La vida sigue igual
El 2002, el ¨²ltimo capic¨²a de nuestras vidas, parece empe?ado en no depararnos demasiadas sorpresas agradables. La ira popular estalla en Argentina y el pa¨ªs se precipita en el caos. La herencia del peronismo, las recetas del Fondo Monetario Internacional, la tenaza de la deuda externa y la incompetencia e inmoralidad de sus gobernantes parecen ser algunos de los ingredientes de tan macabro ¨¢gape. ??Boludo, ch¨¦!! Pakist¨¢n y la India retoman la senda de la violencia en beneficio, c¨®mo no, de sus pr¨®speros ciudadanos. Bush no sabe nada de Enron, el mayor fiasco/timo de las finazas americanas y sigue a la caza del islamista radical en su nueva cruzada Justicia Infinita/Libertad Duradera. Los de Yemen han preferido liquidar ellos mismos a sus ovejas negras antes de que el amigo americano tomara la iniciativa y, en Somalia, por donde han pasado todos los jinetes del Apocalipsis, ruegan a Al¨¢ no ser agraciados por la peculiar diplomacia americana ante la que la vacilante Uni¨®n Europea no sabe, no contesta.
Con la inestimable ayuda de nuestro letrado presidente mundial y del pentagonal lobby armamentista que le acompa?a, Ariel Sharon ha conseguido irritar a¨²n m¨¢s si cabe a los palestinos, reforzar a Ham¨¢s, debilitar a Arafat y alejar la paz. Ch¨¢vez duda entre la metralleta y el parlamento para resolver los problemas de pobreza de Venezuela y Fox, el de las botas camperas, sigue gestionando la pobreza y la miseria de millones de mexicanos. En Colombia, Pastrana y las FARC han evitado in extremis que las metralletas volvieran a sonar pero no hay que hacerse demasiadas esperanzas. La buena cosecha de caf¨¦ de Vietnam hunde un poco m¨¢s la econom¨ªa nicarag¨¹ense,y desastres provocados y/o naturales vuelven a poner de actualidad a viejos conocidos. En Bangladesh, millones de personas beben agua contaminada de ars¨¦nico y en Ruanda, donde en 1994 se produjo un Genocidio con may¨²sculas, el volc¨¢n Nyracongo se ha encargado de partir en dos la ciudad de Goma. Mientras tanto, los laboratorios farmac¨¦uticos se resisten como gato panza arriba al intento de que no se hagan ricos a costa del sida. El tercer, cuarto y quinto mundo, llamados eufem¨ªsticamente pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo, est¨¢ plagado de dictadores, reyezuelos, se?ores de la guerra y dirigentes de la peor cala?a, convenientemente respaldados por las c¨ªnicas democracias occidentales que se lavan la conciencia promoviendo una ineficiente e insuficiente cooperaci¨®n al desarrollo, mientras que en casa propia los desheredados no corren mejor suerte. Los organismos internacionales que practican la prospectiva nos anuncian negros horizontes para el reci¨¦n iniciado siglo mientras que millones de ni?os siguen muriendo de hambre. Harto de estar harto le pregunt¨¦ al mundo por qu¨¦ y por qu¨¦, dijo el poeta.
En el ruedo ib¨¦rico, cola de le¨®n, ajenos a tanta minucia, seguimos montando nuestro peque?o carnaval. La oposici¨®n nunca tiene raz¨®n, es desleal y, encima, se atreven a hablar cuando no han ganado las elecciones. Linos, Ca?etes, Camachos, Gescarteras y cuentas bancarias blindadas en el SCBH son temas balad¨ªs, s¨ªntomas del malperder. La oposici¨®n de tutti quanti a la ya aprobada LOU (?qui¨¦n hablaba de rodillo?) no es sino obra de unos cuantos estudiantes teledirigidos y una defensa inconfesable de privilegios. Adem¨¢s, el gobierno se siente 'suficentemente respaldado'. Media Espa?a se queda sin luz pero Rato declara sin pesta?ear que esto no origina problemas relevantes a la actividad productiva ni a los ciudadanos. Cada mes se revisan a la baja las previsiones del crecimiento del PIB pero Espa?a sigue yendo bien y siempre hay alguna herencia socialista de la que echar mano. Adem¨¢s, miren ustedes, no vamos a rebajarnos a negociar con los moros antidemocr¨¢ticos de Marruecos justo cuando estrenamos presidencia en la UE. Voyme se?or Gonz¨¢lez, aunque Cascos no quiera, y tengo que arreglar mi futuro no sea que haya problemas en casa.
