El Consell recorta inversiones para pagar gastos de funcionamiento y facturas de otras empresas

Una s¨®la modificaci¨®n de cr¨¦dito en el ¨¢rea de Sanidad ilustra la distancia entre las cuentas que aprueban las Cortes y el destino real de los fondos. El pasado 12 de junio el Consell acord¨® recortar el cap¨ªtulo de inversiones directas en centros de atenci¨®n primaria a la mitad y retir¨® 4.400 millones sobre los 9.900 previstos. Tambi¨¦n se recortaron mil millones de las inversiones previstas para construcci¨®n y mejora de centros de atenci¨®n especializada. Los servicios centrales de Sanidad tambi¨¦n renunciaron a 40 millones de los fondos previstos para mejora de equipos. En conjunto, un recorte de 5.440 millones, la cuarta parte del presupuesto total de inversiones directas en el ¨¢rea de Sanidad.

El dinero se destin¨®, seg¨²n el DOGV, a 'atender el funcionamiento de nuevos servicios en varios centros sanitarios'. Los responsables de Sanidad olvidaron que una vez construido un centro debe financiarse su funcionamiento ordinario.

Los recortes en inversiones se detectan tambi¨¦n en otras ¨¢reas. El 22 de mayo, el Consell acord¨® una sorprendente operaci¨®n para destinar 3.167 millones de pesetas a una partida del cap¨ªtulo de Gastos Diversos, cuya dotaci¨®n inicial apenas ascend¨ªa a 45 millones para pagar 'trabajos realizados por otras empresas'.

Varias ¨¢reas recortaron sus presupuestos hasta logar sumar m¨¢s de tres mil millones. Obras P¨²blicas, por ejemplo, dispon¨ªa de 1.800 millones de pesetas que deb¨ªa transferir para que otras administraciones y ayuntamientos ejecutar¨¢n inversiones en infraestructura hidr¨¢ulica o acometieran obras de urgente necesidad. Tal cantidad se redujo exactamente a la mitad.

Agricultura tambi¨¦n recort¨® su cap¨ªtulo de inversiones, que ascend¨ªa a 7.800 millones, en un total de 1.055. La partida m¨¢s afectada fue la de estructuras agrarias, que sufri¨® un recorte de 744 millones.

Medio Ambiente tambi¨¦n sacrific¨® 822 millones de su cap¨ªtulo de inversiones en las partidas destinadas a restauraci¨®n y atenci¨®n a zonas degradadas, con un recorte de 350 millones, y a actuaciones sobre espacios naturales, inversiones en flora o reposici¨®n de animales.

La quinta parte de tales recortes, 610 millones de pesetas, se destinaron a afrontar las participaci¨®n de la Generalitat en las actuaciones de emergencia para controlar la encefalopat¨ªa espongiforme bovina, el denominado mal de las vacas locas.

El resto del dinero acumulado en los diversos recortes -2.557 millones- apenas permaneci¨® una semana consignado en la secci¨®n de Gastos Diversos. El 29 de mayo se trasladaron 700 millones a gastos de funcionamiento de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n. Otros 1.020 millones se destinaron a gastos de funcionamiento de tres dependencias de la Consejer¨ªa de Bienestar Social. Los restantes 857 millones tambi¨¦n fueron destinados a Bienestar Social para dotar transferencias corrientes.

Es decir, el Consell recort¨® cerca de 3.200 millones de pesetas en inversiones; los deposit¨® en una partida difusa durante una semana; y luego destin¨® esos fondos a pagar facturas en las partidas de funcionamiento ordinario de Educaci¨®n y Bienestar. Una perfecta operaci¨®n puente para evitar trasladar directamente fondos destinados a inversiones a gastos de funcionamiento ordinario.

Una resoluci¨®n del consejero de Hacienda del 20 de abril saca a relucir otro recorte de inversiones reales en Obras P¨²blicas debido, en esta ocasi¨®n, a un caso flagrante de mala administraci¨®n. El DOGV explica que se recortan 500 millones del cap¨ªtulo de inversiones porque 'como consecuencia de la ejecuci¨®n del presupuesto, se originan determinadas obligaciones que derivan en el devengo de intereses de demora'. Es decir, los retrasos en la gesti¨®n de expedientes generan intereses de demora.

Entre las generaciones de cr¨¦dito destaca una a favor de Sanidad, que deriva de un acuerdo alcanzado entre el Gobierno central y Farmaindustria en 1998. Sanidad eleva sus ingresos en 3.200 millones. El destino es, como no, gastos de personal y facturas por prestaciones externas.

Pero lo que no recoge la ¨²ltima edici¨®n del DOGV es el volumen de ingresos pendientes que arrastra Sanidad desde 1998 y a?os anteriores.