Los profesores de la universidad p¨²blica podr¨¢n ense?ar a la vez en la privada

El paso del proyecto de Ley Org¨¢nica de Universidades (LOU) por el Senado est¨¢ siendo tan criticado y fugaz como lo fue su paso por el Congreso. Entre las 67 enmiendas aprobadas por el PP destaca una que elimina la incompatibilidad de que un profesor de la universidad p¨²blica imparta clase en la privada. Algunos rectores y el PSOE han se?alado que es un ejemplo del 'favoritismo' hacia las universidades privadas y que el profesorado formado por la p¨²blica trabajar¨¢ para 'dar beneficios' a la privada. En d¨ªa y medio (durante 12 horas escasas) se han debatido 607 enmiendas en la comisi¨®n de educaci¨®n. No se ha aprobado ni una sola presentada por el PSOE, y s¨®lo 14 y varias transaccionales, de las interpuestas por otros cinco grupos.

Esta nueva medida no es la ¨²nica adoptada en la ley que favorece a las universidades privadas, seg¨²n ha manifestado la oposici¨®n. 'Hay datos suficientes para asegurar que la ley favorece a las privadas, como han gritado los alumnos en sus protestas', se?ala el portavoz socialista de Educaci¨®n en el Senado, Manuel Fern¨¢ndez Zanca. La ministra de Educaci¨®n, Pilar del Castillo, ha argumentado que esta ley se limita a regular a las privadas, algo que no hace Ley de Reforma Universitaria (LRU). Cuando se aprob¨® esta norma, en 1983, las privadas apenas exist¨ªan en Espa?a.

'Es adem¨¢s impresentable el desprecio del PP, que no ha querido escuchar nuestros argumentos, y la prisa con la que ha pasado la ley por el Senado: ha habido un minuto y diez segundos por enmienda', a?ade Fern¨¢ndez Zanca. La ley se votar¨¢ el 14 de diciembre en el Pleno del Senado.

El Gobierno ya hizo otro cambio en el texto del proyecto de ley en el Congreso cuando ya hab¨ªa pasado por el filtro del Consejo de Estado y con el que favorec¨ªa a las universidades privadas: quit¨® la obligaci¨®n de que el 25% de los profesores de las privadas tuvieran que ser habilitados, es decir que hubieran superado la nueva prueba de habilitaci¨®n nacional que deben pasar los de las p¨²blicas para ser titulares y catedr¨¢ticos. El Gobierno estableci¨® a cambio que el 25% de docentes de las privadas deber¨ªa superar una evaluaci¨®n positiva por parte de la nueva Agencia Nacional de Evaluaci¨®n o de las agencias de las auton¨®micas.

La ley modifica adem¨¢s el equilibrio b¨¢sico del sistema entre las universidades p¨²blicas y las privadas, que actualmente se establece en la LRU y en su desarrollo. Por ejemplo, no recoge la referencia a que las privadas tengan una n¨²mero m¨ªnimo de centros (facultades y ense?anzas) lo que puede permitir la aparici¨®n de las llamadas universidades privadas tem¨¢ticas, seg¨²n han denunciado algunos rectores. El inconveniente a esta posibilidad es, a?aden, que una universidad, para considerarla como tal, debe tener un tama?o m¨ªnimo y tener suficiente diversidad cient¨ªfica en las diferentes ¨¢reas del saber y no ser una especie de gran academia. Esto permitir¨ªa adem¨¢s que muchos centros privados adscritos, que generalmente son peque?os y est¨¢n escasamente controlados, pasaran a ser universidades.

Otra medida en este sentido es la que hace referencia a los requisitos m¨ªnimos que deben cumplir las universidades privadas. Este aspecto tambi¨¦n se ha cambiado en el Congreso. Los requisitos se deber¨¢n desarrollar en un real decreto y deben ser 'b¨¢sicos', seg¨²n establece el texto de la ley actualmente, tras aceptarse una transaccional de CiU en el Congreso. Posteriormente, ser¨¢n las comunidades aut¨®nomas los que desarrollen.

Respecto a las privadas de la Iglesia, la ley da cobertura a la creaci¨®n de estos centros sin necesidad de sean reconocidas por una ley de la comunidad aut¨®nomas, algo que s¨ª deber¨¢n hacer el resto de las privadas.

En el tr¨¢mite del Senado se han introducido otros dos cambios destacables: se exime a los ayudantes actuales de las universidades de pasar dos a?os desvinculados de su universidad para acceder a una plaza de ayudante doctor y se recoge la figura del defensor del universitario, gracias a una enmienda de IU, que ya existe en algunas universidades.

El resto de los aspectos m¨¢s criticados de la ley por los que han convocado la marcha sobre Madrid de hoy son: 'La merma de participaci¨®n de la comunidad universitaria en el gobierno de la universidad, la presencia de representantes pol¨ªticos en el ¨®rgano de gobierno de las universidades, la recuperaci¨®n de ex¨¢menes nacionales para el profesorado y la ausencia de un marco de financiaci¨®n que acompa?e a la ley y de di¨¢logo con la comunidad universitaria'.