'Los islamistas marroqu¨ªes creen que los atentados benefician a Israel'
Mohamed Darif, de 42 a?os, profesor de Ciencias Pol¨ªticas en la Universidad de Mohamedia, es uno de los principales expertos marroqu¨ªes en islamismo, un tema sobre el que ha escrito 17 libros. A pesar de que ha ayudado al principal l¨ªder islamista, el jeque Yassin, a presentar en p¨²blico algunas de sus obras, Darif no pertenece a Justicia y Caridad, el principal movimiento integrista del pa¨ªs, que goza de cierta tolerancia aunque no ha sido legalizado.
Pregunta. ?C¨®mo han reaccionado los islamistas marroqu¨ªes ante los atentados?
Respuesta. Ha sido una triple reacci¨®n: primero han condenado los atentados; en segundo lugar, han manifestado su rechazo a un apoyo incondicional a EE UU, y dudan abiertamente de que Osama Bin Laden los haya organizado. Consideran que han sido golpes tan brutales y a la vez precisos que dif¨ªcilmente pueden ser obra de un grupo armado. Si se demostrase que es Bin Laden, todos dir¨ªan que el millonario saud¨ª les ha jugado una mala pasada.
'Si las autoridades de Estados Unidos han detenido a ¨¢rabes es porque se han precipitado, han ido a lo f¨¢cil'
P. Hace diez a?os Marruecos se incorpor¨® a una alianza militar contra Irak, el invasor de Kuwait, dirigida por EE UU. ?Ser¨ªa posible esto hoy?
R. Basta con leer la prensa para darse cuenta de que gran parte de la opini¨®n p¨²blica, empezando por los islamistas, se opone a cualquier alianza contra un pa¨ªs isl¨¢mico, cualquiera que sea. Los islamistas critican adem¨¢s al consejo de los ulemas marroqu¨ªes por no haberse pronunciado abiertamente contra la participaci¨®n de Marruecos en una coalici¨®n de esa ¨ªndole.
P. El jefe de los ulemas, Mohamed Ysef, s¨ª acudi¨®, en cambio, el domingo pasado a una ceremonia ecum¨¦nica en Rabat para honrar la memoria de las v¨ªctimas americanas.
R. Esa ceremonia ha sido tambi¨¦n criticada por los islamistas. Se preguntan por qu¨¦ no se organizan actos similares para honrar a los m¨¢rtires de la Intifada palestina. Los islamistas no paran de decir que los ulemas demuestran que est¨¢n a las ¨®rdenes de Palacio.
P. Supongamos que, como sostienen los seguidores del jeque Yassin, los atentados no han sido obra de Bin Laden ni de ning¨²n musulm¨¢n. ?Qui¨¦n ser¨ªa el autor?
R. Los jud¨ªos. Los islamistas se preguntan a qui¨¦n beneficia el crimen; y contestan que los atentados tapan las exacciones israel¨ªes en Palestina que permiten a Ariel Sharon actuar con m¨¢s contudencia frente a la Intifada; que Israel reacciona as¨ª a la humillaci¨®n que sufri¨® en la conferencia de Durban. Y si el FBI ha detenido a ¨¢rabes, es porque se ha precipitado, ha ido a lo f¨¢cil.
P. La opini¨®n p¨²blica marroqu¨ª es antiamericana.
R. S¨ª, pero por razones pol¨ªticas. Se est¨¢ contra EE UU no porque se rechace un tipo de sociedad, sino porque es el valedor de Israel. La hostilidad hacia los jud¨ªos va m¨¢s all¨¢, es religiosa.
P. ?Que sentimientos inspira Europa?
R. Completamente diferentes. Europa goza de aprecio. Se la ve como menos incondicional de Israel. Es una tierra de acogida que da trabajo a muchos marroqu¨ªes y en la que muchos islamistas han encontrado cobijo.
P. ?C¨®mo repercutir¨¢n los atentados en la pol¨ªtica interna?
R. Hassan II no se encar¨® con los islamistas. Un a?o despu¨¦s de su llegada al trono, Mohamed VI s¨ª est¨¢ empe?ado en contenerlos. Las autoridades creen que la estrategia anterior no ha impedido un auge del islamismo. En el verano de 2000 empezaron los enfrentamientos en las playas, a las que acud¨ªan a rezar sus militantes; en el oto?o se trasladaron a las universidades y en diciembre las manifestaciones en ocho ciudades fueron duramente reprimidas. Tras los atentados, la tolerancia con Justicia y Caridad ser¨¢ a¨²n menor.
P. ?Por eso los seguidores de Yassin son m¨¢s discretos desde enero?
R. S¨ª. Han bajado la cabeza para no ser golpeados. Ponen m¨¢s ¨¦nfasis en la religi¨®n y dan la impresi¨®n de olvidarse de la pol¨ªtica. Es una t¨¢ctica para sortear la represi¨®n. Pero, en el fondo, Yassin propugna un modelo cercano al iran¨ª, en el que los religiosos gu¨ªan a los pol¨ªticos para que ¨¦stos gestionen el d¨ªa a d¨ªa.
P. ?Los islamistas est¨¢n en auge en Marruecos?
R. S¨ª y es f¨¢cil de entender: son la ¨²nica oposici¨®n. Lo que pasa es que no son una oposici¨®n al Gobierno. Son una oposici¨®n al sistema. Canalizan todo el descontento popular.
P. ?Cu¨¢ntos grupos islamistas hay en Marruecos?
R. Muchos, pero el 90% de los islamistas milita en Justicia y Caridad. Su fuerza reside en su capacidad de movilizaci¨®n. Nadie puede sacar a tanta gente a la calle. Est¨¢n implantados en todo el pa¨ªs y en todas las capas sociales, pero especialmente en los suburbios urbanos y en los ambientes universitarios. Ahora est¨¢n enviando a militantes a zonas rurales para incrementar su influencia. La actividad social -escuchar al pr¨®jimo y ayudarle con consejos y materialmente- es el anzuelo con el que ganan afiliados.
P. Dentro de un a?o se celebrar¨¢n unas elecciones generales de las que el primer ministro asegura que ser¨¢n aut¨¦nticamente democr¨¢ticas. ?Participar¨¢ en ellas Justicia y Caridad?
R. No. Jur¨ªdicamente s¨®lo pueden presentarse los partidos, y el movimiento de Yassin es una asociaci¨®n que no ha sido ni siquiera reconocida. Aunque cambie la ley, tampoco lo har¨ªa, porque la campa?a no ser¨¢ libre.
P. ?Como se financia Justicia y Caridad?
R. Las autoridades tienen, por una vez, algo de raz¨®n. Su principal fuente de financiaci¨®n est¨¢ fuera de Marruecos, pero no es ninguna potencia extranjera. Es la emigraci¨®n en Europa que cotiza. A eso hay que a?adir que cada militante en Marruecos entrega el 2,5% de su sueldo.
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