El cine experimental y el comercial se dan la mano en la 58? Mostra de Venecia

Una parte de la cr¨ªtica de Estados Unidos la ha vapuleado y la respuesta de taquilla tampoco ha sido lo que se esperaba, pero la Mostra de Cine de Venecia conf¨ªa plenamente en A.I (Inteligencia Artificial), la pel¨ªcula dirigida por Steven Spielberg, siguiendo un gui¨®n del desaparecido Stanley Kubrick, para mantener su reputaci¨®n de festival exquisito y popular. El filme no abre el certamen, que se inaugura hoy con la proyecci¨®n de Dust, del macedonio Milcho Manchevski, pero la prensa italiana coincide en considerarlo como el m¨¢ximo acontecimiento de esta Mostra. Y es que el Festival del Lido lo quiere todo. De un lado, el 'gancho' de Hollywood, con sus grandes producciones y sus estrellas, tan ubicuas que a duras penas logran ya mantener su glamour. Del otro, el cine de autor, con nuevos y viejos directores llegados de los cinco continentes, con historias ex¨®ticas o terribles que traen al Lido el sabor y el color de ese pedazo enorme del Planeta que ha salido perdiendo con la globalizaci¨®n.

La 58? edici¨®n de la Mostra, al frente de cuyo jurado est¨¢ el cineasta italiano Nanni Moretti, se inicia hoy bajo el signo del m¨¢s absoluto mestizaje. Con raz¨®n hay quien compara al festival veneciano con un verdadero bazar cinematogr¨¢fico. Lo que constituye una tendencia hist¨®rica, se agudiza un poco m¨¢s este a?o, con un aumento de pel¨ªculas procedentes de Am¨¦rica Latina y Asia. Esta edici¨®n del festival ser¨¢ recordada adem¨¢s por ser la primera que duplica el certamen. Su director, Alberto Barbera, siguiendo los pasos de Cannes, ha decidido que a la secci¨®n oficial, Venecia 58, en la que compiten 21 pel¨ªculas por el Le¨®n de Oro, el m¨¢s preciado de los galardones, le siga en paralelo otra, Cinema del presente, en la que otros 22 filmes se disputar¨¢n el Le¨®n del A?o y un nada desde?able premio de 100.000 d¨®lares (cerca de 20 millones de pesetas). En este segundo concurso se han incluido sobre todo pel¨ªculas y autores que aportan originalidad y transgresi¨®n m¨¢s que perfecci¨®n y maestr¨ªa. Abrir¨¢ esta secci¨®n L' amore probabilmente, de Giuseppe Bertolucci. En v¨ªsperas de la inauguraci¨®n de la Mostra, no se conoc¨ªa a¨²n el t¨ªtulo de la pel¨ªcula n¨²mero 22 que competir¨¢ por el Le¨®n del A?o. Se trata de una cinta china cuya directora se ha mantenido en secreto hasta el final para evitar que las autoridades de la Rep¨²blica Popular le impidan a ¨²ltima hora venir a Venecia. Habr¨¢ adem¨¢s los premios tradicionales, como el Le¨®n a la Carrera dedicado a Eric Rohmer, que presenta una historia muy cr¨ªtica de la Revoluci¨®n Francesa, L'anglaise et le duc, y los premios de la cr¨ªtica, y al mejor director novel, entre otros.

Apoyo de Europa

Muchas de las cintas que se presentan en las dos secciones a concurso han sido realizadas gracias al apoyo econ¨®mico de Europa. Es el caso del filme alban¨¦s Tirana year zero, producido por Francia y B¨¦lgica, del rumano L'apr¨¦s midi d'un tortionnaire, producci¨®n francesa y dirigido por Lucien Pintilie, un veterano que caus¨® excelente impresi¨®n en la pasada Mostra, y de muchas de las cintas latinoamericanas, coproducidas por Espa?a, una de las cuales, la del mexicano Alfonso Cuar¨®n, Y tu mam¨¢ tambi¨¦n, que cuenta con Maribel Verd¨² entre sus int¨¦rpretes, ha sido incluida en la secci¨®n Venecia 58, es decir, la m¨¢s importante de la Mostra.

