Sexo a los 15

Cada vez hay m¨¢s tel¨¦fonos de informaci¨®n sexual para j¨®venes. Andaluc¨ªa, Canarias, Valencia, Pa¨ªs Vasco, Extremadura, Asturias, Baleares, Madrid... cuentan con profesionales que atienden ma?ana y tarde a los chavales; cientos de municipios en Espa?a, como Parla, Granada o Alcorc¨®n, disponen de asesor¨ªas de informaci¨®n sexual; en Catalu?a se quiere promover un debate para implantar m¨¢quinas de condones en los institutos; la Junta de Andaluc¨ªa planea repartir condones en los festivales rockeros y otras concentraciones masivas de j¨®venes; el propio Gobierno andaluz decidi¨® regalar desde el 4 de mayo, y bajo prescripci¨®n m¨¦dica, la p¨ªldora del d¨ªa siguiente, y en s¨®lo tres meses se agotaron las 7.000 disponibles; cada vez hay m¨¢s sex¨®logos dando charlas en escuelas, cada d¨ªa es m¨¢s f¨¢cil el acceso a los anticonceptivos; el sexo en la televisi¨®n hace mucho que dej¨® de ser un tab¨². Y sin embargo...

'El problema es que cuando son ni?os no queremos hablar de sexo con ellos. Y cuando son adolescentes son ellos los que ya no quieren hablar con nosotros', se?ala una sex¨®loga

'Las preguntas de los chavales y las falsas creencias siguen siendo las mismas de hace 20 a?os, cuando no hab¨ªa tantos servicios y consultas sobre sexo'

'En Espa?a estamos de vuelta de todo sin haber ido a ning¨²n sitio. Los chavales creen conocer bien el sexo, pero s¨®lo tienen nociones superficiales'

'Holanda, que es el pa¨ªs m¨¢s permisivo en materia de abortos, cuenta con la tasa m¨¢s baja en Europa de abortos adolescentes', comenta una sex¨®loga

'La informaci¨®n no basta, se trata de formar. Y eso significa machacar, insistir. Las charlitas que damos los sex¨®logos en los colegios sirven de poco'

El n¨²mero de abortos entre menores de 20 a?os aument¨® en un 11% respecto al a?o anterior, y alcanz¨® la cifra de 9.204, algo nunca visto en Espa?a. La ministra de Sanidad, Celia Villalobos, ha aconsejado a los adolescentes usar preservativos.

?Qu¨¦ est¨¢ pasando entre los j¨®venes?

'Hasta hace cinco a?os no era nada normal que abortase una ni?a de 14 o 15 a?os. Ahora, cada semana nos llegan cinco o seis de la guarder¨ªa, que es como llamamos nosotros a estas ni?as', se?ala Eva Rodr¨ªguez Armario, madre de un ni?o de nueve a?os, directora de la cl¨ªnica Sur de Sevilla y presidenta de la asociaci¨®n de Cl¨ªnicas Acreditadas para la Intervenci¨®n de Embarazos.

En el Centro Joven de Anticoncepci¨®n y Sexualidad de Madrid se recibieron el a?o pasado a casi 4.000 j¨®venes y se atendieron 6.000 consultas telef¨®nicas. Pues bien: 'Las preguntas y las falsas creencias siguen siendo las mismas que podr¨ªan plantearse en 1981, cuando no hab¨ªa tantos servicios ni consultas sobre sexo', asegura Paloma Rivero, directora del centro madrile?o.

