'Eloy, de ¨¦sta te hacen comisario'
Sito Mi?anco segu¨ªa pregunt¨¢ndose ante la polic¨ªa c¨®mo fue capturado cuando m¨¢s seguro se sent¨ªa
Jos¨¦ Ram¨®n Prado Bugallo, Sito Mi?anco, estaba volcado sobre una carta de navegaci¨®n del Atl¨¢ntico sur. Un equipo de comunicaci¨®n v¨ªa sat¨¦lite Thrane & Thrane y tres tel¨¦fonos Inmarsat lo manten¨ªan en permanente contacto con su futuro econ¨®mico: un cargamento de unas cinco toneladas de coca¨ªna oculto en una caleta construida en el barco de bandera camboyana Agios Constandino, localizado a unas 1.000 millas de Guyana Francesa, en las coordenadas 13? N, 20? O.
Sito Mi?anco se sent¨ªa seguro: hab¨ªa abandonado hace unos d¨ªas su chal¨¦ de la Moraleja, una lujosa urbanizaci¨®n de Madrid, con 50 millones de pesetas en met¨¢lico para trasladarse a otro de la urbanizaci¨®n el Bosque, de Villaviciosa de Od¨®n, tambi¨¦n en Madrid, sin apercibirse de que ¨¦l y sus dos guardaespaldas hab¨ªan sido mordidos (localizados) y seguidos.
Sobre las dos de la madrugada del jueves, una algarab¨ªa de voces conminatorias salt¨® a sus espaldas. Los GEO acababan de entrar en el chal¨¦, alquilado por dos colombianos, en el que se sent¨ªa tan seguro. Tras los agentes especiales, Sito Mi?anco, considerado el n¨²mero uno de los narcotraficantes gallegos, a larga distancia de los Charlines o de Laureano Obi?a, vio una cara conocida. 'Hombre, Eloy, de ¨¦sta te hacen comisario'. El polic¨ªa le contest¨®: 'Sito, ya soy comisario'. 'Bueno, pues te van a llenar de medallas', replic¨® el narco mientras las esposas ce?¨ªan sus mu?ecas, m¨¢s gruesas que anta?o por mor de unos kilos de m¨¢s.
Sito Mi?anco, 45 a?os, se puso inmediatamente a echar cuentas, ya no sobre el beneficio del blanco cargamento que controlaba -compr¨® el kilo de coca¨ªna en la selva colombiana a unas 190.000 pesetas y lo iba a vender en Europa a tres millones- sino sobre su negro futuro. Buen conocedor del nuevo C¨®digo Penal, calcul¨® que le pod¨ªan caer 20 a?os. 'Voy a salir hecho un viejo', dijo el capo gallego, objetivo prioritario y primordial de la Unidad Central de Estupefacientes de la polic¨ªa, desde que all¨¢ por el mes de enero se puso manos a la obra con el juez Central de Instrucci¨®n n¨²mero 6 de la Audiencia Nacional, Juan del Olmo, quien mantiene secreto el sumario.
Mientras Sito segu¨ªa cabilanco, los GEO ten¨ªan ya bajo su control el Agios Constandino, que declaraba una carga legal de chatarra met¨¢lica -de las que las acer¨ªas espa?olas son grandes consumidoras- y proced¨ªa, tras botar una lancha r¨¢pida desde un barco de la DEA (la agencia antinarc¨®ticos de Estados Unidos), al abordaje del pesquero Titiana, de 38 metros de eslora y de bandera de Togo, que ten¨ªa la misi¨®n de recoger la droga del buque nodriza.
La actuaci¨®n del barco de la DEA -por ninguno de la Marina francesa, como se apunt¨® ayer- tambi¨¦n fue una sorpresa para Prago Bugallo. 'Pero, ?c¨®mo me hab¨¦is cogido, si el Petrel lo tenemos controlado en el puerto?', se pregunt¨® el capo, conocedor de que la polic¨ªa suele utilizar para sus asaltos en altamar el antedicho Petrel, el buque de caza del Servicio de Vigilancia Aduanera. Los agentes que lo hab¨ªan capturado esbozaron una sonrisa.
La polic¨ªa calcula que la banda de Sito ten¨ªa intenci¨®n de llegar con el pesquero hasta las costas de Galicia y, una vez all¨ª, deb¨ªan tomar una decisi¨®n: entrar en un puerto que se considerara seguro para descargar o bien lanzar una andanada de lanchas planeadoras para llevar la droga a tierra. El viejo mariscador Sito Mi?anco se ha jactado en m¨¢s de una ocasi¨®n de haber pilotado ¨¦l mismo alguna de estas planeadoras.
Los barcos llegar¨¢n finalmente a Galicia pero al mando de la polic¨ªa, aunque el viaje ser¨¢ lento debido a que el pesquero ha sufrido una aver¨ªa y tiene que ser remolcado. Los agentes ya han localizado la droga oculta en una caleta protegida por una plancha met¨¢lica soldada al casco. Los reactivos qu¨ªmicos han dado positivo, por lo que el s¨ªndrome Privilege, el de aquel cargamento de coca¨ªna que nunca apareci¨® y nunca lleg¨®, ya ha sido superado.
Sito Mi?anco y su fiel lugarteniente, el colombiano Enrique Arango, trincado en un hotel madrile?o, tendr¨¢n que dar hoy explicaciones al juez. Pero ayer Sito segu¨ªa d¨¢ndole vueltas a la admonici¨®n de uno de los investigadores que lo detuvo, viejo conocido por haberse cruzado en m¨¢s de una ocasi¨®n en sus caminos opuestos: 'No has sabido retirarte a tiempo'. Y segu¨ªa cabilando sobre por qu¨¦ pese a todas las precauciones, medidas de seguridad, cambio de casa, guardaespaldas y chivatos, los polic¨ªas, insomnes tras d¨ªas de vigilancia, le hab¨ªan vuelto a echar el guante con tanta seguridad. 'Ya me enterar¨¦', desafi¨® a sus custodios.
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