El Ayuntamiento reconoce que el ¨¦xito popular de la Aste Nagusia ha supuesto m¨¢s delitos
La corporaci¨®n tiene previsto trasladar los conciertos nocturnos a otras zonas de Bilbao
La participaci¨®n ciudadana en la ¨²ltima Aste Nagusia de Bilbao super¨® la del pasado a?o y sac¨® a la calle a 330.000 personas. Jos¨¦ Luis Sabas, concejal de Cultura, expres¨® que esta ¨²ltima edici¨®n deber¨¢ marcar el futuro de las fiestas.El ¨²ltimo recuerdo visible de las fiestas de la Semana Grande de Bilbao se esfumaba ayer con la retirada del montaje de alguna txosna que a¨²n estaba en pie. Mientras, los principales responsables del festejo, Ayuntamiento y comparsas, se felicitaban en conferencia de prensa por la masiva participaci¨®n ciudadana. Jos¨¦ Luis Sabas, concejal del ¨¢rea de Cultura, destac¨® que la Aste Nagusia es ya un reclamo tur¨ªstico. Para demostrarlo aport¨® una serie de datos. As¨ª, la ocupaci¨®n hotelera alcanz¨® una media del 76,5%, que lleg¨® al cien por cien en el caso de albergues y pensiones. Tambi¨¦n la presencia de turistas extranjeros ha aumentado en un 25% respecto a las fiestas del a?o pasado. Italianos, brit¨¢nicos, franceses y alemanes son los principales visitantes del exteriors. De los 8.500 personas que atendi¨® la sociedad Bilbao Iniciativas Tur¨ªsticas, el 38% proced¨ªa de otras comunidades espa?olas, fundamentalmente Catalu?a y Madrid.
'Litronas' y drogas
Sin embargo, el ¨¦xito popular de las fiestas tuvo tambi¨¦n su lado negativo. La afluencia masiva conllev¨® un incremento 'importante' de actos delictivos con respecto a otras ediciones. As¨ª, hubo agresiones, ri?as, robos con fuerza y hurtos, a pesar de que la Polic¨ªa Municipal increment¨® su presencia. Jaime Urrutia, jefe de la guardia urbana, y Sabas expresaron su preocupaci¨®n por el aumento de delitos, que atribuyeron particularmente a los 'que pasan horas y horas bebiendo litronas o botell¨®n' sin incorporarse a los actos festivos.
Tambi¨¦n apuntaron ambos a los seguidores de la denominada cultura del bakalao y que consumen distintos tipos de drogas. Son aquellos, dijo Sabas, que durante el resto del a?o se divierten en discotecas y recintos cerrados y que en fiestas toman algunas zonas de la capital. 'Se trata de delincuencia por delincuencia, violencia por violencia. [Gente que va] buscando pelea sin motivo y pegando a quien les llame la atenci¨®n. Para estos ciudadanos ¨¦ste es el primer y ¨²ltimo aviso', advirti¨® Sabas, al tiempo que anunci¨® la adopci¨®n de medidas para que en el futuro se integren en la fiesta o salgan de ella. 'En zonas como la Plaza Circular, la gente se ve¨ªa muy pasada', remach¨® Urrutia. El aviso oficial tambi¨¦n lo quiso extender el concejal a los 'meones y meonas' que, a pesar de los 309 urinarios p¨²blicos instalados (un 66% m¨¢s que el pasado a?o), eligieron la v¨ªa p¨²blica para aliviarse. 'No entendemos la afici¨®n a orinar en grupo contra nuestros edificios', asegur¨® Sabas.
Sin embargo, los 'elementos negativos' no anularon la satisfacci¨®n por el resultado 'sobresaliente' de la organizaci¨®n. Los conciertos nocturnos, con un coste de 75 millones, fueron seguidos por 178.000 espectadores. Pero, pese a su ¨¦xito multitudinario, no pudieron desplazar a los fuegos artificiales como la atracci¨®n del programa preferida de los bilba¨ªnos. Para la pr¨®xima edici¨®n, el Ayuntamiento tiene previsto 'grandes emociones', ya que enfrentar¨¢ a las empresas pirot¨¦cnicas ganadoras de los ¨²ltimos cinco a?os. Adem¨¢s, prev¨¦ instituir un premio del p¨²blico, que podr¨ªa otorgarse a trav¨¦s de la participaci¨®n en Internet, telef¨®nica o a pie de calle.
Nuevos retos
La Semana Grande tambi¨¦n ha servido para demostrar que los recintos de los conciertos est¨¢n saturados. La plaza del Gas, la P¨¦rgola y la Plaza Nueva han llegado a su l¨ªmite de capacidad. Por ello, el Ayuntamiento busca nuevos espacios. Planea adaptar la campa de Miraflores para conciertos y realizar obras en una parte del Arenal, junto a la r¨ªa, donde la construcci¨®n del aparcamiento en la zona obligar¨¢ a reubicar las txosnas. Finalmente, se conceder¨¢ a¨²n m¨¢s relevancia a la programaci¨®n de actos diurnos, sobre todo, infantiles.
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