Atentado contra Granada
CETARSA, la Compa?¨ªa Espa?ola de Tabaco en Rama, ha anunciado a trav¨¦s de la SEPI, la Sociedad Estatal de Participaci¨®n Industrial, el cierre de la factor¨ªa de Granada proponiendo a los trabajadores que pasen durante dos a?os al paro (que pagar¨ªamos todos) y un a?o de reciclaje y aprendizaje de no se sabe qu¨¦ nuevo oficio para no se sabe qu¨¦ nuevo empleo. La Comisi¨®n europea, a su vez, anunci¨® bajo la actual presidencia espa?ola de Aznar, la supresi¨®n de las ayudas al cultivo de tabaco y, con tal motivo, el Comisario Fischler evit¨® mencionar cualquier tipo de garant¨ªa laboral, ocult¨® los datos del coste econ¨®mico, social y presupuestario de la medida y no especific¨® ning¨²n proyecto alternativo.
As¨ª pues lo que acompa?a a estos dos planes inmediatos de destrucci¨®n de empleo en Granada son s¨®lo vaguedades y opacas perspectivas que ponen de manifiesto una incre¨ªble insensibilidad socioecon¨®mica del Gobierno Aznar, a¨²n mas grave si se tiene en cuenta que ambas medidas podr¨ªan evitarse porque no son necesarias:
CETARSA tiene beneficios (en la campa?a 2000-2001 obtuvo un beneficio de 4,2 millones de Euros) y alguien me ha comentado que curiosamente las ¨²nicas p¨¦rdidas que ha tenido son los 150 millones de pesetas que ha invertido en GESCARTERA. Claro est¨¢ que trat¨¢ndose de un proceso de privatizaci¨®n, detras del cierre podr¨ªan esconderse ciertas 'mejoras de rentabilidad para algunos' consecuencia de la cantada especulaci¨®n urban¨ªstico-financiera a que puede dar lugar.
En lo que se refiere al anuncio, por parte de la Comisi¨®n Europea, de una posible supresi¨®n de las primas al cultivo de la hoja de tabaco crudo, todo parece indicar que se ha querido visualizar una especie de 'espada de Damocles', por lo que pueda venir ante la dificil estrategia negociadora que Fichler y el conjunto de la Comisi¨®n ha de afrontar de aqu¨ª al 2006. Nada menos que las negociaciones con la OMC (Organizaci¨®n Mundial del Comercio); las derivadas de la pr¨®xima ampliaci¨®n de la UE a los pa¨ªses del este y centro de Europa (algunos de los cuales son productores de tabaco); y las correspondientes a la propia reforma de la PAC (Pol¨ªtica Agraria Com¨²n). Todos estos importantes retos est¨¢n sujetos a t¨¢cticas de negociaci¨®n. El problema para nosotros es que en este tipo de negociaciones suelen caer los que est¨¢n peor, si no tienen un poder que les ampare.
Tampoco cabe pensar que la supresi¨®n de las ayudas al cultivo responda seriamente a una necesidad derivada de la protecci¨®n a la salud, pues resulta un tanto pueril suponer que la eliminaci¨®n de la prima de este cultivo pueda incidir en una disminuci¨®n del consumo, del tabaquismo, y llegar a mejorar la salud de los ciudadanos: la producci¨®n europea supone ¨²nicamente el 30% del tabaco que se consume dentro de su territorio, circunstancia que inducir¨¢ a que el vac¨ªo de mercado interior se vea autom¨¢ticamente compensado por importaciones de las multinacionales que operan en el sector. Los Estados Unidos, China y la India dominan la producci¨®n en volumen; Brasil, Zimbabwe y Malawi, en el mercado internacional. La supresi¨®n del cultivo de tabaco no tendr¨ªa efecto sobre el consumo, sino que aumentar¨ªa la importaci¨®n de tabaco: la Uni¨®n Europea ya importa un 70% de su consumo de tabaco bruto (primer importador mundial). As¨ª que la supresi¨®n de la ayuda ocasiona el cese del cultivo con un coste social muy elevado de empleos, pero no tiene repercusi¨®n directa en el consumo de tabaco. Los fumadores simplemente pasan a fumar tabaco de importaci¨®n. Si realmente la Comisi¨®n Europea quisiera restringir el comercio de un producto malsano podr¨ªa, quiz¨¢ por la misma raz¨®n, cerrar las importaciones de cigarrillos americanos con el consiguiente perjuicio para algunas multinacionales; o podr¨ªa suprimir las ayudas al whisky; o a la industria del automovil, dada la sangr¨ªa de jovenes que mueren en las carreteras.
Detr¨¢s de este doble atentado a la econom¨ªa de Granada s¨®lo hay estrategias de beneficios para unos muy pocos, a costa de 1.867 empleos en una de las provincias mas pobres de Espa?a. (Resulta a este respecto significativo que la SEPI anuncie el cierre de su factor¨ªa de CETARSA de Granada, al d¨ªa siguiente de que la Junta de Andaluc¨ªa presentara su demanda contra las industrias tabaqueras, para compensar los gastos sanitarios hospitalarios derivados de las enfermedades que produce el tabaquismo).
Los tabaqueros confiaban inicialmente en las palabras del ministro de Agricultura para mantener la rentabilidad del cultivo de tabaco en Granada, pero sus promesas no se est¨¢n cumpliendo: las mas de 1.500 familias de los cultivadores de la Vega granadina ven como progresivamente crecen las dificultades y la rentabilidad disminuye, para las campa?as del 2003 y 2004, el aumento de la retenci¨®n para el fondo de investigaci¨®n a¨²n reducir¨¢ mas los ingresos de los productores. Para colmo, las solemnes declaraci¨®nes de Miguel Arias Ca?ette diciendo que CETARSA no se cerrar¨ªa le est¨¢ dejando sin credibildad. Oigo decir que el Gobierno tiene que mojarse pero sin eco ni respuesta.
Detr¨¢s de la desaparici¨®n de este cultivo hist¨®rico en la provincia de Granada, con mas de medio siglo de antiguedad, no se est¨¢n concretando alternativas viables que tengan en cuenta la generaci¨®n de empleo y absorci¨®n de mano de obra que en la actualidad est¨¢ vinculada a la producci¨®n de tabaco. Nuestro recuerdo inevitablemente contempla el antecedente de lo que pas¨® con la remolacha y el azucar y lo que fueron coartadas para acabar con el cultivo sin m¨¢s.
Estamos ante un doble atentado a la d¨¦bil econom¨ªa de Granada y ante una injusta e innecesaria destrucci¨®n de empleo que el Gobierno de Aznar deber¨ªa ser capaz rectificar a tiempo.
Mar¨ªa Izquierdo Rojo es eurodiputada del PSOE.
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