Que si con la regla te puedes quedar embarazada ('siempre hay riesgo de embarazo durante todo el ciclo sexual, aunque con la regla sea bastante menor', les contesta Paloma Rivero). Que si la primera vez nunca te quedas ('falso'). Que si lo haces de pie no te quedas embarazada ('falso tambi¨¦n'). Que cu¨¢nto tiene que durar la relaci¨®n sexual ('depende, no hay recetas'). Que si es verdad que algunos d¨ªas del ciclo no se puede quedar embarazada ('falso; se pueden producir ovulaciones espont¨¢neas en cualquier momento del ciclo menstrual. A ese m¨¦todo err¨®neo de anticoncepci¨®n se le llama Ogino. Media Espa?a se podr¨ªa llamar Ogino en honor al nombre del m¨¦dico que estudi¨® el ciclo menstrual y dijo que hab¨ªa d¨ªas de mayor y menor riesgo. No tuvo en cuenta Ogino que el ciclo puede variar por distintas razones'). Que si hay riesgo de embarazo con coito anal ('no, a no ser que el semen se vierta fuera y llegue a la entrada de la vagina'). Que si se eyacula en una ba?era y la chica se ba?a puede quedarse embarazada ('falso, los espermatozoides no nadan'). Que si se puede utilizar el preservativo dentro del agua ('s¨ª, siempre que se coloque fuera del agua'). Que si es normal que las primeras veces duela la vagina. 'Las j¨®venes que tienen m¨¢s mitos asociados a la sexualidad y creen que les va a doler, que se van a desgarrar, que se van a morir de dolor, es muy probable que sufran. Pero el himen no es una barrera que no deja pasar el pene, sino una membrana que puede haberse roto antes por muchos motivos, como hacer gimnasia. Y hay mujeres que nacen sin himen. Y otras a las que no se le rompe y llegan al parto con el himen intacto'.

En todos los tel¨¦fonos y centros de informaci¨®n sexual el miedo al embarazo acapara la mayor¨ªa de las preguntas. 'Hasta el punto de que hay verdaderas obsesiones y paranoias. Chicas que te llegan a preguntar: 'Acabo de tener la regla, pero me parece que estoy embarazada; ?es posible?', comenta Marisa D¨ªaz, sex¨®loga del tel¨¦fono de informaci¨®n sexual de Andaluc¨ªa.

'Otra pregunta muy frecuente en las consultas', a?ade Eva Rodr¨ªguez Armario, directora de la cl¨ªnica Sur, 'es cuando la chica te dice: 'Yo no suelo tener orgasmos haci¨¦ndolo. ?Eso es normal?' Entonces dan ganas de decirle: Ay, hija, si yo te contara... Entre que ellos eyaculan enseguida y que no saben que la mayor¨ªa de las mujeres alcanzamos la excitaci¨®n mayor mediante el cl¨ªtoris, no te puedes imaginar lo normal que es'.

Siempre las mismas preguntas

Las preguntas son las mismas de hace a?os. Y los errores a la hora de colocarse el cond¨®n, tambi¨¦n. En Sevilla, Francisco Algaba, due?o de la tienda Autoservicio del Preservativo, explica a los j¨®venes 'y a los no tan j¨®venes' c¨®mo hay que ponerse el cond¨®n. Y se vale de un tubo para la lecci¨®n pr¨¢ctica. 'A pesar de que las instrucciones de uso, obligatoriamente, han de venir en todas las cajas de preservativos, mucha gente no sabe pon¨¦rselo. Lo primero que les digo es que un cond¨®n se pone mejor con tres manos que con dos. Es mejor que la mujer se implique de todo: de la compra, de la colocaci¨®n... Despu¨¦s les digo que con un dedo hay que sujetar la punta del cond¨®n para que no coja aire. Y despu¨¦s, irlo bajando. Como puede usted mismo apreciar, con dos manos es realmente dif¨ªcil hacerlo. Y si no se aplasta la punta con el dedo se forma una bolsa de aire, y ese cond¨®n es una bomba de relojer¨ªa: lo m¨¢s probable es que se rompa al eyacular'.

'Adem¨¢s, mucha gente no sabe que antes de llover siempre chispea, y meten el pene, despu¨¦s lo sacan y se ponen el cond¨®n s¨®lo para eyacular', explica Victoria Virtudes, de la cl¨ªnica D¨¢tor.

