El Ejército israelí bombardea Hebrón tras asegurarse el control de seis ciudades palestinas
El jefe militar propone la deportación de Arafat y pronostica una campa?a de ocho semanas
El Ejército israelí controlaba completamente seis de las ocho ciudades más importantes de Cisjordania. A última hora de la noche, su aviación atacaba Hebrón, donde poco antes un policía israelí había muerto en una escaramuza. Sólo una ciudad, Jericó, quedaba fuera del muro defensivo que Israel trata de levantar contra el terrorismo. Sin embargo, entre los 1.100 palestinos que los soldados israelíes han detenido en las ciudades reocupadas no se encuentra ninguno de los nombres más importantes de su lista de más buscados.
Marwan Barghuti, líder de los Tanzim, y el coronel Abu Awas, líder de Fuerza 17, siguen en libertad. Los muertos palestinos se acercan al centenar. Israel ha perdido a cuatro soldados.
Al menos desde ayer, el jefe del Estado Mayor del Ejército, general Saúl Mofaz, ha puesto un marco temporal a la Operación Muro Defensivo. 'Hacen falta entre cuatro y ocho semanas para que sea efectiva', explicó a los periodistas, 'cuatro semanas para la primera fase y otras cuatro para completar la operación'. En la misma comparecencia, Mofaz defendió la deportación del líder palestino Yasir Arafat, que hoy cumplirá una semana sitiado en Ramala. 'Arafat está a la cabeza de la Autoridad Palestina, que anima, financia y entrena a los terroristas. En esas condiciones, es mejor que sea expulsado', afirmó el general, en contradicción con la opinión de los analistas de los servicios secretos. Mofaz mostró documentos que, según dijo, demostraban que el líder palestino había financiado a los responsables del atentado contra una sala de baile en Hadera, en enero, en el que seis israelíes resultaron muertos.
Por su parte, el ministro de Finanzas israelí, Silvan Shalom, advirtió de que, una vez concluida la operación, el Ejército no se retirará de las zonas ocupadas hasta que haya un alto el fuego efectivo.
Bajo la presión y el escrutinio de la comunidad internacional, las autoridades israelíes se esfuerzan por presentar pruebas que justifiquen su campa?a. Todos los portavoces oficiales, ampliamente recogidos por la prensa local, llevan dos días mostrando un documento en árabe que aseguran vincula a la Autoridad Palestina (AP) con la financiación de las Brigadas de Al Aqsa.
El papel, supuestamente encontrado en la oficina del responsable de finanzas de la AP, Fuad Shubeiki, solicita fondos para cubrir los costes de un ataque suicida. Ayer, tras la ocupación de Salfit el día anterior, informaron del descubrimiento en esa localidad de una fábrica de bombas. Entre tanto, los registros casa por casa 'en busca de terroristas' han dado magros resultados. A pesar de la publicitada detención de Abdel Karim al Ued, uno de los líderes de las Brigadas de Al Aqsa, el segundo día de la incursión en Ramala, y de seis activistas de Hamás en el cuartel de la Seguridad Preventiva en Betania (donde se encontraban detenidos por las autoridades palestinas), ninguno de los considerados pesos pesados ha caído en sus redes. 'El día que detengan a alguno de los primeros en su lista de buscados, pondrán su foto a toda plana en los periódicos', predecía un observador local.
Fuentes palestinas han mostrado su convicción de que el propósito de la operación militar israelí es destruir las instituciones de defensa de la AP y asumir el control de los asuntos de seguridad. '?Qué otra finalidad pueden tener?', se preguntaba el ministro Ziad Abu Zayad en una conversación con EL PA?S. Tal decisión supondría la conversión de las zonas A (autonomía total) en zonas B (autonomía administrativa pero bajo control israelí) y, en la práctica, la completa anulación de los acuerdos de Oslo.
Las acusaciones palestinas se fundamentan en el asalto al cuartel de Betania, la detención en Ramala de una decena de altos oficiales de la policía y de los servicios secretos y la inclusión, entre los 1.100 detenidos que reconoce el Ejército israelí, de numerosos agentes con permiso legal para llevar armas.
Los combates se intensificaron a última hora de ayer en Yenín y Nablús, dos ciudades de las que han salido numerosos hombres bomba y en las que se supone encuentran refugio un gran número de activistas.
'Las fuerzas israelíes continúan bombardeando nuestras ciudades y localidades en Yenín, Belén y Nablús', denunció ayer un comunicado palestino difundido por la agencia Wafa desde Gaza. 'Las fuerzas de ocupación han atacado la basílica de la Natividad, pero nuestros combatientes continúan haciéndoles frente. La resistencia palestina en Belén ha destruido un carro israelí y varios soldados han resultado heridos', aseguraba el comunicado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás a?adir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.