El Estado de Wojtyla

Prepar¨¦monos para lo peor: una Rep¨²blica fundada no sobre los fr¨¢giles y siempre revocables art¨ªculos de la Constituci¨®n, sino sobre los principios perennes de la Iglesia cat¨®lica. Una Rep¨²blica en la que se prohibir¨¢ el divorcio, el aborto y los anticonceptivos. (...) La firme condena pronunciada por el Papa de la 'plaga del divorcio' (...) no es una novedad, (...) pero lo que s¨ª es una novedad es la llamada a los 'operadores del derecho', magistrados y abogados, que, como fieles cat¨®licos, deber¨¢n evitar 'estar implicados personalmente en todo lo que se refiera a una cooperaci¨®n al divorcio'. Es, pues, una llamada a la 'objeci¨®n de conciencia' no prevista en nuestras leyes. (...) Es preocupante esta insistencia en dictar (...) normas de comportamiento para los cat¨®licos en contradicci¨®n con las leyes italianas. (...) Pero el Papa, cuando habla de moral, (...) no s¨®lo habla a Italia. Tambi¨¦n a Europa, donde se han difundido modos de vida que la Iglesia desaprueba: no s¨®lo el aborto o el divorcio, sino tambi¨¦n las parejas de hecho hetero y homosexuales. (...) En la Carta de los Derechos aprobada en Laeken no se menciona esa 'herencia y patrimonio religioso' como parte de nuestra identidad. Los franceses, en nombre de la laicidad de las instituciones nacionales y supranacionales, se opusieron a la adopci¨®n de una f¨®rmula que podr¨ªa comportar una reglamentaci¨®n m¨¢s restrictiva de las libertades personales. Gianfranco Fini, m¨¢s sensible a las palabras del Pont¨ªfice, ha declarado que 'el Gobierno italiano har¨¢ todo lo posible para que la UE vuelva a discutir el papel de la religi¨®n'. (...)

Miriam Mafai

Roma, 29 de enero