Los dramas y la crisis de Swissair en el a?o m¨¢s negro
El tr¨¢gico suceso de las muertes en el t¨²nel ha asestado un golpe m¨¢s a un pa¨ªs que lleva un a?o sin abandonar los malos tragos, a pesar de ser conocido por su tranquilidad. El pasado jueves otro grave accidente, esta vez cerca del t¨²nel de San Bernhard Alpine, seg¨® la vida de un conductor y clausur¨® una de las ¨²ltimas rutas europeas que recorren los Alpes de Norte a Sur.
Los accidentes han incrementado un sentimiento de crisis que ya se estaba fraguando en el pa¨ªs con la espectacular ca¨ªda de la aerol¨ªnea Swissair, s¨ªmbolo de la prosperidad nacional. El Gobierno suizo se vio obligado a intervenir en la crisis para evitar la quiebra de la compa?¨ªa. Lo que no fue posible impedir fue una estrepitosa ca¨ªda en Bolsa y miles de despidos en cascada.
Cuando la crisis de Swissair atizaba el orgullo nacional suizo -poco despu¨¦s de los atentados del 11 de septiembre- el pa¨ªs a¨²n se estaba recuperando de su peor suceso de asesinato m¨²ltiple. Suiza, siempre considerada uno de los bastiones europeos de la seguridad, se desayun¨® una ma?ana con la noticia de que un ciudadano armado hab¨ªa entrado en el Parlamento del tranquilo cant¨®n de Zug y hab¨ªa disparado de forma indiscriminada contra los all¨ª presentes. El episodio acab¨® con 14 personas muertas.
'Por supuesto, las causas de estos acontecimientos no tienen nada que ver unas con otras. Pero todas ellas alimentan el sentimiento de cat¨¢strofe que reina ahora mismo en el pa¨ªs: que la naci¨®n ejemplar ha tenido un duro despertar de su tranquilidad', asegura el comentarista Christof Wamister en el diario Basler Zeitung.
Los suizos utilizan normalmente la expresi¨®n 'caso especial' para referirse a ellos. La denominaci¨®n proviene del hecho de haber sido siempre una naci¨®n neutral, que se mantuvo al margen de dos guerras mundiales cuando casi toda Europa y pr¨¢cticamente el resto del mundo estaban implicados. Todo ello convirti¨® a Suiza en una peque?a isla de prosperidad en una Europa devastada por la muerte.
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