Los supervivientes del naufragio
Los ingenieros de telecomunicaci¨®n apenas notan el par¨®n del sector de las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y comunicaci¨®n
El enfriamiento en el sector de las nuevas tecnolog¨ªas ha tocado de refil¨®n a los ingenieros de telecomunicaci¨®n. As¨ª se desprende de un informe del Colegio Oficial que revela que el paro tan s¨®lo ha subido 1,7 puntos desde mediados de 2000 a finales de 2001. La reestructuraci¨®n del sector y la apertura hacia el trabajo por cuenta propia han sido las claves de su supervivencia.
Si a mediados de 2000 tan s¨®lo un 1,8% estaba en paro, a finales de 2001, y tras la crisis del 11-S, este ¨ªndice se sit¨²a en el 3,5%
Los perfiles m¨¢s afectados por la nueva situaci¨®n son los de 'marketing' y los que se dedican a investigaci¨®n y desarrollo
Los ingenieros de telecomunicaci¨®n se han convertido en los supervivientes de la crisis en el sector de las nuevas tecnolog¨ªas. Si a mediados de 2000 tan s¨®lo un 1,8% de los 17.000 que hay en Espa?a estaba en paro, a finales de 2001, y tras la crisis 11-S, este ¨ªndice se sit¨²a en el 3,5%. 'Pero se trata de un desempleo que afecta sobre todo al colectivo de entre 36 y 45 a?os y con matices: la propia reordenaci¨®n y liberalizaci¨®n del sector ofrece claras alternativas de recolocaci¨®n', puntualiza Adri¨¢n Nogales, secretario general del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicaci¨®n (COIT) a la luz del informe socioprofesional que acaban de realizar con los datos m¨¢s recientes.
Y es que seg¨²n el documento, el tiempo que tarda un profesional en encontrar un puesto para su recolocaci¨®n es m¨ªnimo. Casi la mitad de los que buscaban empleo a finales de 2001 (el 44,8%) llevaba buscando trabajo menos de dos meses. 'Eso nos indica que no se est¨¢ creando una bolsa de paro creciente, sino que hay un movimiento continuo', explica Nogales. Adem¨¢s, a diferencia de lo que ocurri¨® tras la crisis de 1992 y 1993, no se est¨¢ produciendo una penalizaci¨®n en los salarios cuando el ingeniero se incorpora de nuevo al mercado laboral. Los perfiles m¨¢s afectados por la lentificaci¨®n del sector: los que se dedican a marketing o a la investigaci¨®n y desarrollo (I+D).
Sin embargo, los ingenieros de telecomunicaci¨®n no han permanecido impasibles del todo a la crisis. 'Hasta el a?o 2000, la demanda en el sector era tal que las empresas captaban profesionales cuatro o cinco meses antes de que ¨¦stos estuvieran licenciados', asegura. Ahora, en cambio, lo normal es tener que esperar para encontrar el primer trabajo. As¨ª si en 2000 tan s¨®lo un 0,1% de los titulados estaba buscando su primer empleo, tras el 11-S esta cifra ascend¨ªa al 3,3%.
Pero este colectivo se est¨¢ abriendo camino en un nuevo frente: el trabajo por cuenta propia. 'El ingeniero de telecomunicaci¨®n sigue siendo evidentemente asalariado, pero se le empieza a notar su presencia en actividades independientes tales como la consultor¨ªa o la formaci¨®n', asegura Nogales. As¨ª, en 2000, aunque el 85,5% de los ingenieros estaba contratado -frente al 91,5% de 1984-, hab¨ªa un 6,1% que trabajaba como aut¨®nomo. Esta apuesta por la independencia es especialmente relevante en el colectivo de entre 56 a 60 a?os, edad que coincide precisamente con el inicio de las prejubilaciones.
M¨¢s formaci¨®n en 'marketing'
La apertura de este nuevo horizonte se pone de manifiesto en la creencia generalizada en el colectivo (el 89%) de que las escuelas y centros universitarios (unas 25 en toda Espa?a) deber¨ªan dar una formaci¨®n m¨¢s orientada al marketing, la direcci¨®n y la gesti¨®n empresarial. Aspectos todos ellos a los que dif¨ªcilmente adquieren en el ejercicio profesional ya que la presencia de ingenieros de telecomunicaci¨®n en los puestos directivos es muy reducida.
De hecho, los datos de mediados de 2000 de la funci¨®n que realizan mayoritariamente estos ingenieros es t¨¦cnica: el 36,4% se dedica a ingenier¨ªa de proyectos, el 9,7% al mantenimiento, control de calidad y control de procesos, el 13,1% a I+D, el 11,5% a ense?anza y el 12,7% restante lo copan funciones tales como la alta direcci¨®n, la gesti¨®n y administraci¨®n o la administraci¨®n y el control financiero. De hecho, el colectivo est¨¢ convencido de que deber¨ªa haber m¨¢s expertos en telecomunicaci¨®n en puestos directivos, m¨¢xime en un momento en el que 'los ingenieros de telecomunicaci¨®n deber¨ªan liderar los cambios que se produzcan dentro de la sociedad de la informaci¨®n', seg¨²n Nogales.
?Y qui¨¦nes son estos l¨ªderes llamados a generar el cambio? Seg¨²n los datos del estudio, responden mayoritariamente al perfil de var¨®n (en un 90%) con una edad media de 39 a?os, con un puesto de trabajo en Madrid o Catalu?a. Y sus sueldos tampoco est¨¢n nada mal: como salario medio bruto anual tienen 5,2 millones de pesetas. Adem¨¢s, por el proceso liberalizador del sector, las tres cuartas partes trabajan en empresas privadas o en proceso de privatizaci¨®n a corto plazo. A principios de los a?os ochenta, m¨¢s de la mitad estaban empleados en empresas p¨²blicas o con alta participaci¨®n estatal.
De todas formas, este colectivo ha estado tradicionalmente mimado por el mercado laboral. El ¨²ltimo estudio de Infoempleo, elaborado por el C¨ªrculo de Progreso justo antes de que comenzara el enfriamiento en el sector, ya revelaba tras el an¨¢lisis de 206.276 ofertas de trabajo, que las telecomunicaciones y la inform¨¢tica fueron los l¨ªderes entre abril de 2000 y abril de 2001 copando casi un cuarto del empleo cualificado.
La mujeres, s¨®lo un 10%
Las mujeres ingenieras de telecomunicaci¨®n han crecido en los ¨²ltimos a?os, pero siguen representado un nimio 10% de este colectivo profesional. Sin embargo, en un grupo de discusi¨®n de mujeres organizado por el colegio oficial, no percibe discriminaci¨®n en su puesto de trabajo con una excepci¨®n: cuando quieren dar el salto a la direcci¨®n. 'Es mayoritaria la opini¨®n de que las mujeres est¨¢n en puestos t¨¦cnicos. Y esto se traduce en menos posibilidades de ascenso', se?ala el informe. Sin embargo, esto no es percibido de forma negativa necesariamente, ya que 'quedarse en puestos con menos responsabilidad le permite un mayor equilibrio entre la vida p¨²blica y la vida privada. En realidad, significa tener una vida menos condicionada por el trabajo'.
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