Las preguntas y los errores son los mismos. La venta de preservativos, seg¨²n las compa?¨ªas Control y D¨²rex, permanecen estables desde hace a?os tambi¨¦n. Pero el n¨²mero de j¨®venes precavidos a veces es lo ¨²nico que disminuye. En 1995, el 25% de los adolescentes que llegaron a D¨¢tor confesaban que no hab¨ªan puesto ning¨²n medio para evitar el embarzo. Cuatro a?os despu¨¦s eran el 44% los que asum¨ªan que no pusieron medios.

El gran equ¨ªvoco

Victoria Virtudes, portavoz de D¨¢tor, se?ala que los j¨®venes saben qu¨¦ m¨¦todos hay; no los utilizan porque no tienen concienciaci¨®n, tienen una falsa idea de la naturalidad y la espontaneidad. Sin embargo, las j¨®venes de hoy abortan porque son m¨¢s consecuentes y tienen m¨¢s claro que ese embarazo no deseado puede romperles la vida. Adem¨¢s hay que tener en cuenta que, al menos en Madrid, hay gran n¨²mero de adolescentes inmigrantes que acuden a nuestras cl¨ªnicas. Y tambi¨¦n deber¨ªa considerarse el poco esfuerzo del Gobierno en implantar campa?as de concienciaci¨®n. Aunque las campa?as no sean la soluci¨®n, no hay que olvidar que el a?o en que se puso en marcha el famoso lema de P¨®ntelo, p¨®nselo disminuyeron los abortos en Espa?a'.

Todos los sex¨®logos y m¨¦dicos consultados coinciden en que los grandes equ¨ªvocos del sexo giran alrededor de una sola palabra: penetraci¨®n.

'Los medios bombardean con eso. Y no hay manera de hacerles comprender que el sexo no es s¨®lo meterla', comenta el sex¨®logo Pedro Villegas, del tel¨¦fono andaluz de informaci¨®n sexual. 'El otro d¨ªa un chaval que me llamaba desde una cabina de tel¨¦fono estuvo tres cuartos de hora enganchado simplemente porque yo le estaba explicando c¨®mo pod¨ªa hacer disfrutar a la mujer con la masturbaci¨®n. Le parec¨ªa inaudito', a?ade Villega.

'Lo que pasa es que en Espa?a estamos de vuelta sin haber ido a ning¨²n sitio', comenta H¨¦ctor Magda, sex¨®logo con m¨¢s de 15 a?os de experiencia. 'Los chavales creen que conocen todos los m¨¦todos, todas las t¨¦cnicas, y en realidad s¨®lo tienen una idea superficial de ellos'.

A las lagunas culturales de los adolescentes hay que a?adir los obst¨¢culos f¨ªsicos que han de salvar los j¨®venes para conseguir los anticonceptivos. 'En muchos pueblos es casi imposible hacerse con ellos', se?ala Pedro Villegas, del tel¨¦fono andaluz de informaci¨®n sexual. 'Entrar en una farmacia donde te conocen y conocen a tu novia es un trauma. Y las m¨¢quinas no siempre son la soluci¨®n. En Andaluc¨ªa nos hemos planteado instalarlas en algunos albergues juveniles. Pero el problema es que las compa?¨ªas a veces no se comprometen a mantener la mercanc¨ªa fresca y renovada. En agosto vi una m¨¢quina de condones en la puerta de una farmacia en Sevilla. Y le daba el sol de lleno horas y horas. Y lo de la p¨ªldora poscoito es otro mal trago. En Ja¨¦n capital, por ejemplo, es imposible conseguirla. Todos los m¨¦dicos se han declarado objetores de conciencia. En Almer¨ªa, muy dif¨ªcil tambi¨¦n. Algunos m¨¦dicos est¨¢n muy desinformados, creen que si la recetan, los padres del menor se les van a echar encima'.

'Y en Madrid hay hospitales p¨²blicos donde todos los m¨¦dicos se han declarado objetores', a?ade la sex¨®loga Paloma Rivero.

