De un brezo
'El o¨ªr los males que sufren los pueblos es una de las cosas que deben llamar m¨¢s principalmente la atenci¨®n del Congreso'. Esto lo dec¨ªa el diputado nacional se?or Luj¨¢n el 14 de febrero de 1838; pero hoy parece totalmente fuera de lugar. ?D¨®nde se controla, d¨®nde se juzga p¨²blicamente la actuaci¨®n del Ayuntamiento?, ?qui¨¦n controla el tremendo poder ejecutivo del Ayuntamiento de Madrid?, ?solamente la prensa, en las escasas ocasiones que lo hace? ?El Congreso o la Asamblea de Madrid ya no est¨¢n para atender los intereses m¨¢s pr¨®ximos al ciudadano?
Estas reflexiones, que dar¨ªan para planteamientos m¨¢s profundos de la vida pol¨ªtica actual y del papel de las oposiciones en los ayuntamientos, que origina verdaderas dictaduras, temporales o no tanto, vienen a cuento por un ?brezo!
S¨ª, ?un brezo muerto!, que es la expresi¨®n correcta, administrativamente hablando, y la Junta Municipal de Chamart¨ªn. Colocar un brezo en mi patio fue origen de una actuaci¨®n desplegada en todos los ¨¢mbitos, desde la secci¨®n de obras de la citada Junta: Polic¨ªa Municipal, Correos, aparejadores municipales..., y exigencia de solicitar licencia 'normal' de obras (no se sabe si con proyecto de arquitecto y direcci¨®n del aparejador correspondiente).
De nada sirvi¨® ir hasta la secci¨®n, hablar con el responsable, presentar el correspondiente comunicado de actuaci¨®n y concertar cita con el aparejador, que pudo confirmar lo absurdo de la situaci¨®n; la actitud hacia nosotros siempre fue de una prepotencia y agresividad incomprensibles... y mientras tanto... las casas de Madrid se caen, el edificio de Urbanismo tambi¨¦n, los bares ilegales son denunciados sin que 'nada pueda hacerse. Los planes de urbanismo, reformados seg¨²n interese rebajar el nivel de protecci¨®n de determinados edificios. ?Qui¨¦n controla este poder desp¨®tico del Ayuntamiento?-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.