Sarasola dice que negociar¨¢ su derecho sobre las apuestas para sacar del abandono al hip¨®dromo

El empresario Enrique Sarasola, ¨²ltimo adjudicatario del hip¨®dromo, ha asegurado que est¨¢ dispuesto a negociar sus derechos sobre las apuestas para desbloquear la situaci¨®n en la que se encuentra este recinto. Desde hace cinco a?os, las instalaciones de la Zarzuela permanecen cerradas. El ¨²ltimo intento de volver a abrirlas ha fracasado tras declararse nulo el concurso para adjudicar su gesti¨®n. Cuarenta familias resisten a duras penas en un hip¨®dromo en ruinas donde los 200 caballos que a¨²n permanecen en los boxes conviven con dos decenas de jabal¨ªes.

Dos decenas de jabal¨ªes conviven con las 40 familias y los 200 caballos que a¨²n quedan en el recinto

15.000 espectadores cada jornada, 1.500 caballos estabulados en las cuadras, un c¨¦sped segado al ras, boxes relucientes y mucho movimiento en las taquillas de apuestas. ?sa era la imagen del hip¨®dromo de la Zarzuela a principios de los a?os noventa. Ahora es otra bien distinta. Cuarenta familias y 200 caballos sobreviven como pueden en un recinto que presenta un aspecto desolador, muy lejos del esplendor del que disfrut¨® en el pasado. Patrimonio Nacional, propietario de las instalaciones, se gasta lo indispensable para detener el deterioro, mientras los profesionales, que suman ya cinco a?os de paro, esperan una noticia que les permita albergar alguna esperanza en el futuro.

Hace dos semanas Patrimonio cerr¨® una nueva puerta a la esperanza al anular el concurso para la adjudicaci¨®n de la explotaci¨®n de estas instalaciones clausuradas tras la marcha del empresario Enrique Sarasola, el ¨²ltimo responsable del recinto h¨ªpico.

Hasta hace 15 d¨ªas, preparadores, yoqueis y propietarios hac¨ªan planes para la primavera, fecha en la que Patrimonio hab¨ªa fijado la reapertura del hip¨®dromo. Pero la falta de definici¨®n sobre qui¨¦n es el due?o de las apuestas ha echado todos los planes por tierra. Unos culpan a Enrique Sarasola de la situaci¨®n, otros a Patrimonio por redactar un concurso que dejaba en el aire muchas dudas sobre la titularidad del juego. Sarasola sostiene que la propiedad es suya.

'Durante estos a?os he estado callado. Han dicho de m¨ª de todo, pero el tiempo me est¨¢ dando la raz¨®n', explica Enrique Sarasola. 'En 1992 firm¨¦ dos contratos por los cuales la empresa de la que soy propietario se quedaba tanto con la explotaci¨®n del hip¨®dromo como con las apuestas. Por eso me sorprendi¨® cuando Patrimonio confeccion¨® un concurso con unas bases en las que inclu¨ªa las apuestas'.

El 13 de febrero pasado, una vez que el concurso estaba en marcha, Sarasola comunic¨® a los grupos que optaban a quedarse con estas instalaciones que la apuesta era de su propiedad. 'Paralelamente', explica el empresario, 'acud¨ª a los tribunales para defender mis derechos. Me hice cargo del hip¨®dromo en una situaci¨®n cr¨ªtica. Abrir cada jornada me costaba 36 millones y me he gastado 1.400 millones en indemnizaciones a los trabajadores. Soy uno de los mayores perjudicados con la situaci¨®n del hip¨®dromo, porque me dedico a criar caballos'. Sarasola asegura que nadie se ha puesto en contacto con ¨¦l para conocer sus intenciones sobre la apuesta. 'Yo estoy dispuesto a hablar sobre este tema con todo el mundo que est¨¦ interesado: con Hacienda, con los grupos que acudan al concurso...', advierte.

El grupo liderado por Antena 3 fue el ganador del concurso ahora anulado. Los responsables de este colectivo pidieron a Patriminio que les garantizase la propiedad de la apuesta y, al no conseguirlo, renunciaron a sus derechos. El grupo que obtuvo la segunda mejor puntuaci¨®n fue el de la ONCE, al que la anulaci¨®n del concurso le ha dejado sin opciones. Fuentes de este consorcio han explicado que se han disuelto. 'Cuando salga el nuevo concurso estudiaremos si seguimos adelante', han dicho fuentes de este colectivo.

Patrimonio convocar¨¢, en la reuni¨®n del pr¨®ximo mes de noviembre del consejo de administraci¨®n, un nuevo concurso cuyas bases saldr¨¢n a la luz en diciembre. Para entonces, fuentes de Patrimonio Nacional han se?alado que esperan que se haya aclarado el tema de las apuestas. Un portavoz de este organismo ha asegurado que esta tarea est¨¢ lejos de sus competencias: 'Corresponde al ONLAE (Organismo Nacional de Loter¨ªas y Apuestas del Estado) determinar la titularidad de la apuesta'.

Cualquier proyecto sobre la viabilidad de las instalaciones de la Zarzuela pasa por poder controlar el juego sobre las carreras. Las apuestas interiores depender¨¢n de la Ley del Juego confeccionada por el Gobierno regional, y las apuestas exteriores, las que se efect¨²an fuera del hip¨®dromo, estar¨¢n sujetas a la supervisi¨®n del Gobierno nacional.

Sobre nuevos plazos para la reapertura del hip¨®dromo nadie se atreve a hablar. 'El concurso, si no aparecen nuevos problemas, debe fallarse en primavera. Luego el grupo ganador dispondr¨¢ de un a?o m¨¢s o menos para poner su proyecto en marcha', ha explicado un portavoz de Patrimonio.

A la espera de noticias, los supervivientes del hip¨®dromo de la Zarzuela tienen miedo a hablar, temen a las represalias. Les cuesta relatar la dif¨ªcil situaci¨®n en la que viven. No tienen agua del Canal de Isabel II porque Patrimonio no la paga. Se tienen que arreglar con la que sacan de un pozo cercano. 'A veces sale un poco marr¨®n', cuentan. 'Y, cuando llueve, se va la luz', a?aden.

Los techos de los boxes, en los que permanecen los ¨²ltimos 200 caballos, est¨¢n en ruinas. Las cubiertas se caen y las puertas se tienen que apuntalar para que no se vengan abajo. La hierba de la pista est¨¢ llena de hoyos. Entrenarse conlleva el riesgo de una lesi¨®n tanto para los caballos como para los yoqueis. Los hoyos se deben tanto a la falta de mantenimiento de la hierba como a la presencia de jabal¨ªes que llegan desde el Monte de El Pardo tras abrirse paso entre las carcomidas vallas. Los habitantes de este hip¨®dromo en ruinas cuentan que, al caer la noche, una veintena de jabal¨ªes se pasea por all¨ª.

'Patrimonio en lo que se gasta el dinero es en intentar que la tribuna y en concreto el voladizo construido por el ingeniero Eduardo Torroja no se venga abajo', dicen los habitantes del hip¨®dromo de la Zarzuela. 'Lo dem¨¢s no les importa'.