El Ayuntamiento de Olot no quiere seguir pagando el sueldo a los urbanos pendientes de juicio

La implicaci¨®n del polic¨ªa local de Olot Antoni Guirado en el secuestro de la farmac¨¦utica Maria ?ngels Feliu abri¨® una brecha en la honestidad del cuerpo que se fue agrandando con la aparici¨®n de nuevos casos de agentes municipales acusados de delitos diversos. Actualmente, el consistorio tiene suspendidos de empleo a tres agentes, algunos desde hace m¨¢s de dos a?os, pero no puede resolver sus expedientes disciplinarios antes de que se dicte sentencia. Sus requerimientos al Consejo General del Poder Judicial y al S¨ªndic de Greuges no han surtido efecto.

El Ayuntamiento de Olot lamenta que a causa de la lentitud de la justicia deba seguir pagando a polic¨ªas implicados en alg¨²n caso delictivo y calcula que ya lleva gastados m¨¢s de 22 millones en los sueldos de estos agentes. Despu¨¦s de Guirado, que confes¨® en marzo de 1999 su participaci¨®n en el secuestro de Maria ?ngels Feliu, la polic¨ªa apart¨® del servicio a Manel Bussoms, en mayo del mismo a?o, acusado de estafa y falso testimonio, y a Joan Casado, en abril, inculpado en el robo en una tienda.

Adem¨¢s de estos tres municipales, existe la posibilidad de que se acabe expedientando tambi¨¦n a otros dos agentes que, seg¨²n la investigaci¨®n judicial del caso, ocultaron pruebas que implicaban a sus compa?eros en el secuestro de Feliu. No obstante, el consistorio no ha actuado contra ellos porque no han sido informados oficialmente de su inculpaci¨®n.

Albert Bramon, concejal responsable de la Polic¨ªa Local, sostiene que no resulta l¨®gico que est¨¦n pagando el sueldo a funcionarios municipales implicados en delitos tan graves. 'Resulta incomprensible que estemos pagando sueldos durante a?os a polic¨ªas que no trabajan: si son inocentes, que se reincorporen, y si son culpables, que paguen sus culpas', dice Bramon.

El consistorio asegura que si finalmente los polic¨ªas son declarados culpables, no existe posibilidad alguna de que el Ayuntamiento recobre el dinero pagado en sueldos. Los tres municipales expedientados han solicitado al consistorio otra ocupaci¨®n al margen del cuerpo policial, pero el Ayuntamiento ha denegado la petici¨®n porque considera que ello podr¨ªa generar alarma social.

?C¨®mo ha sido posible tal concentraci¨®n delictiva en un cuerpo policial? Bramon explica que se trata de casos sorprendentes y absolutamente imprevisibles. 'Estos polic¨ªas hubiesen pasado cualquier filtro, de la misma manera que la mayor¨ªa superaron el curso de la escuela de polic¨ªa de Mollet del Vall¨¨s', advierte el concejal. Ninguno de los agentes ten¨ªa antecedentes policiales y los tres estaban perfectamente integrados en el tejido social y asociativo de la localidad.

El consistorio asegura que los vecinos de Olot han recuperado lentamente la confianza en la polic¨ªa local, pese a que admite que el secuestro ser¨¢ un estigma que perdurar¨¢ durante a?os. 'Al principio era frecuente que alg¨²n municipal que se dispon¨ªa a poner una multa debiera soportar ser acusado de secuestrador, pero estos comentarios despectivos han pasado a la historia', afirma Bramon.