El PSOE decide apostar a fondo por el estado federal
Los socialistas unifican sus propuestas sobre el modelo de Estado para medirse con el PP
El alma federal del PSOE se impone a su alma jacobina. Las dos son igualmente antiguas y leg¨ªtimas en el partido, pero los barones han decidido que es la hora de reivindicar 'la Espa?a plural y diversa'. Se asume el federalismo predicado por Pasqual Maragall, el l¨ªder de los socialistas catalanes, y no se oye chistar ni una voz de las que tantas veces se le opusieron. Con ese cartel se presentar¨¢ el PSOE en pr¨®ximas elecciones, esperanzado en facilitar sus pactos con fuerzas nacionalistas.
Uno de los que tantas veces se opusieron a las propuestas federalistas, el presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodr¨ªguez Ibarra, por ejemplo, abandon¨® sus viejos recelos y defendi¨® tranquilamente la noche del jueves, en el Club Siglo XXI de Madrid, las tesis federalistas adoptadas ese mismo d¨ªa por el Consejo Territorial del partido. No va a haber 17 voces en el PSOE con ideas distintas sobre Espa?a ni su modelo constitucional.
La suma de Rodr¨ªguez Ibarra y Bono da la medida de que la apuesta es de todos
Algunos presidentes socialistas se han hecho m¨¢s 'federalistas' tras padecer gobiernos del PP
Para el PSOE se ha convertido en una prioridad hacer frente a la propaganda del PP que le presenta como un partido con tantas propuestas para Espa?a como l¨ªderes auton¨®micos. Sabe que cuando la derecha intenta apropiarse del patriotismo no hay que arrugarse, ni dejar que el debate se plantee en los t¨¦rminos que ella pretenda. El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, se envolvi¨® en 1980 en la bandera catalana y barri¨® a los socialistas para m¨¢s de 20 a?os. Lo mismo hizo el PNV. Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero no quiere que le suceda a ¨¦l.
La apuesta socialista ante este reto pasa por profundizar en el modelo constitucional en el sentido federalista que subyace en su l¨®gica profunda. Es la tesis de siempre del socialismo catal¨¢n, encarnada ahora en Maragall, pero no s¨®lo la suya. Es la de l¨ªderes regionales que han tenido ¨¦xitos recientes en sus confrontaciones con la derecha. El aragon¨¦s Marcelino Iglesias, el balear Francesc Antich y el asturiano Vicente ?lvarez Areces. Cuentan con el apoyo del presidente de Andaluc¨ªa, Manuel Chaves, para quien el federalismo en el PSOE 'es ahora mayor que nunca y est¨¢ asumido completamente'. La suma de Rodr¨ªguez Ibarra y el castellano-manchego Jos¨¦ Bono da la medida de que la apuesta es de todos.
Todos han apoyado claramente la opci¨®n presentada por el secretario de Libertades P¨²blicas y Pol¨ªtica Auton¨®mica, Juan Fernando L¨®pez Aguilar, al Consejo Territorial del PSOE, compuesto por los presidentes de comunidad y los secretarios de las federaciones del partido, para dar 'un impulso auton¨®mico y local' en clave de federalismo. A L¨®pez Aguilar le resulta incre¨ªble que el PP pretenda erigirse en or¨¢culo del patriotismo constitucional 'al mismo tiempo que aplica una pol¨ªtica auton¨®mica regresiva'. Adem¨¢s, se pregunta c¨®mo se atreven a patrimonializar la Constituci¨®n 'gentes como P¨ªo Cabanillas [ministro Portavoz], de quien recordamos su cabezazo ante el cad¨¢ver de Franco; o que no la vot¨®, como Aznar; o personas que no aceptaron el T¨ªtulo VIII -que instaura el modelo auton¨®mico-, o que votaron en el Congreso en contra de los estatutos catal¨¢n y vasco y se opusieron a que el andaluz tuviera el m¨¢ximo nivel'.
Para el PSOE, sin embargo, el giro federalista significa corregir tambi¨¦n posiciones del pasado reciente. Por ejemplo, defiende ahora que hay que 'clarificar' el alcance de la legislaci¨®n b¨¢sica, para que respete las competencias auton¨®micas. Eso dice el texto. Chaves habla m¨¢s claro y asegura que el Gobierno Aznar utiliza la legislaci¨®n b¨¢sica para 'renacionalizar' competencias de las comunidades. Pero esa ha sido, exactamente, una queja recurrente de Pujol en sus discursos contra los largos a?os de gobiernos del PSOE.
