Golpe al 'comando Madrid'
ETA fracas¨® ayer por partida doble: no logr¨® su prop¨®sito de asesinar en Madrid con un coche bomba a un alto funcionario de la Administraci¨®n, y los dos presuntos autores del atentado fueron detenidos minutos despu¨¦s gracias a la activa colaboraci¨®n de un ciudadano heroico que los sigui¨® en su coche. Estas dos excelentes noticias se vieron empa?adas, en todo caso, por el elevado n¨²mero de heridos, seis de ellos de gravedad, que provoc¨® la explosi¨®n de los 25 kilos de dinamita que los etarras hab¨ªan colocado en el coche.
Despu¨¦s de constatar la ausencia de v¨ªctimas mortales, es de justicia destacar en primer lugar la actuaci¨®n ejemplar de ese ciudadano an¨®nimo que persigui¨® el coche de los terroristas mientras informaba de su itinerario a la polic¨ªa a trav¨¦s de un tel¨¦fono m¨®vil. La colaboraci¨®n ciudadana es una pieza imprescindible para combatir el terrorismo, y ha habido sobradas muestras de ello, pero tal vez el de ayer es un caso sin precedentes de responsabilidad c¨ªvica y eficacia policial.
Precisamente porque es bastante inusual la detenci¨®n en caliente de dos terroristas, este automovilista an¨®nimo merece un reconocimiento social. Su sangre fr¨ªa y su decisi¨®n han permitido dar un duro golpe a la estructura criminal de ETA con la detenci¨®n de dos supuestos integrantes del comando Madrid, el de m¨¢s amplio historial delictivo y el que hab¨ªa conseguido eludir hasta ahora la persecuci¨®n policial. La localizaci¨®n de tres pisos francos en Madrid y otro en Salamanca, con abundante arsenal de armas y explosivos, supone un duro rev¨¦s para la organizaci¨®n terrorista, que siempre ha buscado con sus atentados en Madrid un efecto multiplicador en los medios.
De los dos etarras detenidos, Ana Bel¨¦n Eg¨¹¨¦s fue concejal de HB en el Ayuntamiento guipuzcoano de Elduayen. Es un dato que viene a reforzar la hip¨®tesis del juez Garz¨®n de que ETA no es s¨®lo su aparato militar, sino un entramado que engloba a diversas organizaciones sociales que durante a?os formaban parte de KAS y que se han reproducido bajo otras siglas. No es la primera vez que se acredita policialmente la conexi¨®n entre la banda terrorista y personas de la constelaci¨®n de grupos de car¨¢cter legal o alegal que se mueven a su alrededor. Es un hecho constatado que j¨®venes formados en la kale borroka constituyen la cantera de ETA y que la debilidad de la banda propicia la creciente implicaci¨®n de cargos electos de Batasuna (antes EH y HB) en sus comandos, como el concejal de Azkoitia detenido hace quince d¨ªas.
Algunos siguen cuestionado -principalmente los que vinculan la violencia de ETA a un 'conflicto pol¨ªtico' subyacente en el Pa¨ªs Vasco- que la v¨ªa policial baste para acabar con la banda terrorista. Har¨ªa falta tambi¨¦n una estrategia com¨²n de las fuerzas democr¨¢ticas en el logro de ese objetivo, y que ninguna de ellas insistiera en alimentar las fantas¨ªas de los pistoleros con propuestas rupturistas de la legalidad. Pero no hay actuaci¨®n pol¨ªtica m¨¢s eficaz que la detenci¨®n casi inmediata de los dos terroristas que ayer estuvieron a punto de causar una nueva matanza en Madrid y la cadena de sucesivos golpes policiales propinados durante este a?o en Espa?a y Francia, que han llevado a prisi¨®n a casi un centenar de presuntos etarras. Es el m¨¦todo m¨¢s eficaz para acabar con el mito de su imbatibilidad cuidadosamente fomentado por los terroristas.
La soledad de ETA como ¨²ltimo residuo terrorista activo en Europa, su inclusi¨®n en la lista internacional de organizaciones terroristas confeccionada por EE UU y los avances hacia la creaci¨®n de un espacio judicial europeo reducir¨¢n los espacios de tolerancia y de impunidad de los que han gozado en el pasado los llamados 'independentistas vascos'. Es posible que entonces interioricen la imposibilidad absoluta de conseguir sus objetivos pol¨ªticos mediante la fuerza. Mientras tanto, no hay m¨¦todo m¨¢s eficaz de lucha que detener a los terroristas y entregarlos a la justicia.
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