'En las charlas que doy en los colegios de pueblos algunas chavalas desconf¨ªan de que el m¨¦dico vaya a revelar sus nombres en caso de embarazo', comenta Eva Rodr¨ªguez Armario. 'Yo les digo que ellos, por ley, est¨¢n obligados a garantizar la confidencialidad. Y las chavalas a veces me han contestado, y con mucha raz¨®n: '?Pero qu¨¦ ocurre con la auxiliar del m¨¦dico que te ha visto nacer y crecer y que se est¨¢ enterando de todo tu problema? ?Se va a callar tambi¨¦n?'.

Rodr¨ªguez Armario, directora de la cl¨ªnica Sur de Andaluc¨ªa, resume la opini¨®n de gran parte de los profesionales de este campo: 'La informaci¨®n no basta, se trata de formar. Y eso significa machacar, insistir. Las charlitas que damos en los colegios s¨®lo llegan a quienes ya est¨¢n concienciados. El sexo es una asignatura transversal en la LOGSE, y al final nadie la da. El problema es que cuando son ni?os no queremos hablar de sexo con ellos. Y cuando son adolescentes son ellos los que ya no quieren hablar con nosotros. Hay que atenderles cuando te preguntan qu¨¦ significa ese anuncio que sale en la tele hablando de reglas y de manchar, qu¨¦ eran esos ruidos que se o¨ªan anoche en tu habitaci¨®n, por qu¨¦ le han dicho en la escuela a un ni?o marica... Los padres nunca nos damos cuenta de que nuestros hijos crecen, y adem¨¢s no queremos que crezcan. Una frase que yo oigo mucho entre las madres que vienen aqu¨ª con sus hijas es: 'Pero si hasta hace tres d¨ªas mi ni?a jugaba con mu?ecas'.

Ra¨²l D¨ªaz, miembro del programa canario de educaci¨®n afectiva Harimaguada coincide con su colega. 'Siembra viento y tendr¨¢s tempestades. No s¨®lo embarazos no deseados, sino violaciones, violencia de g¨¦nero, acoso... Esta sociedad y esta cultura est¨¢ mirando hacia otro lado. Es hip¨®crita que la sociedad se escandalice por este problema y no los afronte'.

'Ni en medicina, ni en psicolog¨ªa, ni en magisterio, ni en biolog¨ªa hay una asignatura concreta que aborde el tema del sexo. Y son profesionales que despu¨¦s tienen que explicarle estas cuestiones a los chavales', se lamenta Pedro Villegas, del tel¨¦fono andaluz de informaci¨®n sexual. 'Yo voy a muchos colegios y les digo a los propios maestros que me dibujen los ¨®rganos de la mujer por dentro y por fuera. Y por dentro, todo el mundo dibuja estupendamente: el ¨²tero, los ovarios... Pero por fuera a menudo me dibujan una raja y ya est¨¢. Y por ah¨ª se supone que hacen pip¨ª, el amor, que tienen orgasmos...'

'A veces te encuentras excepciones maravillosas', comenta Eva Rodr¨ªguez Armario. 'A mi hijo de nueve a?os le han explicado muy bien este a?o las cuestiones del sexo en la asignatura Conocimiento del Medio. Ha sido la maestra sustituta. Le explic¨® el embarazo y le habl¨® de ella misma. C¨®mo se enamor¨®, c¨®mo fue su embarazo... Hay colegios donde alguna madre embarazada acude a clase a explicarles c¨®mo se siente y qu¨¦ es el embarazo. Esas cosas, a la hora de la verdad, cuando llega la adolescencia, dan sus frutos. Hacen que la comunicaci¨®n con tu hijo sea mucho m¨¢s f¨¢cil'.

'Holanda, que es el pa¨ªs m¨¢s permisivo en materia de abortos, cuenta con la tasa m¨¢s baja en Europa de abortos adolescentes', explica Lyn Thomas desde Ginebra, directora de la Federaci¨®n Internacional de Planificaci¨®n Familiar, una ONG que lleva 50 a?os trabajando en el tema. 'En Holanda, en las escuelas no se limitan a ense?ar las funciones biol¨®gicas y los ¨®rganos genitales. Les ense?an a los chavales a decir no si quieren decir no, t¨¢cticas de negociaci¨®n entre ellos. Adem¨¢s garantizan una confidencialidad absoluta. En otros pa¨ªses, como B¨¦lgica, Dinamarca, Suecia, Noruega y el Reino Unido, no se necesita, como en Espa?a, prescripci¨®n del m¨¦dico para conseguir la p¨ªldora del d¨ªa despu¨¦s. En los institutos de Francia las j¨®venes tienen acceso a la p¨ªldora'.

