Aviso para los bancos que navegan en la Red
El Banco de Espa?a advierte de la dificultad de la banca virtual para cubrir gastos de explotaci¨®n y de la lentitud para captar clientes
La evoluci¨®n de la banca virtual espa?ola en 2001 sigue sin convencer al Banco de Espa?a. En un reciente informe de la autoridad monetaria sobre los avances tecnol¨®gicos se advierte de la dificultad de estas entidades para cubrir los gastos de explotaci¨®n y la lentitud para conseguir clientes y cumplir objetivos.Dos problemas que el Banco observa con inquietud.
Adem¨¢s, el organismo que preside Jaime Caruana critica la estrategia de algunas punto com, que ofrecen tipos de inter¨¦s m¨¢s favorables que la media del mercado, una t¨¦cnica que, a juicio del Banco de Espa?a, puede provocar, adem¨¢s de una presi¨®n excesiva para la banca tradicional, que filiales que operan por Internet roben clientes a sus propias entidades matrices.
Las filiales 'on line' ofrecen tipos de inter¨¦s por encima de la media del mercado, por lo que pueden 'robar' clientes a sus matrices tradicionales
Las entidades 'virtuales' aseguran que la lenta evoluci¨®n del sector es debida, en gran parte, al desconocimiento de los potenciales clientes
Y todo esto con unos resultados que, aunque algo mejores que en 2000, siguen sin salir de los n¨²meros rojos. Patagon, Uno-e, y Banco Popular-e registraron en 2001 p¨¦rdidas por valor de 51,55 millones de euros, un 38% menos que en el ejercicio anterior. Este ritmo de crecimiento no parece suficiente para el Banco de Espa?a, ni siquiera con cifras mejores que las actuales. As¨ª, en el informe se asegura que 'aunque se produjera un crecimiento muy r¨¢pido en el negocio de estos bancos (por Internet), que llegara a disminuir el coste medio de explotaci¨®n, ¨¦ste tendr¨ªa que llegar a duplicar los balances actuales y los recursos obtenidos tener una rentabilidad similar a la de la inversi¨®n crediticia para conseguir equilibrar la cuenta de resultados.'
Hay entidades, como Activo Bank, que prefieren no comentar la opini¨®n del Banco de Espa?a. Desde Bankinter se argumenta que nunca han creado una marca espec¨ªfica para Internet, diferenciada del banco matriz, y optan por no pronunciarse. Las que s¨ª lo hacen, consideran que los reducidos m¨¢rgenes operativos de la actualidad responden a una estrategia de expansi¨®n. 'Duplicar balances en un mercado maduro y en un periodo corto de tiempo es impensable. Hacerlo en un mercado en expansi¨®n como el de la banca on line puede ser normal', argumenta Jos¨¦ Antonio P¨¦rez, director de Planificaci¨®n de Patagon, que a?ade que su entidad consigui¨® 96.148 nuevos clientes en 2001, 'los mismos que en los tres a?os anteriores'.
La introducci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas en el sector es algo reciente, pero sigue sin ser la esperada, seg¨²n el m¨¢ximo instituto emisor, que concluye: 'el proceso est¨¢ siendo lento, por debajo de las expectativas iniciales'.
Otro de los puntos a los que hace referencia el informe es a la competencia que la banca electr¨®nica, con pol¨ªticas de precios 'agresivas', ejercen sobre el resto del sector financiero. 'La estrategia de captaci¨®n de clientes empleada por algunas entidades de banca electr¨®nica, ofreciendo unos tipos de inter¨¦s mucho m¨¢s favorables que la media del mercado, podr¨ªa suponer una presi¨®n adicional para las entidades tradicionales. Si ¨¦stas optasen por seguir una pol¨ªtica similar podr¨ªan encontrarse con riesgos para su estabilidad'.
El cliente gana
Fernando Blanco, del Bancopopular-e, cree que el que sale ganando con esta guerra de precios es, finalmente, el cliente. Y desde Patagon, Jos¨¦ Antonio P¨¦rez opina que, en todo caso, ser¨¢ la banca tradicional la que deber¨¢ adaptarse a los nuevos tiempos. 'Esta situaci¨®n es la que se produjo en los mercados de distribuci¨®n con la llegada de las grandes superficies, que presionaron los m¨¢rgenes de las peque?as tiendas y obligaron a ¨¦stas a una mayor especializaci¨®n'.
Pero no es la guerra de precios el ¨²nico efecto de la competencia entre la banca tradicional y la virtual. Las pol¨ªticas agresivas pueden, adem¨¢s, a juicio del Banco de Espa?a, provocar un efecto de 'canibalizaci¨®n', ya que una parte significativa de los clientes de la banca on line provienen de entidades tradicionales 'que son, en muchos casos, las sociedades matrices de estos bancos electr¨®nicos'. Fernando Blanco considera que el secreto est¨¢ en captar nuevos clientes o intentar vincular al que tiene pocos productos, para no provocar sangr¨ªas desde el banco matriz al virtual. 'Los clientes nuevos y, en segundo lugar, la venta cruzada en aquellos poco vinculados en el grupo constituyen una marcada prioridad comercial. Mediante una completa gama de productos y servicios para particulares y empresas y una adecuada pol¨ªtica de precios se reduce la canibalizaci¨®n a unos niveles razonables, en todo caso, por debajo del 10%-15%'. Otras entidades, como Inversis, no tienen este problema, ya que constituyen un banco independiente, que opera en el mercado sin el apoyo de un socio mayoritario 'con lo que no existen traslados de clientes', seg¨²n Roc¨ªo Guti¨¦rrez, directora de marketing.
Con o sin tirones de orejas por parte del Banco de Espa?a, las entidades on line aseguran que la lenta evoluci¨®n del sector es debida en gran parte al desconocimiento de los potenciales clientes, pero que su desarrollo es algo inevitable. 'Todav¨ªa hay mucha gente que tiene recelo , por desconocimiento, y porque despu¨¦s de toda una vida pagando comisiones y viendo que le dan un 0,25% en la cuenta corriente, no acaban de creerse que un banco no les cobre comisiones y les pague mucho m¨¢s en una cuenta con liquidez inmediata', concluye Jos¨¦ Antonio P¨¦rez, 'pero la banca on line va a crecer, como creci¨® el autom¨®vil, el avi¨®n, el ordenador o el m¨®vil, que tambi¨¦n despertaban recelos al principio'.
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