'No me gustar¨ªa hacer cambios dr¨¢sticos'
Su primer d¨ªa en el despacho de la presidencia de El Monte transcurre entre un ensordecer ruido por unas obras que, dice entre sonrisas, no ha encargado ¨¦l. Jos¨¦ Mar¨ªa Bueno Lid¨®n (1949, Zaragoza), hasta la semana pasada secretario general de Desarrollo Tecnol¨®gico, conoci¨® hace siete d¨ªas su designaci¨®n como presidente de una caja a la que quiere conducir a la serenidad.
Pregunta. El pacto en El Monte da un protagonismo notable a Comisiones Obreras. ?Este poder es excesivo?
Respuesta. Comisiones ha jugado un papel determinante en el acuerdo, pero despu¨¦s ha cedido una de las dos vicepresidencias a las que ten¨ªa derecho a la lista independiente de impositores para atra¨¦rselos al pacto. Pienso que Comisiones ha antepuesto los objetivos de la entidad frente a otros prop¨®sitos poco confesables en los que estaban metidos todos los dem¨¢s. Porque claro, aqu¨ª parece que hacemos pol¨ªtica en las cajas cuando todos nos ponemos de acuerdo salvo el PP, pero si el PP se pone de acuerdo con todos en contra del PSOE eso no es politizar las cajas.
'Sobre marzo o abril, volveremos a hablar de la fusi¨®n de El Monte y San Fernando'
'Beneroso olvid¨® por qu¨¦ lleg¨® a ser presidente y pens¨® que la caja era suya'
P. ?Ese pacto condicionar¨¢ su gesti¨®n?
R. No creo, aunque todav¨ªa no he tenido tiempo de profundizar en ¨¦l. Es evidente que los representantes de los trabajadores han incluido unos puntos, con los que yo estoy plenamente de acuerdo: no conviene tener una concentraci¨®n excesiva de riesgo en el sector inmobiliario, menos a¨²n en operaciones dudosas, de corte especulativo, como es el caso de Tablada, o crear una mara?a de sociedades interpuestas que conviene ir desmontando. Los grandes temas recogidos en el acuerdo condicionan, pero en el camino adecuado.
P. ?Va en esa direcci¨®n el pacto laboral?, porque se firm¨® con los anteriores presidentes en una situaci¨®n muy ventajosa y su aplicaci¨®n ser¨¢ casi inmediata.
R. El acuerdo laboral es precisamente lo que no he le¨ªdo todav¨ªa. Ah¨ª es verdad que Comisiones trat¨® de arrimar el ascua a su sardina y si lo ha conseguido, pues habr¨¢ que aceptarlo tambi¨¦n, por supuesto
P. Una duda del proceso negociador. ?Usted era candidato de CC OO o del PSOE?
R. He sido candidato del presidente [Manuel Chaves]. Nunca he ocultado, y me siento orgulloso, que he sido representante en esta entidad por una lista de impositores de CC OO. S¨¦ que el presidente ten¨ªa m¨¢s candidatos y posiblemente sab¨ªa que mi nombre pod¨ªa ser aceptado m¨¢s f¨¢cilmente.
P. ?Qu¨¦ idea tiene sobre la reactivaci¨®n de la fusi¨®n con San Fernando?
R. La fusi¨®n es buena. Nos da m¨¢s dimensi¨®n y adem¨¢s se trata de dos cajas complementarias, porque las ¨¢reas de influencia, salvo alg¨²n solapamiento en Sevilla, son distintas: una est¨¢ en C¨¢diz [San Fernando] y otra en Huelva [El Monte]. E incluso en Sevilla, una es m¨¢s bien de vocaci¨®n urbana y la otra es de vocaci¨®n rural. Nos debemos dar dos, tres, cuatro meses para aterrizar. Y a partir de ese momento, sobre marzo o abril, volver a hablar de la fusi¨®n.
P. ?Maneja una fecha tope para la culminaci¨®n de la fusi¨®n?
R. No hay una fecha, pero si el proceso lo empezamos en marzo o abril, calculo que en un a?o podr¨ªa estar culminado.
P. ?Es posible una caja ¨²nica?
R. M¨¢s que de caja ¨²nica, hablar¨ªa de una gran caja. ?Por qu¨¦ no? Aunque nos unamos todas las cajas andaluzas, no llegamos a la mitad de los recursos administrados por La Caixa. Es bueno que las cajas nos vayamos acercando, lo que pasa que ese proceso s¨ª que es m¨¢s lento.