As¨ª que, a pesar de que el PSOE marca claramente sus diferencias con los nacionalistas, rechaza toda pretensi¨®n soberanista o confederal y se opone a un 'adelgazamiento' excesivo del Estado, la apuesta federalista abre puntos de coincidencia con fuerzas regionalistas y nacionalistas y refuerza sus posibilidades de alianza, un aspecto nada desde?able ante las pr¨®ximas elecciones municipales y auton¨®micas.
Maragall se muestra prudente tras este avance. Destaca que es la aplicaci¨®n de compromiso de Rodr¨ªguez Zapatero en el congreso del PSOE. El ex alcalde de Barcelona aspiraba a que entre las reformas figurara el modelo alem¨¢n de representaci¨®n directa de las comunidades en consejos de ministros de la UE cuando debatan asuntos sobre los que las comunidades tienen competencia exclusiva, una pretensi¨®n rechazada. Algunos, como L¨®pez Aguilar, alegan motivos funcionales. Otros, como Jos¨¦ Borrell, creen simplemente que es anatema colocar a un consejero auton¨®mico en el lugar de un ministro. Ha sido una de las peque?as batallas. Pero, en general, prospera la idea del impulso federal.
Lo que ha contribuido poderosamente a que el PSOE diera este paso es, tambi¨¦n, que lleva ya bastantes a?os al frente de gobiernos aut¨®nomos que se consideran v¨ªctimas de decisiones sectarias y antiautonomistas.
Ahora mismo, el Gobierno de Aznar est¨¢ enfrentado al de Baleares por la ecotasa; al de Arag¨®n por el trasvase del Ebro; a los de Extremadura y Andaluc¨ªa por el convenio sobre televisi¨®n; al de Castilla-La Mancha por la batalla del lino. Al presidente extreme?o le acaban de interponer adem¨¢s una querella criminal por haber afirmado que el caso Gescartera esconde financiaci¨®n ilegal del PP.
Todo esto sucede al mismo tiempo en el que Aznar se hace fotos, recuerda L¨®pez Aguilar, con los presidentes auton¨®micos 'que le r¨ªen las gracias', los del PP. ?Qu¨¦ modelo es ¨¦ste? Frente a eso hace falta un Senado que sea punto de encuentro y debate entre las comunidades y el Gobierno, argumenta Marcelino Iglesias, porque a la Diputaci¨®n General de Arag¨®n 'no le qued¨® otro salida que convocar manifestaciones en la calle' para expresar su oposici¨®n al proyecto de Plan Hidrol¨®gico Nacional. Y acudir al Tribunal Constitucional.
Desde su dura experiencia de confrontaci¨®n con el Gobierno del PP, Chaves destaca que la existencia de mecanismos de cooperaci¨®n entre las comunidades y de ¨¦stas con el Gobierno 'fortalece a Espa?a'. Y que la reforma que se preconiza del Senado es posible precisamente porque la instauraci¨®n del Estado auton¨®mico ha sido positiva para Espa?a. Es el punto de partida contrario al de CiU, PNV y Coalici¨®n Galega cuando firmaron en 1999 la Declaraci¨®n de Barcelona. Se basaban en el fracaso del modelo auton¨®mico para reclamar una serie de medidas.
Antich, el presidente balear, cree que el PSOE est¨¢ 'maduro' para asumir el federalismo 'porque hay m¨¢s sensibilidad territorial'. Y adem¨¢s, conviene ante la confrontaci¨®n con el PP: 'Nada de gallinero socialista. El PSOE se ha dado cuenta de que tiene que ofrecer la Espa?a real frente a la de la uniformidad'. Tan expresivo como siempre, Rodr¨ªguez Ibarra dijo al expresar el giro pol¨ªtico que supone para muchos guerristas: 'Lo que me une con Maragall es compartir un proyecto pol¨ªtico, que tiene sus matices y es reflejo fiel de un pa¨ªs diverso y plural'.
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