo de paz transcurri¨® sin incidentes graves. Se registraron en la madrugada diversos choques armados, sobre todo en la regi¨®n de Tetovo, pero estuvieron muy lejos de alcanzar la gravedad de los enfrentamientos del fin de semana. El avance del ELN resulta sorprendente y palpable en Tetovo, la segunda ciudad del pa¨ªs. Tetovo se considera como una especie de capital albanesa, porque all¨ª los ciudadanos de ese origen son mayor¨ªa abrumadora. En la parte oeste de Tetovo, los alzados albaneses circulan uniformados y armados por las calles como Pedro por su casa: levantan retenes, se comunican con radiotel¨¦fonos y controlan el paso a tan s¨®lo un centenar de metros de la autopista que conduce a Gostivar y Ohrid.
La firma del acuerdo tuvo una acogida negativa entre la opini¨®n p¨²blica eslava. Los peri¨®dicos mostraban escepticismo, que se resume en el titular de primera p¨¢gina del m¨¢s prestigioso, Dnvenik: 'Macedonia ha entregado su Constituci¨®n. ?Entregar¨¢n los albaneses las armas?'. Se trata de la famosa pregunta del mill¨®n, porque sin duda buena parte de los j¨®venes albaneses que se han alzado en armas le han cogido gusto a llevar un subfusil Kal¨¢shnikov al hombro.
Discurso en alban¨¦s Una an¨¦cdota ocurrida tras la firma del acuerdo de paz ilustra sobre el dif¨ªcil camino que le espera a Macedonia. Los dirigentes pol¨ªticos de los partidos albaneses que firmaron el acuerdo, Arben Xhaferi e Imer Imeri, aprovecharon la ocasi¨®n para hacer sus primeras declaraciones en alban¨¦s y poner a prueba el flamante acuerdo. La reacci¨®n de los periodistas macedonios eslavos fue como si les hubiese picado un t¨¢bano. Uno de ellos increp¨® a Xhaferi y le dijo que por qu¨¦ no hablaba tambi¨¦n en turco y en lengua gitana, otra de las minor¨ªas que viven en Macedonia. Un peri¨®dico calific¨® de 'dura provocaci¨®n' la declaraci¨®n en alban¨¦s. Para entrar en el pueblo de Kamenjane, al lado de la autopista y a unos cinco kil¨®metros de Tetovo, el viajero se topa de narices con un ret¨¦n de media docena de individuos vestidos con camisetas azul oscuro con el logotipo del ELN. Los j¨®venes, de aspecto campesino, van armados con el famoso AK-47, m¨¢s conocido como Kal¨¢shnikov, y se advierte que se sienten bien en su papel de autoridad que decide qui¨¦n pasa al pueblo. En las camisetas llevan grabado '112 Brigada Muyahid Aliu del ELK'. El tal Aliu naci¨® en Poroj, un pueblo al lado de Tetovo, el 15 de enero de 1974 y no vivi¨® mucho, s¨®lo 25 a?os. Muri¨® Aliu el 14 de abril de 1999 en Kosovo, en lucha contra el Ej¨¦rcito de Yugoslavia. El control del periodista se centra en las acreditaciones y no registran el veh¨ªculo. No se advierte que se comporten con especial sa?a ni fanatismo. La imprudencia del enviado de este diario de llevar en la cartera una credencial del Gobierno de Yugoslavia, debajo de la de las fuerzas de paz para Kosovo (Kfor), s¨®lo provoc¨®, al ser descubierta, que uno de los j¨®venes del ELN mirase una y otra vez todos los papeles, pero no impidi¨® el paso. El ELK de Kosovo hubiese organizado un n¨²mero importante ante semejante error.
Antes de llegar al puesto de mando, para entrevistarse con el comandante Malisevo, jefe del ELN en la zona, se atraviesan otros retenes que tampoco dan muestras de excesiva soberbia armada. Malisevo ha abandonado el lugar, se supone que para acudir a una reuni¨®n con los mandos supremos del ELN. En Kamenjane hace varios d¨ªas que el ELN controla el pueblo. Una de las medidas adoptadas por los alzados fue desalojar un local de chicas de alterne b¨²lgaras que entreten¨ªan al personal de la localidad a base de ejercicios de danza del vientre y descorche.
En la parte oeste de Tetovo, los hombres del ELN se mueven a sus anchas, toman caf¨¦ con los subfusiles sobre las rodillas y algunos llevan granadas al cinto. Todav¨ªa no hab¨ªa circulado la noticia de que el mando pol¨ªtico hab¨ªa aceptado el desarme.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.