Espa?a, una vez m¨¢s, parece diferente.Cada vez hay m¨¢s tel¨¦fonos de informaci¨®n sexual para j¨®venes. Andaluc¨ªa, Canarias, Valencia, Pa¨ªs Vasco, Extremadura, Asturias, Baleares, Madrid... cuentan con profesionales que atienden ma?ana y tarde a los chavales; cientos de municipios en Espa?a, como Parla, Granada o Alcorc¨®n, disponen de asesor¨ªas de informaci¨®n sexual; en Catalu?a se quiere promover un debate para implantar m¨¢quinas de condones en los institutos; la Junta de Andaluc¨ªa planea repartir condones en los festivales rockeros y otras concentraciones masivas de j¨®venes; el propio Gobierno andaluz decidi¨® regalar desde el 4 de mayo, y bajo prescripci¨®n m¨¦dica, la p¨ªldora del d¨ªa siguiente, y en s¨®lo tres meses se agotaron las 7.000 disponibles; cada vez hay m¨¢s sex¨®logos dando charlas en escuelas, cada d¨ªa es m¨¢s f¨¢cil el acceso a los anticonceptivos; el sexo en la televisi¨®n hace mucho que dej¨® de ser un tab¨². Y sin embargo...

El n¨²mero de abortos entre menores de 20 a?os aument¨® en un 11% respecto al a?o anterior, y alcanz¨® la cifra de 9.204, algo nunca visto en Espa?a. La ministra de Sanidad, Celia Villalobos, ha aconsejado a los adolescentes usar preservativos.

?Qu¨¦ est¨¢ pasando entre los j¨®venes?

'Hasta hace cinco a?os no era nada normal que abortase una ni?a de 14 o 15 a?os. Ahora, cada semana nos llegan cinco o seis de la guarder¨ªa, que es como llamamos nosotros a estas ni?as', se?ala Eva Rodr¨ªguez Armario, madre de un ni?o de nueve a?os, directora de la cl¨ªnica Sur de Sevilla y presidenta de la asociaci¨®n de Cl¨ªnicas Acreditadas para la Intervenci¨®n de Embarazos.

En el Centro Joven de Anticoncepci¨®n y Sexualidad de Madrid se recibieron el a?o pasado a casi 4.000 j¨®venes y se atendieron 6.000 consultas telef¨®nicas. Pues bien: 'Las preguntas y las falsas creencias siguen siendo las mismas que podr¨ªan plantearse en 1981, cuando no hab¨ªa tantos servicios ni consultas sobre sexo', asegura Paloma Rivero, directora del centro madrile?o.

Que si con la regla te puedes quedar embarazada ('siempre hay riesgo de embarazo durante todo el ciclo sexual, aunque con la regla sea bastante menor', les contesta Paloma Rivero). Que si la primera vez nunca te quedas ('falso'). Que si lo haces de pie no te quedas embarazada ('falso tambi¨¦n'). Que cu¨¢nto tiene que durar la relaci¨®n sexual ('depende, no hay recetas'). Que si es verdad que algunos d¨ªas del ciclo no se puede quedar embarazada ('falso; se pueden producir ovulaciones espont¨¢neas en cualquier momento del ciclo menstrual. A ese m¨¦todo err¨®neo de anticoncepci¨®n se le llama Ogino. Media Espa?a se podr¨ªa llamar Ogino en honor al nombre del m¨¦dico que estudi¨® el ciclo menstrual y dijo que hab¨ªa d¨ªas de mayor y menor riesgo. No tuvo en cuenta Ogino que el ciclo puede variar por distintas razones'). Que si hay riesgo de embarazo con coito anal ('no, a no ser que el semen se vierta fuera y llegue a la entrada de la vagina'). Que si se eyacula en una ba?era y la chica se ba?a puede quedarse embarazada ('falso, los espermatozoides no nadan'). Que si se puede utilizar el preservativo dentro del agua ('s¨ª, siempre que se coloque fuera del agua'). Que si es normal que las primeras veces duela la vagina. 'Las j¨®venes que tienen m¨¢s mitos asociados a la sexualidad y creen que les va a doler, que se van a desgarrar, que se van a morir de dolor, es muy probable que sufran. Pero el himen no es una barrera que no deja pasar el pene, sino una membrana que puede haberse roto antes por muchos motivos, como hacer gimnasia. Y hay mujeres que nacen sin himen. Y otras a las que no se le rompe y llegan al parto con el himen intacto'.

