'Sobra tolerancia con las actitudes sexistas de muchos hombres'

Mar¨ªa Angustias Bertomeu es empresaria y ejecutiva. Junto a cuatro socias trabaja en la creaci¨®n de un portal de Internet que pretende ser 'un parque de empresas, b¨¢sicamente, aunque no s¨®lo, de mujeres', que ofrezca productos y contenidos. Con ¨¦l esperan satisfacer los deseos y las necesidades de las mujeres. 'El tipo de productos que vamos a ofrecer pretende enlazar con nuestras necesidades, no con las que quienes nos ven s¨®lo como consumidoras deciden que son nuestras necesidades', explica Bertomeu en un descanso del congreso.

El origen de este portal, que se llamar¨¢ La ciudad de las mujeres, est¨¢ en su experiencia personal. 'Cuando empec¨¦ a navegar en la Red, en 1996, me percat¨¦ de que no encontraba nada atractivo. Todo lo que hab¨ªa en Internet relacionado con el ocio estaba marcado claramente por los gustos y usos masculinos: hab¨ªa juegos que casi nunca jugamos las mujeres y pornograf¨ªa, de la que normalmente no somos usuarias'. Esta alicantina, que fue profesora antes que empresaria, se dio cuenta de que Internet s¨®lo satisfac¨ªa sus necesidades 'cuando buscaba una informaci¨®n para el trabajo'.

Una vez parida la idea, la comparti¨® con otras mujeres 'para construir y fundamentar te¨®ricamente el proyecto, y evitar la frivolidad de [que fuera] un lugar de chicas, entre comillas'. Tuvo algunas puertas abiertas, 'las de mujeres de distintos campos, aptitudes y afinidades'. 'A ellas les debo la g¨¦nesis de la idea y el plusvalor que genera la suma de todos sus saberes'. Bertomeu, sus cuatro socias y las colaboradoras van a arriesgar dinero -'y tiempo', a?ade ella-, en esta empresa. Han desechado sumarse a la vor¨¢gine de las puntocom. Con una peque?a aportaci¨®n de las socias han optado por ir construy¨¦ndo su portal poco a poco. Para financiarlo se han presentado a concursos de proyectos de investigaci¨®n, de la UE y de Latinoam¨¦rica. Una entidad financiera le ha apoyado. 'Porque conf¨ªa en la persona, en m¨ª, no en el proyecto', precisa.

Bertomeu puntualiza que igualdad no es uniformidad. 'Reclamo la igualdad ante la ley, pero a partir de ah¨ª, reivindico el derecho a ser diferente'. Pero ni siquiera la igualdad es a¨²n real. 'Falta coraje pol¨ªtico de los hombres que gobiernan, que se resisten a la p¨¦rdida de privilegios. No dudo de su sensibilidad individualmente pero, como colectivo, tienen una mirada opaca hacia las necesidades de las mujeres. Falta tambi¨¦n presencia p¨²blica de mujeres denunciando la discriminaci¨®n. Y sobra tolerancia con las actitudes sexistas y discriminatorias de muchos hombres'. Advierte a la juventud de que si se descuidan los logros de las mujeres, que han beneficiado a toda la sociedad, se perder¨¢n.

Miembro del grupo Mujeres de Negro, aprovecha para recordar que los pacifistas y las feministas han convocar manifestaciones contra la guerra el 5 de octubre 'en respuesta a la dial¨¦ctica maniquea de los moros y cristianos. El problema es la pobreza, no el Islam'.