Los v¨ªdeos sangrientos de la c¨¦lula 'durmiente'

La grabaci¨®n en v¨ªdeo casero es de primera mano, sin signos aparentes de ser copia de una copia. Las im¨¢genes, movidas ligeramente por el temblor de manos de quien porta la c¨¢mara, muestran una caravana de tres veh¨ªculos militares que discurre lentamente por un paraje de Argelia, m¨¢s que probablemente de La Cabilia. La fecha est¨¢ clara: 1 de septiembre de 1999. El convoy toma una curva y, de repente, uno de los veh¨ªculos salta por los aires entre una nube de fuego, polvo y humo. El c¨¢mara se agita, cae al suelo, graba las con¨ªferas bajas que pueblan la zona. La siguiente imagen es demoledora: un plano sostenido de cuatro militares degollados, uno de ellos con un ligero signo de vida, con una nube de personas saqueando armas, pertrechos y efectos personales.

Las im¨¢genes estaban grabadas en una de las 32 cintas de v¨ªdeo que han sido incautadas a los miembros de la c¨¦lula terrorista desarticulada en Espa?a, de los que, al cierre de esta edici¨®n, s¨®lo hab¨ªan sido visionadas cinco. 'Este v¨ªdeo ha sido grabado por alguno de los propios detenidos o por alguna persona directamente relacionados con ellos, porque las im¨¢genes creemos que casi son las originales', asegur¨® ayer el director general de la Polic¨ªa, Juan Cotino, para quien los detenidos en Espa?a eran una 'c¨¦lula dormida a la espera de ser activada cuando se considerara oportuno'.

?ste explic¨® que dichas cintas estaban en poder de los detenidos para mostr¨¢rselas a futuros aspirantes a sumarse a las filas del Grupo Salafista para la Predicaci¨®n y el Combate (GSPC), que supuestamente estar¨ªa intentando una leva entre miembros del Grupo Isl¨¢mico Armado (GIA), del que se escindi¨® el anterior. Por ello, los investigadores creen que el reclutamiento se estaba efectuando entre gias que estuvieran en desacuerdo con la l¨ªnea del grupo, menos radical que los salafistas.

El v¨ªdeo de Argelia es el m¨¢s brutal visionado hasta ahora. Las im¨¢genes est¨¢n tomadas desde un alto que permite divisar las estribaciones de una zona monta?osa de bosque mediterr¨¢neo que termina en una llanura. El autor de v¨ªdeo sigue la caravana durante un recorrido de unos 200 metros antes de que llegue al punto donde el explosivo est¨¢ listo para estallar al paso. La explosi¨®n hace caer al suelo al c¨¢mara, que grita a sus compa?eros.

Degollados

La imagen se corta para mostrar a continuaci¨®n un veh¨ªculo ardiendo, con un militar sentado en el asiento del copiloto. Lo que sigue sobrecoge: soldados heridos y degollados. La imagen se centra en un joven soldado, quien parece tener un ligero signo de vida. 'El v¨ªdeo grabado en Argelia muestra c¨®mo utilizar explosivos contra caravanas de veh¨ªculos', precis¨® Mariano Rajoy, vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior, poco antes de reunirse en Bruselas con sus colegas belga y brit¨¢nico, especialmente concernidos por las pesquisas relacionadas con la c¨¦lula durmiente.

La t¨¦cnica de atentados contra veh¨ªculos se explica de forma m¨¢s clara en otra cinta, de mala calidad, supuestamente grabada en los alrededores de la localidad chechena de Arg¨²n. Cantos en ¨¢rabe con m¨²sica de tonos eslavos enmarcan una reuni¨®n de mujahidines chechenos en un campo nevado. Sale vaho, hace fr¨ªo. Quiz¨¢ por ello los detenidos en Espa?a les hab¨ªan enviado un enorme cargamento de mantas. Una voz en off explica detalles de c¨®mo deben prepararse ataques de guerrillas. Para que no haya dudas, un ejemplo pr¨¢ctico. Varios guerrilleros cavan una peque?a zanja en un camino de tierra. Las im¨¢genes muestran a uno de los activistas con un radio transmisor. 'Es exactamente del mismo modelo y marca que otros que hemos encontrado en los registros en Valencia', asegura Cotino. Un cami¨®n se acerca por la pista. La imagen se corta por voluntad de la polic¨ªa espa?ola inmediatamente despu¨¦s de que el veh¨ªculo salte por los aires.

Tercer v¨ªdeo. Una muchedumbre grita, mientras una persona quema una bandera de Israel. Es Palestina. 'Ven a esas personas que son aclamadas, esas que van vestidas con t¨²nicas blancas, los ven; pues seg¨²n nuestros especialistas son personas que ya han decidido convertirse en terroristas suicidas', asegura Cotino ante un nutrido grupo de periodistas at¨®nitos. La cinta sigue corriendo. Embozados disparan al aire un AK-47. En un recuadro aparece la imagen de Abdula Azzam, l¨ªder espiritual de los congregados, ya fallecido. Explica qu¨¦ es la guerra santa y qu¨¦ puede hacer un fiel para alcanzar el para¨ªso mediante el martirio. 'Este hombre ya muri¨® y su testigo lo ha recogido Osama Bin Laden', rubrica el director general de la Polic¨ªa, a¨²n cauto a la espera de los interrogatorios y de la decisi¨®n sobre los detenidos que adopte la Audiencia Nacional.

Entrenamiento

Al fondo de Azzam puede verse el entrenamiento de un supuesto terrorista en un campamento de Afganist¨¢n, por lo que los expertos consideran que el v¨ªdeo, de muy mala calidad, pudo ser elaborado por los responsables del Macta Al Gedamat, aparato de reclutamiento del GSPC. El supuesto jefe de ese campo es el argelino Omar Chaabani, alias Ab¨² Jaafar, quien supuestamente ha conseguido atraer a las antiguas redes del GIA en Europa y segu¨ªa intent¨¢ndolo con las radicadas en Espa?a. Esta persona mantiene estrechos contactos con mujahidines de Afganist¨¢n y Pakist¨¢n, seg¨²n informaciones policiales, y sigue las directrices de al menos tres consejeros espirituales partidarios de la Jihad mundial: el palestino Omar Othman, alias Ab¨² Qutada, residente en el Reino Unido; Sami Abli Zeidan, fundador del Ej¨¦rcito del Profeta de Mahoma, encarcelado en Jordania, y de Khaled el Agha, Ab¨² Walid, radicado en Afganist¨¢n.

Los tres aconsejan al GSPC que fund¨® Hassan Hattab, fiel del salafismo -una tendencia del islam que se fundamenta en la tradici¨®n, es muy estricta y tiene car¨¢cter panisl¨¢mico-, quien estar¨ªa a la espera de una oportunidad para 'llevar a cabo acciones fuera de Argelia, si bien en la actualidad valora m¨¢s mantener sus redes de apoyo', seg¨²n los servicios de Informaci¨®n de la polic¨ªa. Ya ha podido operar fuera de Argelia y a finales de 1999 sus huestes cometieron un atentado frustrado contra el rally Par¨ªs-El Cairo. La definici¨®n policial de su potencial es ¨¦ste: 'Se considera que sus redes en Europa en estos momentos est¨¢n disponibles para actuar, tanto en el plano log¨ªstico como, sin llega el caso, en el plano operativo'. En los 32 v¨ªdeos queda m¨¢s que claro.