El rey Juan Carlos exalta la superioridad ¨¦tica de la democracia

El rey Juan Carlos hizo ayer una encendida defensa de la democracia, a la que situ¨® en 'una esfera ¨¦tica superior' y calific¨® de medio indispensable para luchar contra el terrorismo, durante la clausura de la Conferencia sobre la Transici¨®n y Consolidaci¨®n Democr¨¢ticas. Puntualizando las cautelas de varios de los l¨ªderes presentes en el acto como el ex presidente sovi¨¦tico Mija¨ªl Gorbachov, el Rey sent¨® un principio de consenso: 'Los pueblos libres ni claudican ante el terrorismo ni constituyen una amenaza para el resto'.

Sobre esa base, argument¨®: 'Nadie ignora que conseguir cimentar y mantener una estructura pol¨ªtica tan compleja y delicada como es la democracia no resulta sencillo. Pero es indispensable'.

El Rey se refiri¨® luego directamente a los cr¨ªticos al afirmar: 'Habr¨¢ siempre quien pretenda invalidar nuestro sistema de libertades magnificando los fallos y minimizando los logros. Se ha acusado, por ejemplo, a la democracia de indiferencia ante las desigualdades'. 'Pero, si bien es cierto que la democracia no se traduce autom¨¢ticamente en una sociedad justa y perfecta', respondi¨® el Monarca a estas objeciones, 'no lo es menos que ning¨²n otro sistema favorece tanto el desarrollo, da tantos medios a los ciudadanos para alcanzar sus sue?os o engendra tantos mecanismos para perseguir la corrupci¨®n'.

Por otra parte, se?al¨® don Juan Carlos, 'las alternativas a la democracia encierran en s¨ª tal potencial de abusos y tal desprecio hacia la inteligencia y la dignidad de los seres humanos que s¨®lo pueden ser defendidas por quienes se aprovechan de ellas o por quienes se dejan atenazar por el miedo a la libertad'.

De todo ello extrajo don Juan Carlos la siguiente consecuencia: 'No es exageraci¨®n decir que los sistemas democr¨¢ticos, aun perfectibles, pertenecen a una esfera ¨¦tica distinta y superior a cualquier despotismo y cualquier autoritarismo'. En l¨ªnea con las cautelas que sostuvo Gorbachov -que se?al¨® que la democracia vale en tanto en cuanto sea eficaz para garantizar los derechos y libertades y que ser¨ªa muy negativo hacer de la democracia un mito, como le ocurri¨® al sistema comunista-, el Rey tuvo el cuidado de precisar que se refiere 'naturalmente, a democracia real, no s¨®lo formal, no aparente ni vac¨ªa: una democracia respetuosa con la dignidad individual, capaz de hacer convivir divergencias pac¨ªficas y atenta al bienestar social'.

La solidez de ese sistema har¨¢ que resulten in¨²tiles 'infamias' como la de los atentados del pasado 11 de septiembre. 'Pocas veces, hasta donde alcanza nuestra memoria, el mundo ha experimentado una conmoci¨®n colectiva de esa intensidad', dijo el Monarca. 'Aquel d¨ªa', a?adi¨®, 'volvi¨® a ponerse terriblemente de manifiesto la pervivencia, en forma de terrorismo, de mentalidades totalitarias que pretenden imponer a sangre y fuego sus particulares visiones y objetivos'.

'En Espa?a llevamos muchos a?os padeciendo el delirio tr¨¢gico de algunos fan¨¢ticos que se autoconceden el derecho a matar y mutilar en nombre de una ideolog¨ªa excluyente', record¨®, antes de decir que 'este tipo de amenazas est¨¢ aumentando cualitativamente en el mundo'.