La Comisi¨®n de la Energ¨ªa pide establecer una fianza por cada nueva central el¨¦ctrica

Las el¨¦ctricas no est¨¢n de enhorabuena. Al temor de que el Gobierno decida en los pr¨®ximos d¨ªas una nueva bajada de tarifas para cumplir con lo decretado en 2000 de reducir los precios 'hasta' un 9% en tres a?os, se une ahora otra mala noticia. La Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa (CNE) ha propuesto al Gobierno que obligue a las empresas interesadas en construir nuevas centrales el¨¦ctricas a depositar un anticipo de la inversi¨®n a realizar. El fin es garantizar 'la realidad del proyecto', seg¨²n se afirma en un informe aprobado por la CNE. Econom¨ªa baraja, mientras tanto, la posibilidad de congelar las tarifas en 2002.

El documento elaborado por la CNE, a petici¨®n del vicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato, analiza la situaci¨®n del sistema el¨¦ctrico y de gas natural y tiene como objetivo fundamental garantizar el suministro en los pr¨®ximos a?os. El Informe marco sobre la demanda de energ¨ªa el¨¦ctrica y gas natural y su cobertura se puede resumir en una idea: por el momento, el suministro est¨¢ garantizado (existe una potencia instalada de 52.000 megavatios, mientras la demanda de potencia m¨¢xima se situ¨® en 33.236 megavatios), pero el sistema pierde holgura y conviene acelerar las inversiones. La CNE estima que en el periodo 2001-2005 habr¨¢ que invertir al menos 1.502 millonrd de euros (250.000 millones de pesetas) en el sistema de gas y otros 1.664 millones de euros (277.000 millones de pesetas) en la red de transporte el¨¦ctrico.

Y es aqu¨ª donde surge el problema. Las compa?¨ªas del sector tienen numerosos proyectos de inversi¨®n. Pero la mayor parte, sobre el papel. Ello supone, por un lado, que no hay plena seguridad de que todos los proyectos se hagan realidad y que el Estado se arriesga a poner tubos all¨ª donde finalmente quiz¨¢ haya s¨®lo un descampado en lugar de una central el¨¦ctrica de las modernas (de ciclo combinado, que funcionan con gas).

Propuesta

Por ello, la CNE ha hecho una propuesta al Gobierno que va a levantar ampollas entre las empresas. As¨ª, la p¨¢gina 54 del informe aprobado afirma: 'Como ya ha sido tratado en el informe, la incorporaci¨®n de una nueva central de generaci¨®n el¨¦ctrica puede obligar a acometer elevadas inversiones en los refuerzos de las infraestructuras. Por ello, es preciso un compromiso jur¨ªdico y econ¨®mico [de las empresas], si fuera preciso con anticipaci¨®n financiera, que garantice la realidad del proyecto o, al menos, la recuperaci¨®n de costes en caso de retirada del proyecto'.

Con el anticipo, seg¨²n fuentes de la CNE, se lograr¨ªa adem¨¢s evitar un truco que algunas compa?¨ªas ya han utilizado: aprovechar el lento proceso de tramitaci¨®n de las autorizaciones para construir centrales para presentar m¨²ltiples proyectos, atascar los mecanismos de la Administraci¨®n y evitar la entrada de nuevos competidores.

En la actualidad existen 52 grupos de 400 megavatios (21.600 megavatios) con el proyecto iniciado y fecha de incorporaci¨®n estimada antes del 31 de diciembre de 2005. En total, cuentan con autorizaci¨®n administrativa 22 grupos de 400 megavatios y han firmado ya contrato de acceso a la red de gas 26 grupos de 400 megavatios. Los grupos que tienen contrato de acceso o autorizaci¨®n administrativa, o ambas cosas, es de 32 (12.800 megavatios).

Tarifas

La propuesta de la Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa se produce justo cuando las negociaciones para fijar las tarifas de cara al a?o pr¨®ximo est¨¢n en su punto ¨¢lgido. Las compa?¨ªas el¨¦ctricas presionan para evitar que el Gobierno cumpla el compromiso que adquiri¨® en 2000 (bajar las tarifas 'hasta' un 9% en tres a?os) con un argumento de peso: si van a invertir en los pr¨®ximos a?os, no pueden adelgazar el cap¨ªtulo de ingresos. Ante ese argumento, en el Ministerio de Econom¨ªa, seg¨²n las fuentes consultadas, se inclina por dejar las cosas como est¨¢n y no subir ni bajar el precio de la luz.

Pero la ¨²ltima palabra la tiene el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Econom¨ªa, Rodrigo Rato, atrapado entre las demandas del sector, que comprende, y el compromiso que adquiri¨® el pasado a?o de reducir progresivamente las tarifas 'hasta' un 9%. Para cumplir totalmente con el decreto aprobado, el Gobierno deber¨ªa reducir las tarifas un 5% en los dos pr¨®ximos ejercicios, pero las empresas han advertido que sus cuentas de resultados no pueden hacer frente a nuevos recortes.