Cuesti¨®n de porcentajes

El precio de la vivienda subi¨® en Madrid un 42% en los ¨²ltimos dos a?os, pero el Gobierno no ha tomado medidas porque es mejor que de esos asuntos se ocupe el mercado, a ser posible el mercado negro, o sea, la mafia. Si al Estado le quitas la mafia se queda en el 58% de su masa muscular. Est¨¢ demostrado cient¨ªficamente: no hay m¨¢s que hacer n¨²meros (100-42=58).

-Pues yo pongo a un lado mi sueldo y a otro la hipoteca, la luz, el agua, el tel¨¦fono, y no me salen las cuentas.

-Porque usted no enreda para subir el precio de las cosas ni blanquea dinero negro con la compra de ladrillos, ni atraca a mano armada. Usted es un idiota y recibe del mercado -especialmente del mercado negro- el trato que se merece

Pongamos otro caso: los accidentes laborales mortales aumentaron en el ¨²ltimo a?o un 21%. Curiosamente, el 21% es la mitad del 42%. Pero es que para acceder al 42% hicieron falta dos a?os, mientras que el 21% se alcanz¨® en uno solo. Parece, pues, que hay un orden c¨®smico que cuadra las cuentas y gracias al cual la Luna no se precipita sobre la Tierra. Es cierto que los obreros se precipitan desde los andamios, pero los precios del metro cuadrado suben de un modo proporcional al n¨²mero de muertes. Ah¨ª precisamente est¨¢ la justificaci¨®n de esas subidas salvajes. ?O es que el precio de una vida, de una sola vida, no merecer¨ªa ya el aumento del que tanto nos quejamos?

-Pero es que ese aumento no repercute en los salarios, sino que va directamente a engrosar las arcas de la mafia.

-?Y usted cree que la mafia no tiene gastos?

-Debe de tenerlos si pensamos que la delincuencia ha crecido en Madrid de un modo proporcional tambi¨¦n a los recortes de las plantillas policiales. Y es que cada vez que se amortiza la plaza de un polic¨ªa bueno, la mafia tiene que convocar una plaza de polic¨ªa malo. Es muy f¨¢cil criticar sin hacer n¨²meros.

-Pues que no recorten las plantillas policiales.

-Eso no lo debemos decidir ni usted ni yo, eso es asunto del mercado.

-?Acaso el Estado no tiene la obligaci¨®n de velar por mi seguridad?

-Si usted quiere seguridad, contrate los servicios de una empresa privada, que eso lo dice hasta el Defensor del Pueblo. La ¨²nica obligaci¨®n del Estado es recomendar moderaci¨®n salarial y cederle toda su masa encef¨¢lica al mercado, incluso al mercado negro. Por eso llevamos tanto tiempo aconsejando a la gente que se abra planes de pensiones privados. El futuro de la Seguridad Social es la quiebra, ya lo hemos dicho por activa y por pasiva, aunque de maneras m¨¢s delicadas como es l¨®gico.

-Pero es que los fondos de pensiones perdieron el a?o pasado un 4,6%.

-Eso d¨ªgaselo usted al mercado.

Si te pones a pensarlo, un madrile?o cualquiera tiene hoy m¨¢s posibilidades de ser atracado a mano armada que de acceder a una vivienda digna, y de caerse de un andamio que de sacarle una rentabilidad a su fondo privado de pensiones

Mucha gente piensa que deber¨ªa ser al rev¨¦s, pero es que la gente es muy conservadora y no comprende los beneficios del liberalismo econ¨®mico. Si la vivienda ha subido un 42%, en fin, lo l¨®gico es que usted se vuelva un 42% m¨¢s emprendedor.

-Es que no se trata de ser un 42% m¨¢s emprendedor, sino un 42% menos escrupuloso.

-Ll¨¢melo como quiera. Lo cierto es que llevamos varios a?os diciendo que los precios de los pisos han tocado techo y ya ve usted que no. El dinero negro, afortunadamente, es como un pozo sin fondo: cuanta m¨¢s agua sacas de ¨¦l, m¨¢s produce.

Si es verdad que la construcci¨®n es el motor de la econom¨ªa, ese motor tiene las manos manchadas de fango y de sangre, pero no podemos hacer nada porque el mercado es muy sensible al intervencionismo estatal y a lo mejor nos cargamos el sistema. De todos modos, es que la gente se ha puesto muy mani¨¢tica con lo de tener una vivienda en propiedad pudiendo alquilarla.

Despu¨¦s de todo, los alquileres s¨®lo han subido en el ¨²ltimo a?o el 27%. Si a usted le repugna moralmente volverse el 42% m¨¢s emprendedor, o menos escrupuloso, como quiera llamarlo, d¨¦jelo en un 27%. Es una cantidad rid¨ªcula de mezquindad en relaci¨®n a los beneficios que produce. No sea usted estrecho, pues, que la mafia aprieta, pero no ahoga, y cuando Dios cierra una puerta abre una ventana.