'Es necesario que la sociedad asuma que el alcohol es droga dura'
El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Mariano Fern¨¢ndez Bermejo, es partidario de atajar el problema del botell¨®n desde la ra¨ªz, 'con una gran dosis de imaginaci¨®n' y 'buscando alternativa de ocio' a aquellos j¨®venes 'que han decidido tomar la calle para beber'.
Para Fern¨¢ndez Bermejo, la proliferaci¨®n del botell¨®n 'es un problema social' que debe resolverse desde los estamentos 'pol¨ªticos'. No obstante, subraya que 'los comportamientos antisociales' que 'se generan durante el botell¨®n resultan intolerables y exigen una respuesta policial'.
'Hay zonas de Madrid', explica, 'a las que les ha tocado la china y sufren los efectos colaterales del consumo de alcohol. Durante el botell¨®n, cuando los j¨®venes beben irresponsablemente, desatan comportamientos que, realizados en masa, resultan socialmente inaceptables: generar ruido con tambores a altas horas de la madrugada, quemar mobiliario urbano, provocar charcos de orina en portales vecinales...'. Este tipo de comportamientos, 'que privan a los vecinos de sus derechos b¨¢sicos, el derecho al descanso, a la higiene de los portales de sus casas, a la intimidad, l¨®gicamente requieren una respuesta policial sostenida'.
No es necesario cambiar las leyes, a su juicio. La actual normativa regula y ampara el castigo para esas conductas. 'Ante el ruido excesivo de un tambor a deshoras cabe imponer, por ejemplo, una multa; y ante la quema del mobiliario urbano, otras medidas, incluso penales'. Y es que, razona Fern¨¢ndez Bermejo, 'la marea humana del botell¨®n s¨®lo es soportable si no conlleva comportamientos antisociales ni viola derechos ciudadanos b¨¢sicos. Y la sociedad, incluidos los propios integrantes del botell¨®n, son conscientes de que esas conductas son intolerables'.
De todas formas, el jefe de los 175 fiscales de la Comunidad de Madrid matiza que, m¨¢s que un asunto represivo-jur¨ªdico, la pr¨¢ctica cada vez m¨¢s generalizada de consumir descontroladamente bebidas en la calle 'es un problema de alcoholismo, de droga dura y muy destructiva'. Por ello, hay que afrontarlo desde su base. 'Es necesario modificar la percepci¨®n social del fen¨®meno y que la sociedad asuma que estamos ante una droga dura'.
Al responsable de la Fiscal¨ªa de Madrid le preocupa 'la rapidez y corta edad con que los j¨®venes se acercan al consumo del alcohol' y 'el espectacular aumento de los ingresos hospitalarios por comas et¨ªlicos'. 'Muchos j¨®venes', detalla, 'se est¨¢n iniciando en el alcohol a los 13 a?os: lo hacen muy deprisa y de forma generalizada, con el consiguiente impacto en su salud'. Otro dato que inquieta a Fern¨¢ndez Bermejo es 'la permisibilidad social' frente a la bebida. 'S¨®lo el 16% de los padres transmite a sus hijos la idea de que el alcohol es un problema grave, una droga de las duras'. 'Por ello', a?ade, 'el mensaje de que el alcohol es droga dura, no blanda, debe dirigirse tambi¨¦n a los padres'.
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