No s¨®lo abundan las coproducciones entre el centenar largo de pel¨ªculas que ser¨¢n exhibidas (el grupo de filmes fuera de concurso es el m¨¢s numeroso) en las seis salas de proyecci¨®n del Lido entre hoy y el pr¨®ximo 8 de septiembre, sino que la mezcla cultural traspasa a las historias del celuloide. La t¨®nica general es ¨¦sta: un macedonio, Milcho Manchevski, ganador a mediados de los noventa de un Le¨®n de Oro con su pel¨ªcula Antes de la lluvia, dirige la cinta inaugural de esta Mostra, Dust, una especie de western anti-Hollywood. El director brasile?o Walter Salles firma Abril despeda?ado, pel¨ªcula basada en un relato del escritor alban¨¦s Ismail Kadar¨¦, mientras la revelaci¨®n de hace dos a?os, el director serbio Goran Paskaljevic, nos presenta una historia irlandesa, How Harry became a tree, que, dicen, no pasa de ser una met¨¢fora de la ex Yugoslavia. El espa?ol Alejandro Amen¨¢bar llega al Lido con Los otros. Rodada en ingl¨¦s, y de producci¨®n espa?ola, ha tenido una importante acogida tanto de cr¨ªtica como de p¨²blico en EE.UU. El israel¨ª Amos Gitai vuelve a recrear su pa¨ªs -Eden es el t¨ªtulo de la pel¨ªcula- con la ayuda de un texto de Arthur Miller que bien poco tiene que ver con el Estado jud¨ªo. La dificultad de encontrar guiones originales justifica esta especie de yuxtaposici¨®n de historias y directores. Quedan tambi¨¦n los directores fieles a s¨ª mismos. Por ejemplo, el ingl¨¦s Ken Loach que regresa a Venecia con otra historia de trabajadores agredidos por la pol¨ªtica tory de privatizaciones. En The Navigators, coproducci¨®n espa?ola, Loach retrata a un grupo de obreros de los sufridos ferrocarriles brit¨¢nicos, con la maestr¨ªa y virulencia izquierdista (antilaborista tambi¨¦n) que le ha hecho famoso. Otro autor previsible, en este sentido, el norteamericano Woody Allen, presenta, como siempre fuera de concurso, su ¨²ltima comedia, The Curse of the Jade Escorpion. Un filme c¨®mico que ha recibido p¨¦simas cr¨ªticas en su pa¨ªs pese a contar con el apoyo de dos actrices taquilleras, Helen Hunt y Charlize Theron.

No faltan -?qu¨¦ Mostra ser¨ªa ¨¦sta si faltaran?- las cintas indias e iran¨ªes, coreanas, chinas y rumanas. Mira Nair, autora de una pel¨ªcula conmovedora como Salaam Bombay, presenta en la secci¨®n oficial Venecia 58, -junto a Amenabar, Gitai y Paskaljevic, entre otros- una historia local, Monsoon Wedding, una fiesta de matrimonio en el Punjab sin que esta vez el drama relatado supere los l¨ªmites del vivir cotidiano. El iran¨ª Babak Payami trae a Venecia una historia alentadora de las que emocionan al p¨²blico period¨ªstico de la Mostra. El voto es secreto, t¨ªtulo de la pel¨ªcula, narra la peripecia de una mujer que atraviesa el Ir¨¢n profundo con una urna para permitir a sus conciudadanos ejercer el democr¨¢tico derecho del voto. Algunos cr¨ªticos italianos dan ya por virtual ganadora a esta pel¨ªcula, bas¨¢ndose en los supuestos gustos del presidente del jurado veneciano, Nanni Moretti, un director muy particular que detesta el cine de acci¨®n y violencia de Hollywood.

A¨²n as¨ª, ser¨ªa extra?o que el prestigioso Le¨®n de Oro recayera en uno de los t¨ªtulos provocadores como Bully, pel¨ªcula del norteamericano Larry Clark que ya caus¨® esc¨¢ndalo con otra historia de chavales, Kids. Bully tendr¨¢ que competir con otra cinta presentada tambi¨¦n en la secci¨®n Venecia 58, Hundstage, del director austriaco Ulrich Seidi que narra episodios de locura ordinaria no aptos para espectadores sensibles.