En todos los tel¨¦fonos y centros de informaci¨®n sexual el miedo al embarazo acapara la mayor¨ªa de las preguntas. 'Hasta el punto de que hay verdaderas obsesiones y paranoias. Chicas que te llegan a preguntar: 'Acabo de tener la regla, pero me parece que estoy embarazada; ?es posible?', comenta Marisa D¨ªaz, sex¨®loga del tel¨¦fono de informaci¨®n sexual de Andaluc¨ªa.

'Otra pregunta muy frecuente en las consultas', a?ade Eva Rodr¨ªguez Armario, directora de la cl¨ªnica Sur, 'es cuando la chica te dice: 'Yo no suelo tener orgasmos haci¨¦ndolo. ?Eso es normal?' Entonces dan ganas de decirle: Ay, hija, si yo te contara... Entre que ellos eyaculan enseguida y que no saben que la mayor¨ªa de las mujeres alcanzamos la excitaci¨®n mayor mediante el cl¨ªtoris, no te puedes imaginar lo normal que es'.

Siempre las mismas preguntas

Las preguntas son las mismas de hace a?os. Y los errores a la hora de colocarse el cond¨®n, tambi¨¦n. En Sevilla, Francisco Algaba, due?o de la tienda Autoservicio del Preservativo, explica a los j¨®venes 'y a los no tan j¨®venes' c¨®mo hay que ponerse el cond¨®n. Y se vale de un tubo para la lecci¨®n pr¨¢ctica. 'A pesar de que las instrucciones de uso, obligatoriamente, han de venir en todas las cajas de preservativos, mucha gente no sabe pon¨¦rselo. Lo primero que les digo es que un cond¨®n se pone mejor con tres manos que con dos. Es mejor que la mujer se implique de todo: de la compra, de la colocaci¨®n... Despu¨¦s les digo que con un dedo hay que sujetar la punta del cond¨®n para que no coja aire. Y despu¨¦s, irlo bajando. Como puede usted mismo apreciar, con dos manos es realmente dif¨ªcil hacerlo. Y si no se aplasta la punta con el dedo se forma una bolsa de aire, y ese cond¨®n es una bomba de relojer¨ªa: lo m¨¢s probable es que se rompa al eyacular'.

'Adem¨¢s, mucha gente no sabe que antes de llover siempre chispea, y meten el pene, despu¨¦s lo sacan y se ponen el cond¨®n s¨®lo para eyacular', explica Victoria Virtudes, de la cl¨ªnica D¨¢tor.

Las preguntas y los errores son los mismos. La venta de preservativos, seg¨²n las compa?¨ªas Control y D¨²rex, permanecen estables desde hace a?os tambi¨¦n. Pero el n¨²mero de j¨®venes precavidos a veces es lo ¨²nico que disminuye. En 1995, el 25% de los adolescentes que llegaron a D¨¢tor confesaban que no hab¨ªan puesto ning¨²n medio para evitar el embarzo. Cuatro a?os despu¨¦s eran el 44% los que asum¨ªan que no pusieron medios.

