La otra vida del 'marqu¨¦s de Leguineche'

En una calurosa tarde de verano de finales de los a?os sesenta, una veintena de actores, pintores, escritores y gente de la nobleza se re¨²nen en el jard¨ªn de una casa de la colonia del Conde Orgaz. El anfitri¨®n saca comida y bebida, cuenta chistes, anima la conversaci¨®n e incluso se atreve a cantar y a tocar al piano el '?D¨®nde vas con mant¨®n de Manila?', de la Verbena de la Paloma. Las reuniones terminaron en 1991, a?o en el que el anfitri¨®n, actor y director Luis Escobar, falleci¨® mientras dorm¨ªa de un infarto de miocardio.

Ayer, amigos y familiares de Escobar se reunieron en la Consejer¨ªa de las Artes (plaza de Espa?a, 8), para asistir a la inauguraci¨®n de la exposici¨®n Luis Escobar y la vanguardia, una muestra que recorre la obra de este director y autor teatral, conocido por el p¨²blico gracias a su interpretaci¨®n del personaje del marqu¨¦s de Leguineche en la pel¨ªcula La escopeta nacional, de Luis Garc¨ªa Berlanga.

'La idea que hemos tenido con esta exposici¨®n es mostrar a la gente que Luis Escobar es mucho m¨¢s que sus intervenciones en el cine. ?l revolucion¨® el mundo del teatro con obras que jam¨¢s se hab¨ªan hecho antes en nuestro pa¨ªs, y hemos pensado que era una buena idea hacerle un homenaje en la programaci¨®n del Festival de Oto?o', explic¨® Alicia Moreno, consejera de las Artes.

Y es que Luis Escobar, entre otras cosas, fue director del teatro Mar¨ªa Guerrero durante la posguerra, empresario del teatro Eslava y autor de obras como El amor es un potro desbocado (1959), basada en la juventud de Jimena y Rodrigo D¨ªaz de Vivar, El Cid. Para recorrer su vida y su profesi¨®n, seg¨²n explic¨® el comisario de la muestra, Andr¨¦s Pel¨¢ez, la exposici¨®n est¨¢ dividida en tres partes: una reproducci¨®n de la casa de Luis Escobar (primero tuvo su residencia en la calle de Covarrubias y luego en la urbanizaci¨®n del Conde de Orgaz), donde organiz¨® tertulias que marcaron una ¨¦poca; su etapa en el teatro Mar¨ªa Guerrero (1939-1953) y su trayectoria profesional en el teatro Eslava (1956-1963), que tuvo que vender en un momento de crisis del teatro.

El sal¨®n de su c¨ªrculo m¨¢s ¨ªntimo da paso a una reproducci¨®n del escenario del Teatro Nacional Mar¨ªa Guerrero, del que se hizo cargo en 1939, sobre el que cuelgan los telones que dise?¨® Salvador Dal¨ª para su montaje de Don Juan Tenorio. Trajes de algunos de sus trabajos -entre ellos alguno dise?ado por Dal¨ª para la citada obra-, una selecci¨®n de figurines, fotograf¨ªas y carteles completan este recorrido por la trayectoria de una de las personas que m¨¢s contribuy¨® a renovar el teatro.

La estrella del teatro Eslava en la ¨¦poca de Escobar, la actriz Nati Mistral, se pase¨® ayer por las salas de la muestra recordando los a?os que trabaj¨® junto al homenajeado. 'El teatro Eslava estaba cerrado porque no ten¨ªa salida de incendios, pero Luis compr¨® la librer¨ªa de al lado para que tuviese salida, y enseguida empezados a trabajar', coment¨® Mistral. Y a?adi¨®: 'Era un caballero, inteligent¨ªsimo, ingenioso, lo ten¨ªa todo'.

La tambi¨¦n actriz Mar¨ªa Asquerino trabaj¨® al lado de Luis Escobar en la ¨²ltima pel¨ªcula que ¨¦ste rod¨® antes de morir. 'Particip¨¢bamos los dos en Fuera de juego, que dirig¨ªa Fernando Fern¨¢n G¨®mez, cuando Luis se muri¨®. Tuvo una muerte maravillosa, porque fue tranquila y mientras dorm¨ªa', coment¨® Asquerino. 'Era un arist¨®crata tan sencillo que no parec¨ªa arist¨®crata', subray¨®.

Recuerdos de sus papeles en el cine, su relaci¨®n con el teatro y su papel en la vida art¨ªstica e intelectual espa?ola llenan las vitrinas. 'La gente de nuestra generaci¨®n s¨®lo le conoce por sus intervenciones en las pel¨ªculas de Berlanga, su trayectoria teatral hab¨ªa quedado sepultada. As¨ª que propuse a la Consejer¨ªa de las Artes hacer esta exposici¨®n, y enseguida aceptaron', explic¨® Elena Escobar, sobrina del actor y director y responsable de su legado. Adem¨¢s de Elena, numerosos familiares acudieron al acto, y muchos de ellos se reconocieron en las fotos de la vida familiar de Escobar.

Sombreros de ¨¦pocaEn la exposici¨®n tambi¨¦n hay carteles de representaciones, vestidos y sombreros de ¨¦poca que se usaron en obras de teatro, textos que Agust¨ªn de Fox¨¢ dedic¨® a Luis Escobar, y cartas de Salvador Dal¨ª, Jean Cousteau, T. S. Eliot o Jacinto Benavente. Adem¨¢s, se exponen los innumerables premios que recibi¨® Escobar a lo largo de su trayectoria profesional, como la medalla al M¨¦rito de las Bellas Artes o el premio Maite de Teatro. 'Con todas las cosas que hizo y que se pueden ver aqu¨ª, queda demostrado que fue uno de los pilares del teatro espa?ol del XX', afirm¨® Jos¨¦ Antonio Campos, viceconsejero de Las Artes. El escritor Antonio Gala estuvo de acuerdo: 'Represent¨® toda la fuerza del teatro de una ¨¦poca. Mi relaci¨®n con ¨¦l es mi relaci¨®n con el teatro', dijo.

Familiares y amigos contaron an¨¦cdotas de Escobar e, incluso, alguno se atrevi¨® a imitar su peculiar voz, como Mar¨ªa Asquerino: 'Una vez, sal¨ªamos de un c¨®ctel en casa de un amigo y Luis cogi¨® el ascensor para bajar, cuando en la ¨¦poca estaba prohibido coger el ascensor para bajar, porque s¨®lo se utilizaba para subir. Cuando se abri¨® la puerta del ascensor el portero, furioso, le increp¨® a gritos: '?C¨®mo ha bajado usted en ascensor?'. 'Divinamente', contest¨® Escobar'. Todos hablaron durante horas de la carrera de Escobar, pero sobre todo, de su buen humor y de su ingenio.

Luis Escobar y la vanguardia. Sala de exposiciones de la Consejer¨ªa de las Artes. Del 30 de octubre al 9 de diciembre. Entrada gratuita.