'Espa?ol en dos mundos' recoge los ¨²ltimos textos de Manuel Alvar

Nueve art¨ªculos y un pr¨®logo de despedida forman Espa?ol en dos mundos (Temas de Hoy), un libro en el que quien fuera miembro de la Real Academia Espa?ola, Manuel Alvar, muerto el pasado mes de agosto, recopila sus ¨²ltimos an¨¢lisis sobre los problemas del espa?ol. Seg¨²n su hijo Alfredo, Alvar trata en sus p¨¢ginas 'las relaciones ling¨¹¨ªsticas entre Espa?a y Am¨¦rica, el uso de la lengua en la pol¨ªtica y el periodismo, la historia y la ideolog¨ªa'.

Espa?ol en dos mundos fue presentado ayer en Madrid en un acto al que asistieron la viuda, Elena Ezqerra y los siete hijos del fil¨®logo y humanista Manuel Alvar, nacido en Benicarl¨®, Castell¨®n, en 1923. Alfredo, experto en Historia Moderna, habl¨® del mismo en una mesa redonda en la que tambi¨¦n estaban Ram¨®n Mu?oz-Gonz¨¢lez y Bernaldo de Quir¨®s, presidente de la Real Sociedad Econ¨®mica Matritense de Amigos del Pa¨ªs, en cuya sede tuvo lugar el acto; Beatriz Nogueras, editora de Temas de Hoy, y Luis Alberto de Cuenca, secretario de Estado de Cultura.

El libro lo hab¨ªa entregado Manuel Alvar a la editorial dos meses antes de morir, y alguna frase de su pr¨®logo da idea de que ve¨ªa cerca el final: 'Ahora, amigo m¨ªo, en el recuerdo o la ignorancia, adi¨®s, por si no volvemos a vernos', escribi¨® el estudioso de la lengua que dej¨® una obra ingente de 900 piezas entre art¨ªculos y libros.

'En estos art¨ªculos', dice Alfredo Alvar, 'mi padre analiza problemas del intercambio ling¨¹¨ªstico entre Espa?a y Am¨¦rica y aspectos ideol¨®gicos del lenguaje'. En unos escribe sobre esa concepci¨®n que hab¨ªa en Am¨¦rica de que lo que se hac¨ªa en Castilla era lo mejor, y en otros sobre la necesidad de trasladar los escenarios de las novelas de caballer¨ªas al nuevo mundo. Quiz¨¢ ¨¦stos sean los m¨¢s descriptivos, seg¨²n su hijo. 'Los de contenido m¨¢s comprometido hablan de la lengua como veh¨ªculo de cohesi¨®n social. Mi padre sosten¨ªa que de no ser por el espa?ol, Am¨¦rica estar¨ªa fraccionada por cientos de dialectos distintos'.

Alvar, que hab¨ªa sido investido honoris causa en numerosas universidades de Am¨¦rica Latina, era optimista con respecto a su lengua, y eso se desprende de las p¨¢ginas de Espa?ol en dos mundos. 'Lo conceb¨ªa como veh¨ªculo de comunicaci¨®n vivo, aunque ve¨ªa con preocupaci¨®n los malos caminos en relaci¨®n con su ense?anza', cuenta Alfredo Alvar. Otra de las cosas que le hac¨ªan creer en su vitalidad era precisamente la diversidad. 'Que una palabra signifique cosas distintas en Espa?a y Argentina supone riqueza. No se puede reducir todo a 1.000 palabras clave, como hacen en Estados Unidos. Lo bonito de nuestra variedad es la tensi¨®n, la curiosidad, utilizar el diccionario'.