Fox¨¢

El C¨ªrculo de Bellas Artes dedic¨® un ciclo a los escritores 'heterodoxos'. Uno de los conferenciantes, Andr¨¦s Trapiello, precis¨® que esos escritores son heterodoxos hoy, pero no en su ¨¦poca, porque eran franquistas. Hablar de Rafael S¨¢nchez Mazas, de Eugenio Montes, de Edgar Neville o de Agust¨ªn de Fox¨¢ sin condicionar el juicio a su adscripci¨®n pol¨ªtica es un saludable, civilizado y antimaniqueo ejercicio de cr¨ªtica literaria.

As¨ª lo hizo Andr¨¦s Trapiello al tratar de Fox¨¢ (1906-1959), un autor cuya obra es inencontrable, exceptuando su novela Madrid, de Corte a checa, que ha sido reeditada y que, seg¨²n el conferenciante, tiene, aparte del valor literario, el de documento de la ¨¦poca. Se le recuerda por sus art¨ªculos, pero las obras de teatro y los libros de poemas que escribi¨®, Narcisos del caracol, El toro, la muerte y el agua, prologado por Manuel Machado, est¨¢n olvidados. Sin embargo, el conferenciante ley¨® algunos sonetos que tienen cierta ajada, decadente belleza: 'Y pensar que despu¨¦s que yo me muera a¨²n surgir¨¢n ma?anas luminosas...'.

Mientras Trapiello hablaba, yo recordaba a Agust¨ªn de Fox¨¢, 'conde de lo Mismo', 'el hombre m¨¢s peligroso de Europa', seg¨²n Curcio Malaparte, por haberle visto alguna vez en Madrid cuando era estudiante y haber o¨ªdo hablar de ¨¦l, no s¨®lo por su literatura, sino, sobre todo, por las an¨¦cdotas que se le atribu¨ªan. De los escritores adictos a Franco, era el que menos antip¨¢tico ca¨ªa a los progres.

Cat¨®lico y anticlerical al mismo tiempo, Fox¨¢ dijo de un ministro de Exteriores muy beato que en una ocasi¨®n se retras¨® en llegar a una reuni¨®n de diplom¨¢ticos: 'Se habr¨¢ ido de curas'. Otro d¨ªa que el ministro hablaba, lleg¨® ¨¦l tarde y pregunt¨®: '?A qu¨¦ hora ha dicho que es la misa?'. Era hombre de grandes frases. Trapiello citaba una que Fox¨¢ dedic¨® a escritores que no le gustaban: 'Tristes Homeros de una Il¨ªada de derrotas'. Su ingenio c¨ªnico y a la vez conformista queda patente en una de sus frases m¨¢s c¨¦lebres: 'Hagamos de Espa?a un pa¨ªs fascista y vay¨¢monos a vivir al extranjero'.