El gran equ¨ªvoco

Victoria Virtudes, portavoz de D¨¢tor, se?ala que los j¨®venes saben qu¨¦ m¨¦todos hay; no los utilizan porque no tienen concienciaci¨®n, tienen una falsa idea de la naturalidad y la espontaneidad. Sin embargo, las j¨®venes de hoy abortan porque son m¨¢s consecuentes y tienen m¨¢s claro que ese embarazo no deseado puede romperles la vida. Adem¨¢s hay que tener en cuenta que, al menos en Madrid, hay gran n¨²mero de adolescentes inmigrantes que acuden a nuestras cl¨ªnicas. Y tambi¨¦n deber¨ªa considerarse el poco esfuerzo del Gobierno en implantar campa?as de concienciaci¨®n. Aunque las campa?as no sean la soluci¨®n, no hay que olvidar que el a?o en que se puso en marcha el famoso lema de P¨®ntelo, p¨®nselo disminuyeron los abortos en Espa?a'.

Todos los sex¨®logos y m¨¦dicos consultados coinciden en que los grandes equ¨ªvocos del sexo giran alrededor de una sola palabra: penetraci¨®n.

'Los medios bombardean con eso. Y no hay manera de hacerles comprender que el sexo no es s¨®lo meterla', comenta el sex¨®logo Pedro Villegas, del tel¨¦fono andaluz de informaci¨®n sexual. 'El otro d¨ªa un chaval que me llamaba desde una cabina de tel¨¦fono estuvo tres cuartos de hora enganchado simplemente porque yo le estaba explicando c¨®mo pod¨ªa hacer disfrutar a la mujer con la masturbaci¨®n. Le parec¨ªa inaudito', a?ade Villega.

'Lo que pasa es que en Espa?a estamos de vuelta sin haber ido a ning¨²n sitio', comenta H¨¦ctor Magda, sex¨®logo con m¨¢s de 15 a?os de experiencia. 'Los chavales creen que conocen todos los m¨¦todos, todas las t¨¦cnicas, y en realidad s¨®lo tienen una idea superficial de ellos'.

A las lagunas culturales de los adolescentes hay que a?adir los obst¨¢culos f¨ªsicos que han de salvar los j¨®venes para conseguir los anticonceptivos. 'En muchos pueblos es casi imposible hacerse con ellos', se?ala Pedro Villegas, del tel¨¦fono andaluz de informaci¨®n sexual. 'Entrar en una farmacia donde te conocen y conocen a tu novia es un trauma. Y las m¨¢quinas no siempre son la soluci¨®n. En Andaluc¨ªa nos hemos planteado instalarlas en algunos albergues juveniles. Pero el problema es que las compa?¨ªas a veces no se comprometen a mantener la mercanc¨ªa fresca y renovada. En agosto vi una m¨¢quina de condones en la puerta de una farmacia en Sevilla. Y le daba el sol de lleno horas y horas. Y lo de la p¨ªldora poscoito es otro mal trago. En Ja¨¦n capital, por ejemplo, es imposible conseguirla. Todos los m¨¦dicos se han declarado objetores de conciencia. En Almer¨ªa, muy dif¨ªcil tambi¨¦n. Algunos m¨¦dicos est¨¢n muy desinformados, creen que si la recetan, los padres del menor se les van a echar encima'.

'Y en Madrid hay hospitales p¨²blicos donde todos los m¨¦dicos se han declarado objetores', a?ade la sex¨®loga Paloma Rivero.

'En las charlas que doy en los colegios de pueblos algunas chavalas desconf¨ªan de que el m¨¦dico vaya a revelar sus nombres en caso de embarazo', comenta Eva Rodr¨ªguez Armario. 'Yo les digo que ellos, por ley, est¨¢n obligados a garantizar la confidencialidad. Y las chavalas a veces me han contestado, y con mucha raz¨®n: '?Pero qu¨¦ ocurre con la auxiliar del m¨¦dico que te ha visto nacer y crecer y que se est¨¢ enterando de todo tu problema? ?Se va a callar tambi¨¦n?'.

