Varios pueblos de ?lava protestan por el crecimiento desmesurado
Aunque las l¨ªneas b¨¢sicas del Plan General de Ordenaci¨®n Urbana de Vitoria fueron aprobadas por el Ayuntamiento el pasado mes de agosto, a¨²n mantiene frentes abiertos. Resuelto ya el conflicto de competencias entre el Gobierno vasco y la Diputaci¨®n de ?lava, ahora les toca el turno de queja a los pueblos.
Mientras el consistorio trabaja sobre el denominado texto refundido que se incorporar¨¢ al documento general, y en el que se definen los crecimientos de las entidades menores del entorno de Vitoria, son los vecinos de estos n¨²cleos de poblaci¨®n los que denuncian de nuevo lo que consideran como crecimientos excesivos de sus localidades.
El paradigma de este crecimiento es Berrostegieta, un peque?o pueblo cercano a la capital alavesa que cuenta en la actualidad con 260 habitantes, -60 viviendas, 47 de ellas casas de tipo chal¨¦- y el Plan General prev¨¦ la construcci¨®n de 288 casas unifamiliares en los pr¨®ximos a?os, todas ellas libres, es decir de lujo. Y adem¨¢s deber¨ªan estar agradecidos porque la primera propuesta del Plan General contemplaba la construcci¨®n de 400 viviendas.
Un barrio de Vitoria
'Nos van a convertir en un barrio de Vitoria', se?ala Mari Paz Cuadrado, portavoz del colectivo vecinal de Berrostegieta.
El Gobierno vasco y la Diputaci¨®n alavesa obligaron al Ayuntamiento a un recorte de viviendas, al considerar excesivo el crecimiento previsto. Finalmente el n¨²mero total de chal¨¦s que se construir¨¢n en los 64 n¨²cleos que engloba este t¨¦rmino municipal durante los ocho a?os de vigencia del planeamiento ser¨¢ de 3.760.
Sin embargo mientras en otras localidades pr¨®ximas a la capital como Aretxabaleta, Mi?ano Mayor o Gamarra -las m¨¢s afectadas por el desarrollo inmobiliario auspiciado por el Plan General- dispondr¨¢n de inmuebles de protecci¨®n oficial, los vecinos de Berrosteguieta denuncian que su expansi¨®n se basar¨¢ ¨²nicamente en viviendas libres.
'Quieren convertir los pueblos en guetos', sostiene Cuadrado. 'Seg¨²n el nivel de vida y el poder adquisitivo, uno podr¨¢ ir a un sitio o a otro, y a nosotros nos han marcado con un elitismo que no queremos'.
La Asociaci¨®n de concejos respalda plenamente la decisi¨®n de las Juntas Administrativas de alegar, al interpretar que el impacto urban¨ªstico sobre estas entidades locales va a ser desmesurado. 'Desde el primer momento nos hemos opuesto a la filosof¨ªa del Plan General', se?ala Jos¨¦ Mar¨ªa Portilla, responsable de esta federaci¨®n. 'Pero el consistorio apenas ha modificado sus pretensiones y somos muy esc¨¦pticos respecto a la posibilidad de que ahora lo haga'.
Seg¨²n Portilla, con este tipo de actuaciones 'urban¨ªsticas exageradas' se corre el riesgo de que algunos n¨²cleos pierdan su identidad como pueblo y pasen a convertirse en comunes ¨¢reas dormitorio o residenciales.
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