Y aqu¨ª, por Levante, m¨¢s de lo mismo pero siempre con alguna nota de color. Los informes de la Sindicatura de Cuentas siempre son favorables a la gesti¨®n del gobierno por muchas irregularidades que denuncien. El leonino contrato con la Paramount para salvar los muebles de Terra M¨ªtica es una magn¨ªfica soluci¨®n y a la cabeza visible del desaguisado, el se?or Navarro, se le asciende a cargos de m¨¢s alta responsabilidad. Lo de la I+D+I va fatal pero seguimos siendo los mejores del mundo mundial, aunque hayamos duplicado la deuda en pocos a?os. Adem¨¢s, en la ¨ªnsula Zaplana estamos blindados contra el paro, en feliz expresi¨®n de Alejandro Font de Mora y tenemos un presi que va de estadista sin que se le altere ninguno de sus dos perfiles. Consuelo Ciscar sigue montando chiringuitos culturales de high quality, los contenedores culturales proliferan a mucha mayor velocidad que los contenidos e, inc¨®lume al desaliento, acaba de inventar la f¨®rmula del A+B+C, o sea la compatibilidad por decreto de la cultura de vacas sagradas, el cultivo de la cantera y el reforzamiento del 'sentimiento comunitario' que es, como no, ofrecer nuevas glorias a Espa?a desde el cultivo del sano valencianismo, seg¨²n receta patentada por Giner. Los catorce tomos de contenidos de la Ciudad de las Ciencias elaborados por el catedr¨¢tico de historia de la Ciencia Antonio Ten y sus colaboradores duermen en un caj¨®n y la publicaci¨®n de las declaraciones que hizo Olivas en su d¨ªa sobre el complejo calatraviano no le hacen ruborizar. La feliz aplicaci¨®n de la LRAU ha hecho ricos y felices a urbanizadores y promotores, problemillas legales aparte, y seguimos calificando terrenos urbanizables urbi et orbe. La sostenibilidad en clave valenciana significa sostenerse y perdurar en la rapi?a.
El ¨ªnclito Fernando Giner nos amenaza con otro parque tem¨¢tico tambi¨¦n 'en clave valencianista' (el Parc dels Pobles) con la minucia de 500.000 metros cuadrados en uno de los nuevos Eldorados (B¨¦tera). La popular (en los dos sentidos) Rita Barber¨¢ vende cabras (como el aumento de dotaciones p¨²blicas que suponen los PAI) con gran habilidad y no arrepentida por su ejemplar carpa de educaci¨®n de prostitutas nigerianas nos amenaza con acabar con el hipermercado de la droga. Para ella la fiebre no es un s¨ªntoma y quiz¨¢ se crea que las lacras sociales se solucionan expulsando al personal de sus nichos ecol¨®gicos. Adem¨¢s, ?qui¨¦n ha dicho que en la ciudad de Valencia hay problemas sociales, hambre o miseria? Eso s¨ª, no duda en ponerse a la cabeza de la mani de la clementina para no dar m¨¢s cancha a Uni¨® Valenciana y es que los yankis, desde Cuba, nos tienen man¨ªa.
Y todo esto (de Bush a Rita) sucede en plena cuesta de enero, con las mejores rebajas en el Corte Ingl¨¦s (N¨²ria Roca dixit) y nuestro orgullo colectivo herido por la injusta derrota ante el Real Madrid. Sin duda, la vida sigue igual.
Josep Sorribes es profesor de Econom¨ªa Regional y Urbana de la Universidad de Valencia.
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