Bin Laden: "Juro que Am¨¦rica no tendr¨¢ paz hasta que no la tenga Palestina"
"Ha llegado la hora para los humillados de rebelarse contra los infieles", dice el jefe de Al Qaeda
El millonario de origen saud¨ª Osama Bin Laden jur¨® ayer que "Estados Unidos no tendr¨¢ seguridad hasta que ¨¦sta no exista en Palestina", en un mensaje en v¨ªdeo previamente grabado y difundido hacia las ocho de la tarde por la televisi¨®n de Qatar Al Yazira. El l¨ªder del grupo Al Qaeda (La Base) y principal sospechoso de estar detr¨¢s de los atentados contra EE UU de hace un mes apareci¨® en pantalla para dar su primera respuesta a los ataques de brit¨¢nicos y norteamericanos contra objetivos en Afganist¨¢n. Tanto Bin Laden como el jeque Omar, l¨ªder de los talib¨¢n, estaban ayer en lugar seguro.
Bin Laden luch¨® en la guerra de los guerrilleros afganos contra la URSS en los a?os ochenta y cont¨® con el benepl¨¢cito de Estados Unidos en un primer momento. A?os despu¨¦s, Bin Laden rompi¨® con Washington cuando tropas norteamericanas se instalaron en Arabia Saud¨ª durante la guerra del Golfo.
La declaraci¨®n de Bin Laden: "El mundo se divide entre los creyentes y los infieles"
Texto del mensaje televisado de Osama Bin Laden, seg¨²n las versiones de las agencias internacionales:
"Aqu¨ª est¨¢ Am¨¦rica golpeada por Dios Omnipotente en uno de sus ¨®rganos vitales, con sus m¨¢s grandes edificios destruidos. Por la gracia de Dios. El horror ha sido vertido sobre Am¨¦rica de norte a sur, de este a oeste, y agradecemos a Dios que lo que Am¨¦rica est¨¢ padeciendo ahora es s¨®lo una muestra de lo que nosotros hemos padecido. Nuestra naci¨®n isl¨¢mica ha estado padeciendo lo mismo durante m¨¢s de ochenta a?os, humillaci¨®n y desgracia, sus hijos asesinados y su sangre derramada, sus lugares santos profanados.
Dios ha bendecido a un grupo de la vanguardia de los musulmanes, la primera l¨ªnea del Islam, para destruir Am¨¦rica. Dios les bendiga y les asigne un supremo lugar en el cielo, porque ?l es el ¨²nico capaz y autorizado para hacerlo. Cuando aquellos que se han levantado en defensa de sus d¨¦biles ni?os, de sus hermanos y hermanas en Palestina y en otras naciones musulmanas, todo el mundo qued¨® conmocionado, los infieles seguidos por los hip¨®critas.
Un mill¨®n de ni?os inocentes est¨¢n muriendo en este momento en el que hablamos, muertos en Irak sin ninguna culpa. No o¨ªmos ninguna denuncia, no o¨ªmos ning¨²n edicto de los gobernantes hereditarios. En estos d¨ªas, los tanques israel¨ªes irrumpen violentamente en Palestina, en Ramala, Rafah y Beit Jala y muchos otros lugares de la tierra del Islam y no o¨ªmos a nadie alzar su voz o reaccionar. Pero cuando la espada cay¨® sobre Am¨¦rica despu¨¦s de 80 a?os, la hipocres¨ªa levant¨® su cabeza para gemir por los asesinos que jugaban con la sangre, el honor y los lugares santos de los musulmanes.
Lo menos que puede ser dicho de esos hip¨®critas es que son ap¨®statas que siguen el camino equivocado. Apoyan al carnicero contra la v¨ªctima, al opresor contra el ni?o inocente. Yo busco refugio en Dios contra ellos y le pido que nos deje ver lo que se merecen.
Yo digo que el asunto es muy claro. Cada musulm¨¢n despu¨¦s de este acontecimiento debe luchar por su religi¨®n, atacar a los altos funcionarios de EE UU, empezando por el jefe internacional de los infieles, Bush y su equipo, que hicieron un despliegue de vanidad con sus hombres y caballos, y a aquellos que volvieron incluso a pa¨ªses que cre¨ªan en el Islam contra nosotros, el grupo que apel¨® a Dios, el Omnipotente, el grupo que reh¨²sa ser sojuzgado en su religi¨®n. Ellos han estado dici¨¦ndole al mundo falsedades, que est¨¢n luchando contra el terrorismo. En un naci¨®n del conf¨ªn del mundo, Jap¨®n, cientos de miles fueron asesinados y ellos dicen que esto no es un crimen mundial. Para ellos no es un asunto claro; un mill¨®n de ni?os murieron en Irak pero para ellos no es un asunto claro. Pero cuando poco m¨¢s de 10 murieron en Nairobi y en Dar es Salam, Afganist¨¢n e Irak fueron bombardeados y la hipocres¨ªa se alz¨® tras el jefe internacional de los infieles, el s¨ªmbolo moderno del paganismo mundial, EE UU, y sus aliados.
Yo les digo a ellos que estos acontecimientos han dividido al mundo en dos campos, el campo de los creyentes y el campo de los infieles. Dios nos proteja a nosotros y a vosostros de ellos. Cada musulm¨¢n debe levantarse para defender su religi¨®n. El viento de la fe est¨¢ soplando y el viento del cambio est¨¢ soplando para expulsar al demonio de la Pen¨ªnsula de Mahoma, la paz sea con ¨¦l.
A Am¨¦rica y a su gente les digo unas pocas palabras: Juro por Dios que Am¨¦rica no vivir¨¢ en paz hasta que la paz no reine en Palestina y hasta que todos los ej¨¦rcitos de los infieles no salgan de la tierra de Mahoma, la paz sea con ¨¦l. Dios es el m¨¢s grande y gloria al Islam".
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