El enemigo en casa
Mohamed Shaker Habishi, el ¨²ltimo suicida de la Intifada palestina, era un ciudadano ¨¢rabe-israel¨ª
Mohamed Shaker Habishi, de 48 a?os, es el primer ciudadano israel¨ª autoinmolado en favor de la causa palestina. Su atentado del pasado domingo en Nahiriya, donde caus¨® tres muertos y decenas de heridos, ha conmocionado a la clase pol¨ªtica de Israel, que parece haber descubierto con pavor que el enemigo puede tambi¨¦n estar escondido dentro de casa, en cualquier hogar arabo-israel¨ª, lo que convierte a cerca de un mill¨®n de habitantes, el 20% de la poblaci¨®n, en sospechosos.
El pueblo de Abu Sinan al norte de Galilea, cerca de L¨ªbano, donde conviven mitad por mitad drusos y arabes -11.000 ciudadanos-, se sent¨ªa ayer tan desorientado como el primer ministro Ariel Sharon. Sus habitantes apenas eran capaces de balbucear nada coherente que pudiera explicar el comportamiento de este vecino, al que todos conoc¨ªan por haberse presentado el pasado a?o a las municipales encabezando una coalici¨®n del Movimiento Isl¨¢mico local.
'Apenas consigui¨® unos 400 votos', aseguraba un aldeano, mientras dejaba entrever las suspicacias de la poblaci¨®n hacia cualquiera de los miembros de la familia Shaker, un clan oriundo de San Juan de Acre que en los ¨²ltimos a?os ha logrado una boyante posici¨®n econ¨®mica gracias al comercio de los pollos y de la construcci¨®n. La pujante trayectoria de los Shaker ha coincidido con un cambio de rumbo en la vida del patriarca, que decidi¨® en un momento dado entregarse de lleno a la causa isl¨¢mica, convertirse en imam y acercarse a las filas del movimiento palestino fundamentalista de Hamas.
Hace tres semanas, Mohamed Shaker Habishi desapareci¨® de su casa dejando a sus dos esposas, a sus ocho hijos y los libros de contabilidad de todos sus negocios. Su desaparici¨®n hizo aumentar los recelos de la polic¨ªa y el Ej¨¦rcito israel¨ª, que sospechaban de su vinculaci¨®n con alguna de las c¨¦lulas terroristas que act¨²an desde dentro de Israel, apoyando la causa y los grupos activistas palestinos. La huida se oficializ¨® el pasado 1 de septiembre, despu¨¦s de que un grupo de soldados fueran a buscarlo a su casa, pocos minutos despu¨¦s de las cinco de la ma?ana, en medio de un gran despliegue de armas y veh¨ªculos.
'Nosotros no tenemos nada que ver con lo que ha hecho este hombre', aseguraba con desprecio otro vecino de Abu Sinan, ¨¦ste perteneciente a la comunidad drusa, trazando as¨ª una l¨ªnea fronteriza entre las dos colectividades que se reparten la ciudad. Luego, como si tratara de marcar las distancias y confirmar sus palabras con hechos, despliega, por encima del tejado de su casa, una enorme bandera blanquiazul de Israel, recordando que en esta misma poblaci¨®n vive desde a?os Yussef Mishlav, el primer general druso del Ej¨¦rcito de Israel, y que en la localidad de al lado, Julis, habita el ministro Saleh Tarifi. Otros vecinos drusos m¨¢s radicales trataban de recoger firmas pidiendo la expulsi¨®n de los Shaker del pueblo.
Los diputados ultranacionalistas jud¨ªos atacan mientras a la comunidad arabe-israel¨ª, a la que consideran vinculada a la causa palestina, y propugnan la disoluci¨®n y prohibici¨®n de todas sus organizaciones isl¨¢micas. El dirigente del partido nacionalista Likud, Israel Katz, ha llegado a reclamar sin ambig¨¹edades que se destruya la casa familiar de los Shaker, como ejemplo para el resto de la comunidad ¨¢rabe de Israel.
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