Francis Montesinos superpone su mirada mediterr¨¢nea a la austeridad de Balenciaga

La combinaci¨®n llama la atenci¨®n de inmediato: Francis Montesinos, dise?ador barroco y mediterr¨¢neo, y Crist¨®bal Balenciaga, paradigma de la austeridad y de la sobriedad. Y el resultado se puede comprobar en el IVAM desde ayer gracias a una exposici¨®n en la que Montesinos rinde homenaje al que considera 'maestro de maestros', a trav¨¦s de 12 modelos exclusivos en los que reinterpreta de manera 'muy personal' la obra de Balenciaga (Guetaria, 1895-X¨¤bia, 1972). 'Es la primera vez que entro en un museo, y creo que ya era hora', coment¨® el dise?ador valenciano.

Con motivo del 30? aniversario del fallecimiento de Balenciaga, Montesinos ha dise?ado una Carta de amor en la que expresa su admiraci¨®n por el creador vasco. A su vez, ha realizado una serie de dise?os para 'rendir tributo al legado de Balenciaga, uno de los m¨¢s importantes del arte del siglo XX'. Con algunas de sus reinterpretaciones, Montesinos clausur¨® recientemente la Pasarela Cibeles, aunque los dise?os expuestos en el Institut Valenci¨¤ d'Art Modern (IVAM) son in¨¦ditos y exclusivos. Adem¨¢s, la muestra, que se clausura el 31 de marzo, alberga tres trajes originales de Balenciaga, procedentes del Centre de Documentaci¨® Textil de Terrassa. Son el conocido como cuatro tallas, cuya cintura se va ajustando a los vaivenes de la figura de la mujer a trav¨¦s de una especie de faj¨ªn; el lentejuelas sobre lentejuelas, y el brocado bordado a mano por tres mujeres durante un mes.

'La sobriedad, la austeridad, la elegancia, la comodidad y una filosof¨ªa del vestido como instrumento, no para realzar la sensualidad, sino la estructura humana', fueron las principales caracter¨ªsticas que destac¨® Montesinos de los modelos de alta costura de Balenciaga, que cerr¨® su casa de modas de Par¨ªs en 1968.

?Y c¨®mo un dise?ador tan barroco como Montesinos se ha imbuido de la austeridad de Balenciaga? El dise?ador explic¨® que ha hecho un 'largo recorrido hacia Balenciaga' y que su estilo y su austeridad se encuentran en la base de sus dise?os. Adem¨¢s, Montesinos se?al¨® con humor que se hab¨ªa moderado bastante, y que no se ve¨ªa, por ejemplo, ni 'una teta ni ning¨²n co?o'.

Entre los modelos de alta costura presentados por Montesinos -vestidos de fiesta y un traje de novia- abundan los volantes, los colores fucsia, malva y negro, y los tejidos ricos y ornamentales como el tafet¨¢n, los otomanes y la seda natural. La seder¨ªa valenciana Camilo Miralles se ha encargado de elaborar las telas que se exhiben en el vest¨ªbulo del IVAM, acondicionado con el objeto de emular el gran sal¨®n de de la casa de Balenciaga, en la avenida George V de Par¨ªs.

Tambi¨¦n apunt¨® Montesinos que no ha renunciado a la sensualidad, que impregna muchos de sus modelos, a pesar de haberse inspirado en los dise?os de un 'se?or que ten¨ªa que trabajar como una monja en el siglo pasado'. 'No hab¨ªa nadie como ¨¦l a la hora de coser y cortar'.

Moda y museos

La presencia de Balenciaga en un museo no es nueva. El director del IVAM, Kosme de Bara?ano, record¨® que ya en 1973, el Metropolitan Museum de Nueva York le dedic¨® una exposici¨®n al 'arquitecto de la moda', y un a?o m¨¢s tarde, el Museo de Arte Contempor¨¢neo de Madrid organiz¨® otra monogr¨¢fica, adem¨¢s de otros centros que han acogido los trabajos del llamado profeta de la moda.

Bara?ano agreg¨® que el dise?o, al igual que la tipograf¨ªa, es un arte aplicada, y que los museos deben tener entre sus fondos la obra de estos creadores de moda. El cat¨¢logo de la exposici¨®n incluye texto de especialistas, as¨ª como la reproducci¨®n de las piezas exhibidas.

El dise?ador valenciano no dud¨® en manifestar su satifacci¨®n por que sus trajes y sus dibujos pasen a formar parte de la colecci¨®n del IVAM.