?Nos presentamos a la rev¨¢lida?
Leo su titular en portada del lunes 25 de marzo La mitad de los alumnos de 11 a?os no sabe operar con n¨²meros decimales y lo primero que se me ocurre, por tom¨¢rmelo con humor, es que quiz¨¢s operen mejor con bistur¨ª. Que un Gobierno se plantee mejorar el sistema educativo me parece, en principio, loable, pero...
Hay libros de texto autorizados por el Ministerio de Educaci¨®n (6-7 a?os, primero) en los que se ve el dibujo de un h¨ªbrido de remolcador y yate de recreo con cuatro pasajeros en cubierta. Al pie se lee algo as¨ª como 'Juanito se despide de sus amigos, que emprenden un viaje en trasatl¨¢ntico'. Tambi¨¦n se les pregunta por las 'frutas del tiempo' (6-7 a?os, primero) ante unas fotos de kiwi y pl¨¢tano, entre otros. La verdad es que es una pregunta insidiosa que me gusta hacer: ?de qu¨¦ tiempo es el kiwi? ?En qu¨¦ hemisferio? En alguno de estos libros de texto no hay una propuesta de trabajo sobre escritura que no sea copiar, reordenar una frase desordenada, y ya, como cosa muy creativa, escribir una frase que contenga un palabra dada. En alg¨²n momento habr¨¢ que 'entrenar' a escribir en el sentido de expresar lo que uno piensa, ve, le pas¨®, etc¨¦tera, digo yo. Cosas m¨¢s abiertas, del tipo ?qui¨¦n manda en tu casa?, ninguna. Son libros de texto para rodear, subrayar, enlazar con flechas y pintar de azul los dibujos que representen un objeto que contenga la letra 'm' en su representaci¨®n escrita, que eso entretiene un rato a los ni?os. En segundo (7-8 a?os), como dec¨ªa un director de charanga: 'Lo mismo, pero con m¨¢s bombo'. Y el libro de texto es el curr¨ªculo en gran parte de las escuelas espa?olas.
En el Reino Unido se realiz¨® en los a?os ochenta un informe sobre la ense?anza de las matem¨¢ticas a instancias del Gobierno (el informe Cockroff) que fue demoledor. No lo tengo en este momento a mano, pero recuerdo bien que los licenciados de carreras no cient¨ªficas ten¨ªan tambi¨¦n grandes dificultades con los decimales. Invito a EL PA?S a que replique la prueba con otros grupos humanos, igual nos consuelan los resultados.Soy partidario de las pruebas de Estado, incluso una anual en cada nivel de la ense?anza, con finalidades de obtenci¨®n de datos para la investigaci¨®n, no para juzgar a los individuos. Son, adem¨¢s, una forma de definir impl¨ªcitamente el curr¨ªculo. Sometidas, por supuesto, a la cr¨ªtica sobre fiabilidad y validez, como cualquier instrumento de medida, y con publicidad de los resultados.
Por ¨²ltimo, deseo comentar que ser¨ªa pundonoroso por parte de todos exigirnos lo que proponemos para los dem¨¢s.
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