P. ?Mientras se pueden crear mecanismos de cooperaci¨®n?
R. Exactamente. Hay algunas estrategias que desde el punto de vista individual son dif¨ªciles de plantear (participaciones industriales o sectores estrat¨¦gicos de la econom¨ªa), pero que de manera cooperativa s¨ª se pueden hacer. Cuando hablamos de implicaci¨®n del sistema financiero andaluz en algunos sectores industriales ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil negociar con un conglomerado que de caja en caja.
P. En el proceso de fusi¨®n se recurri¨® al mensaje localista. ?La contraposici¨®n Sevilla-M¨¢laga puede volver a ser un freno?
R. Ah¨ª ha habido un juego desleal de alimentar recelos y fobias. En un mundo globalizado, si seguimos hablando si la capital econ¨®mica es Sevilla o M¨¢laga, podemos encontrarnos con que La Caixa siga tomando cuotas de poder ante este tema est¨¦ril y que al final nos encontremos que decisiones importantes sobre el sistema financiero en Andaluc¨ªa se tomen en Barcelona.
P. ?En cu¨¢ntas empresas inmobiliarias participa El Monte?
R. Todav¨ªa no lo s¨¦. En mi ¨¦poca de consejero intent¨¦ enterarme y es uno de los temas por los que quiero empezar a trabajar. Bueno, en general todas las participaciones, pero especialmente en el sector inmobiliario por su especial incidencia, como Tablada o Puerto Triana.
P. El Monte y San Fernando se han desembarazado recientemente de Tablada. ?Investigar¨¢ qu¨¦ ha pasado?
R. S¨ª, s¨ª, vamos a ver qu¨¦ ha sucedido. Creo que la presencia de las cajas en Tablada ya est¨¢ liquidada, aunque que finalmente nos enteraremos de buena parte de lo que ha sucedido.
P. ?Y con las empresas inmobiliarias tiene alg¨²n proyecto?
R. Tenemos que estudiar qu¨¦ tenemos y hacer una valoraci¨®n del conjunto de nuestras empresas participadas, aunque donde me planteo ahora alguna preocupaci¨®n es en el sector inmobiliario.
P. Cuando dej¨® el Consejo de la caja, el conflicto no estaba abierto a¨²n. ?Cu¨¢l es su idea de la gesti¨®n de la caja en los ¨²ltimos tiempos?
R. Desde que me incorpor¨¦ en 1992, he visto como El Monte ha ido creciendo en todos los r¨¢nkings. El equipo de gesti¨®n que ha habido en El Monte lo ha sabido hacer y la prueba son las fr¨ªas cifras de crecimiento. Eso quiere decir que se ha hecho una gesti¨®n adecuada.
P. Sin embargo, la Junta ha cuestionado la gesti¨®n en los ¨²ltimos meses. ?Va a iniciar una auditor¨ªa sobre esta gesti¨®n?
R. Hay un equipo auditor en la casa...
P. No, una auditor¨ªa espec¨ªfica.
R. Ahora no me atrevo a decir si lo voy a hacer o no. La sensaci¨®n que tengo es que hasta 1999, las cosas han ido bien, pero que en 2000 y en 2001, no. Hemos perdido, posiblemente, ritmo de crecimiento, rentabilidad... Si ese an¨¢lisis nos hace ver que la cosa no est¨¢ del todo bien, tendr¨ªamos que dar un paso adicional.
P. ?Qu¨¦ va a pasar con el equipo directivo de la caja?
R. No queremos entrar como un elefante en una cacharrer¨ªa. Las cuatro personas del equipo de direcci¨®n llevan muchos a?os en la caja y tienen una trayectoria reconocida. En principio, no me gustar¨ªa tener que hacer cambios dr¨¢sticos. Eso s¨ª, si tras los primeros an¨¢lisis observo que ha habido cosas que no son de lealtad a la instituci¨®n, entonces si tomar¨ªamos medidas.
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