El Ayuntamiento de Viladecans ordena retirar las pancartas racistas

Calmar los ¨¢nimos cueste lo que cueste. ?sta es la prioridad del Ayuntamiento de Viladecans tras los incidentes racistas sucedidos el jueves durante una manifestaci¨®n en el barrio de Sales, los cuales acabaron con la agresi¨®n de un joven hijo de marroqu¨ªes. El alcalde de la poblaci¨®n, Jaume Montfort, dio ayer el primer paso para lograr la distensi¨®n y orden¨® la retirada de todas las pancartas con alusiones racistas que se exhib¨ªan en varios edificios desde hac¨ªa semanas.

Estas pancartas, con la inscripci¨®n 'drogas no, mezquitas no', ofenden, seg¨²n el decreto municipal, 'las creencias religiosas de los musulmanes residentes en la ciudad y ponen en peligro la paz y la convivencia pac¨ªficas'. Por ello el Ayuntamiento orden¨® su retirada bajo la amenaza de instar a la fiscal¨ªa a actuar contra quienes las tengan en la fachada de su casa.

La convivencia en el barrio de Sales se ha degradado en los ¨²ltimos meses por el aumento de la sensaci¨®n de inseguridad y el incremento del tr¨¢fico de drogas, que algunos vecinos atribuyen a los inmigrantes extranjeros. El alcalde record¨® ayer: 'La mayor parte de los habitantes de Viladecans vienen de fuera y es necesario que todos nos entendamos'.

Mientras, un grupo de vecinos del barrio volvi¨® a manifestarse ayer de forma pac¨ªfica bajo el lema Drogas no. La asociaci¨®n de vecinos del barrio quiso desvincularse totalmente de los incidentes ocurridos el jueves y asegur¨® que la manifestaci¨®n no ten¨ªa ning¨²n car¨¢cter racista.

Un importante grupo de vecinos, sin embargo, mantienen su frontal oposici¨®n a que la comunidad musulmana pueda ampliar el oratorio que ya posee en el barrio. Representantes de los inmigrantes, del resto de los vecinos y del Ayuntamiento se reunir¨¢n la pr¨®xima semana.