Homs asegura que la desaceleraci¨®n no afectar¨¢ a los ingresos

Los diputados de CiU y el PP cerraron filas ayer para derrotar en el Parlament las enmiendas a la totalidad del proyecto de presupuestos de la Generalitat para 2002 presentadas por los tres grupos de la izquierda. Sin embargo, la coincidencia fue menos entusiasta que en otras ocasiones. El PP apoy¨® esta vez al Gobierno de Pujol sobre todo, explic¨® la diputada conservadora Dolors Nadal, porque este proyecto es el fruto de la reforma de la financiaci¨®n auton¨®mica impulsada por el Gobierno de Aznar.

La diputada expuso un cat¨¢logo de cr¨ªticas al proyecto y exigi¨® los correspondientes retoques antes de comprometer el voto positivo a las cuentas de la Generalitat. El consejero de Econom¨ªa, Francesc Homs, se mostr¨® totalmente dispuesto a atender las enmiendas parciales del PP. Hasta tal extremo se mostr¨® agradecido que la diputada, visiblemente molesta, le dijo: 'No hace falta que nos d¨¦ las gracias, lo hacemos por convicci¨®n'.

El debate presupuestario comenz¨® con una presentaci¨®n del proyecto que la oposici¨®n juzg¨® triunfalista. El consejero asegur¨® que son los presupuestos m¨¢s sociales y los que destinan m¨¢s a inversi¨®n en la historia de la Generalitat. Sostuvo que eso es posible gracias a la salud y el dinamismo de la econom¨ªa catalana, y a las virtudes de la nueva financiaci¨®n auton¨®mica. A esto se a?ade, destac¨®, el hecho sin duda hist¨®rico de ser los primeros expresados en euros.

La oposici¨®n, en cambio, critic¨® la 'irrealidad' de las previsiones, que a su juicio no tienen en cuenta la desaceleraci¨®n de la econom¨ªa.

El presupuesto de la Generalitat para 2002 asciende a 2,8 billones de pesetas (16.911 millones de euros), lo que representa un aumento del 10,5% respecto al del a?o en curso.

El consejero de Econom¨ªa destac¨® con especial ¨¦nfasis al abrir el debate que el aumento de los ingresos presupuestados procedente del nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mica es de 86.000 millones de pesetas, tal como ¨¦l anunci¨® en agosto ante la incredulidad que manifest¨® la oposici¨®n. En favor de la aprobaci¨®n del proyecto argument¨® que mantiene la presi¨®n fiscal, que permitir¨¢ crear 35.000 nuevos puestos de trabajo y que sit¨²a el endeudamiento en una cota 'perfectamente sostenible'. El coste del endeudamiento, amortizaci¨®n m¨¢s intereses, representa s¨®lo el 6,8% de los ingresos.

Homs tuvo que dedicar sus esfuerzos a lo largo del debate a rebatir las acusaciones de 'irrealidad' que coincidieron en dirigirle los diputados que defendieron las tres enmiendas a la totalidad. El socialista Mart¨ª Carnicer, el republicano Josep Huguet y el ecosocialista Rafael Rib¨® insistieron una y otra vez en que basar el presupuesto de 2002 en una previsi¨®n de crecimiento de la econom¨ªa catalana del 2,7% es una temeridad cuando el Banco de Espa?a, la Uni¨®n Europea, el Fondo Monetario Internacional y la OCDE hacen previsiones del 2%. 'Usted se empe?a en no cumplir las leyes de la econom¨ªa, que indican que cuando el ciclo econ¨®mico est¨¢ en fase descendente hay que prever un descenso de los ingresos', le dijo Carnicer.

Todos subrayaron que este dato es particularmente importante en los presupuestos de 2002 porque una de las principales novedades introducidas por el nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mica es que los ingresos de la Generalitat pasan a depender en un 80% de la recaudaci¨®n de los impuestos cedidos.

Para defender su opci¨®n, Homs dijo que 'el FMI y la Uni¨®n Europea no saben que en 2002 va a haber en Catalu?a una inversi¨®n en obra civil p¨²blica de casi 800.000 millones de pesetas, la m¨¢s elevada de los? ¨²ltimos 20 a?os'. Esa inyecci¨®n econ¨®mica mantendr¨¢ el crecimiento de Catalu?a por encima de los pa¨ªses del entorno.

Eso no impidi¨® que Homs se declarara dispuesto a rectificar la previsi¨®n si, m¨¢s adelante, la desaceleraci¨®n econ¨®mica que viven ya Estados Unidos y Alemania alcanza a Catalu?a. Pero eso significar¨ªa que se habr¨ªan reducido los ingresos ahora previstos. '?Qu¨¦ har¨¢?', le pregunt¨® Mart¨ª Carnicer, '?cerrar¨¢ el grifo de las inversiones?'. Homs no respondi¨® a ese interrogante.

La debilidad inversora de los gobiernos de CiU fue otro de los ejes del debate. La izquierda le record¨® que la Generalitat est¨¢ a la cola de las comunidades aut¨®nomas en la relaci¨®n PIB-inversi¨®n. Esta situaci¨®n ha provocado ya, le dijo Rib¨®, una 'aut¨¦ntica rebeli¨®n de los sectores punteros de la sociedad catalana'.