Rodr¨ªguez Armario, directora de la cl¨ªnica Sur de Andaluc¨ªa, resume la opini¨®n de gran parte de los profesionales de este campo: 'La informaci¨®n no basta, se trata de formar. Y eso significa machacar, insistir. Las charlitas que damos en los colegios s¨®lo llegan a quienes ya est¨¢n concienciados. El sexo es una asignatura transversal en la LOGSE, y al final nadie la da. El problema es que cuando son ni?os no queremos hablar de sexo con ellos. Y cuando son adolescentes son ellos los que ya no quieren hablar con nosotros. Hay que atenderles cuando te preguntan qu¨¦ significa ese anuncio que sale en la tele hablando de reglas y de manchar, qu¨¦ eran esos ruidos que se o¨ªan anoche en tu habitaci¨®n, por qu¨¦ le han dicho en la escuela a un ni?o marica... Los padres nunca nos damos cuenta de que nuestros hijos crecen, y adem¨¢s no queremos que crezcan. Una frase que yo oigo mucho entre las madres que vienen aqu¨ª con sus hijas es: 'Pero si hasta hace tres d¨ªas mi ni?a jugaba con mu?ecas'.

Ra¨²l D¨ªaz, miembro del programa canario de educaci¨®n afectiva Harimaguada coincide con su colega. 'Siembra viento y tendr¨¢s tempestades. No s¨®lo embarazos no deseados, sino violaciones, violencia de g¨¦nero, acoso... Esta sociedad y esta cultura est¨¢ mirando hacia otro lado. Es hip¨®crita que la sociedad se escandalice por este problema y no los afronte'.

'Ni en medicina, ni en psicolog¨ªa, ni en magisterio, ni en biolog¨ªa hay una asignatura concreta que aborde el tema del sexo. Y son profesionales que despu¨¦s tienen que explicarle estas cuestiones a los chavales', se lamenta Pedro Villegas, del tel¨¦fono andaluz de informaci¨®n sexual. 'Yo voy a muchos colegios y les digo a los propios maestros que me dibujen los ¨®rganos de la mujer por dentro y por fuera. Y por dentro, todo el mundo dibuja estupendamente: el ¨²tero, los ovarios... Pero por fuera a menudo me dibujan una raja y ya est¨¢. Y por ah¨ª se supone que hacen pip¨ª, el amor, que tienen orgasmos...'

'A veces te encuentras excepciones maravillosas', comenta Eva Rodr¨ªguez Armario. 'A mi hijo de nueve a?os le han explicado muy bien este a?o las cuestiones del sexo en la asignatura Conocimiento del Medio. Ha sido la maestra sustituta. Le explic¨® el embarazo y le habl¨® de ella misma. C¨®mo se enamor¨®, c¨®mo fue su embarazo... Hay colegios donde alguna madre embarazada acude a clase a explicarles c¨®mo se siente y qu¨¦ es el embarazo. Esas cosas, a la hora de la verdad, cuando llega la adolescencia, dan sus frutos. Hacen que la comunicaci¨®n con tu hijo sea mucho m¨¢s f¨¢cil'.

'Holanda, que es el pa¨ªs m¨¢s permisivo en materia de abortos, cuenta con la tasa m¨¢s baja en Europa de abortos adolescentes', explica Lyn Thomas desde Ginebra, directora de la Federaci¨®n Internacional de Planificaci¨®n Familiar, una ONG que lleva 50 a?os trabajando en el tema. 'En Holanda, en las escuelas no se limitan a ense?ar las funciones biol¨®gicas y los ¨®rganos genitales. Les ense?an a los chavales a decir no si quieren decir no, t¨¢cticas de negociaci¨®n entre ellos. Adem¨¢s garantizan una confidencialidad absoluta. En otros pa¨ªses, como B¨¦lgica, Dinamarca, Suecia, Noruega y el Reino Unido, no se necesita, como en Espa?a, prescripci¨®n del m¨¦dico para conseguir la p¨ªldora del d¨ªa despu¨¦s. En los institutos de Francia las j¨®venes tienen acceso a la p¨ªldora'.

Espa?a, una vez m¨¢s, parece diferente.