Plan de la UE para repatriar a millones de residentes ilegales

La UE puso ayer en marcha un plan para la expulsi¨®n de millones de inmigrantes que hoy residen ilegalmente en la Uni¨®n con la difusi¨®n del llamado Libro Verde, titulado Una pol¨ªtica comunitaria de retorno de los residentes ilegales, elaborado por la Comisi¨®n Europea. En el documento se propone la aprobaci¨®n de normas legales comunes para enviar a sus pa¨ªses de origen a quienes viven ilegalmente en la UE. Aunque no hay datos oficiales al respecto, se calcula que la medida puede afectar a m¨¢s de tres millones de personas. Cada a?o, seg¨²n Bruselas, entran ilegalmente en la Uni¨®n 500.000 personas.

En el Libro Verde, de 28 p¨¢ginas, se indica que 'los nacionales de terceros pa¨ªses que no dispongan de un estatus que les permita quedarse de forma permanente o temporal deben abandonar la UE'. 'Esto es importante', agrega, 'para garantizar que no se socave la pol¨ªtica de admisi¨®n y se respete el Estado de derecho, que es un elemento esencial de un espacio de libertad, seguridad y justicia'.

En el informe se se?ala que, 'en la medida de lo posible, por obvias razones humanitarias', deber¨ªa darse prioridad 'al retorno voluntario', porque esta opci¨®n 'requiere menos esfuerzos administrativos'. Aunque la Comisi¨®n admite que puede haber casos en los que puedan aplicarse f¨®rmulas 'de integraci¨®n o reasentamiento', acto seguido afirma que debe existir 'una pol¨ªtica eficiente de retorno' frente a quienes han entrado ilegalmente en la Uni¨®n; frente a quienes han visto rechazadas solicitudes de asilo, o frente a quienes fueron acogidos en su d¨ªa por problemas pol¨ªticos que hoy ya han desaparecido (cita, por ejemplo, el caso de miles de bosnios acogidos en su momento en Alemania).

El Libro Verde recuerda tambi¨¦n que, de acuerdo con las legislaciones actuales, deben ser expulsadas las personas que 'se convierten en un peligro para la seguridad p¨²blica o el orden p¨²blico tras haber sido condenadas por delitos graves'.

Libertades fundamentales

Para el Ejecutivo comunitario, estas expulsiones deber¨¢n respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales (se refiere, por ejemplo, a los derechos de los ni?os) y, paralelamente, los Quince deber¨¢n buscar la colaboraci¨®n de los pa¨ªses a los que tengan que ser enviados los emigrantes ilegales.

'El retorno forzoso', agrega, 'es una limitaci¨®n muy significativa de la libertad y de la voluntad del individuo', por lo que las normas europeas comunes para las expulsiones 'establecer¨¢n la necesidad de un trato adecuado y similar para los residentes ilegales', que se aplicar¨¢n tanto en el momento de la detenci¨®n como en el traslado.

A lo largo de 2000, los Quince emitieron ¨®rdenes de expulsi¨®n contra 367.552 personas y otras 87.628 abandonaron voluntariamente la Uni¨®n, seg¨²n datos difundidos por el Ejecutivo comunitario. Ese a?o, en la UE se inscribieron oficialmente 816.000 emigrantes, todav¨ªa lejos los 1,4 millones que anualmente necesita la Uni¨®n para mantener su nivel productivo. Alemania, Italia y Reino Unido recibieron el 70% del citado flujo migratorio, mientras que Espa?a, Francia y Finlandia registraron las tasas m¨¢s modestas.

Con la publicaci¨®n del citado informe, la Comisi¨®n asegur¨® que intenta sobre todo 'abrir un debate y suscitar reacciones de todas las partes interesadas' antes del pr¨®ximo 31 de julio para redactar despu¨¦s la legislaci¨®n com¨²n sobre un problema que el propio Ejecutivo comunitario califica de 'complejo'. Ayer mismo, se produjo ya una aportaci¨®n en el Parlamento Europeo. El eurodiputado espa?ol Fernando Fern¨¢ndez, del PP, present¨® una declaraci¨®n en la que pide al Ejecutivo comunitario un plan de acci¨®n frente a la inmigraci¨®n ilegal que incluya 'medidas eficaces para interceptar e impedir la partida de las embarcaciones que transportan inmigrantes ilegales y refugiados'.