Por una educaci¨®n liberal
Dec¨ªa el pedagogo suizo Pestalozzi que adem¨¢s de educar la cabeza, mediante la adquisici¨®n de conocimientos, hay que educar las manos, ense?ando a hacer cosas, y educar el coraz¨®n, estimulando comportamientos beneficiosos para el individuo y la sociedad. Tal idea no es ajena al pensamiento de V¨ªctor P¨¦rez-D¨ªaz y Juan Carlos Rodr¨ªguez, que apuestan por 'un orden de libertad como cuesti¨®n de principio' armonizado con un cierto 'patriotismo templado' en el libro Educaci¨®n Superior y futuro de Espa?a. Tomando la definici¨®n de educaci¨®n liberal de Michael Oakeshott como punto de partida, consistente en 'la transmisi¨®n de una herencia cultural acumulada a lo largo de 25 siglos en una determinada zona del planeta', desarrollan en el texto su distinci¨®n respecto a una educaci¨®n general m¨¢s preocupada por la transmisi¨®n de conocimientos, capacidades o destrezas que permita a los alumnos su futura integraci¨®n activa en la sociedad.
La obra apuesta con rotundidad por 'una forma de educaci¨®n liberal, es decir, una educaci¨®n no para el compromiso con este mundo tal como puede ser en cada momento, sino para la distancia razonable' del mismo. Su tesis aporta aire fresco al deca¨ªdo o fr¨ªvolo debate p¨²blico sobre el papel de la educaci¨®n superior en Espa?a, secuestrado por una cierta tentaci¨®n tecnocr¨¢tica o utilitarista. Coincide con la idea de la educaci¨®n como transmisi¨®n de una herencia entre generaciones, seg¨²n la visi¨®n de Hannah Arendt, y la reflexi¨®n de Giner de que s¨®lo apelando a la historia cabe definir el concepto de universidad. A la vez, recupera las m¨¢s nobles connotaciones del t¨¦rmino liberal en l¨ªnea con el trabajo que hizo Juan Marichal en su libro El secreto de Espa?a; planteamientos coincidentes con la acepci¨®n que en Espa?a se ha dado hist¨®ricamente al liberalismo (alejada de una interpretaci¨®n reduccionista, en boca de algunos personajes p¨²blicos poco ilustrados), de Jos¨¦ Prat, de Fernando de los R¨ªos, ministro de Educaci¨®n republicano que era socialista a fuer de ser liberal.
Los autores afirman que 'las
universidades espa?olas suelen ofrecer unas oportunidades reducidas de educaci¨®n liberal'; no en vano son constantes sus referencias a Giner y a la Instituci¨®n Libre de Ense?anza como 'una de las experiencias m¨¢s interesantes de educaci¨®n superior privada de la historia de Espa?a'.
Con este libro, los autores cubren la primera etapa de una trilog¨ªa prometida, y prometedora, de un ambicioso diagn¨®stico de la educaci¨®n en nuestro pa¨ªs. Tras el an¨¢lisis de la educaci¨®n superior, anuncian posteriores estudios sobre la educaci¨®n no universitaria y la formaci¨®n profesional.
La obra contiene un torrente de datos sobre otros sistemas universitarios europeos y dedica un cap¨ªtulo al an¨¢lisis de la experiencia norteamericana, su historia, sus caracter¨ªsticas actuales y las objeciones que esp¨ªritus atemperados pueden formular al modelo. V¨ªctor P¨¦rez-D¨ªaz y Juan Carlos Rodr¨ªguez han conseguido un libro inteligente y culto, que satisface. Es una consecuencia l¨®gica de la trayectoria acad¨¦mica del catedr¨¢tico de sociolog¨ªa V¨ªctor P¨¦rez- D¨ªaz (y sus colaboradores), avalada por numerosas investigaciones sobre asuntos cruciales de la sociedad espa?ola y por su paso como profesor visitante por prestigiosas universidades norteamericanas.
Sobre la evoluci¨®n futura de la matr¨ªcula universitaria creen que, en contra de vaticinios de descensos bruscos, 'no parece posible tomar como una constante la tasa de escolarizaci¨®n' y apuntan hacia una estabilizaci¨®n en el n¨²mero de estudiantes, de los que denuncian su excesivo sedentarismo. La endogamia en los procedimientos de selecci¨®n del profesorado tambi¨¦n es tratada; hacen los autores una acusaci¨®n fuerte del mal a la LRU 'que rebaja definitivamente los criterios de admisi¨®n como titular o catedr¨¢tico al convertir pruebas de cierta dureza y de d¨ªas de preparaci¨®n, cara al p¨²blico, en ejercicios florales'. Aunque reconocen que la ley de 1983 permiti¨® dar pasos adelante en la autonom¨ªa universitaria, critican la rigidez organizativa imperante pues ese cors¨¦ limita su horizonte de crecimiento y coarta las expectativas de b¨²squeda de excelencia.
La obra pretende ser, seg¨²n
afirm¨® V¨ªctor P¨¦rez-D¨ªaz, una reflexi¨®n a distancia de las batallas pol¨ªticas del momento. No obstante, el libro no es neutral ante los cambios que convienen a nuestras universidades. Frente a la 'tradici¨®n dominante' caracterizada por una mayor¨ªa amplia de universidades p¨²blicas, orientadas a la educaci¨®n para el empleo posterior y una escasa aceptaci¨®n de la diversidad institucional, hay dos v¨ªas de reforma: la de entorno blando, con reformas ligeras, y la de entorno duro, m¨¢s exigente y m¨¢s competitiva. Sugiere mayor libertad de movimientos en el quehacer universitario; quiz¨¢ aqu¨ª puede residir una objeci¨®n: hay que equilibrar la competitividad con la cooperaci¨®n, no hay en la actualidad un sistema de ayudas a los estudiantes que evite que ese camino d¨¦ lugar a una universidad para las ¨¦lites y otra para los humildes. Llegado a la ¨²ltima p¨¢gina, el lector percibe que ha recorrido un libro importante.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.