La Feria del Libro de Buenos Aires abre como 'un palacio entre las ruinas'

Ayer se inaugur¨® la 28? edici¨®n de la Feria del Libro de Buenos Aires como 'un palacio entre las ruinas'. El hurac¨¢n de la crisis que ha arrasado 300 librer¨ªas en los ¨²ltimos dos a?os y ha dejado a gran parte de la industria editorial en estado terminal no ha podido con ella, a pesar de los f¨²nebres pron¨®sticos. La feria, que se extender¨¢ hasta el pr¨®ximo 6 de mayo y que lleva por t¨ªtulo Una ciudad de libros, se ampara en esta edici¨®n bajo una cita de Jorge Luis Borges: 'Hay quienes no pueden imaginar un mundo sin p¨¢jaros, hay quienes no pueden imaginar un mundo sin agua. En lo que a m¨ª se refiere, soy incapaz de imaginar un mundo sin libros'.

El tradicional discurso inaugural, a cargo de Hugo Levin, un librero de toda la vida y presidente de la fundaci¨®n que organiza la muestra, ha recogido el esp¨ªritu de Borges en su mensaje y adelant¨® que iba a ser 'duro' con el Gobierno. 'Esta feria, casi un palacio entre las ruinas, es un acto de resistencia. Resistencia ante un Estado que persiste en su indiferencia'. Posteriormente se?alar¨ªa que 'parece incre¨ªble que quienes tienen la responsabilidad de conducirnos no comprendan que no hay un pa¨ªs posible sin una pol¨ªtica cultural que tenga como actor central al libro, al universo intelectual y empresarial que lo gesta, y que apueste por la promoci¨®n de la lectura. La Ley del Libro, sancionada por el Parlamento argentino durante la anterior gesti¨®n, hoy est¨¢ truncada por los vetos del poder ejecutivo nacional. Actualmente, ante la insistencia en su sanci¨®n por parte del Senado, la ley est¨¢ en la C¨¢mara de Diputados, esperando tambi¨¦n su ratificaci¨®n. Dicha ratificaci¨®n la convertir¨ªa en ley vigente. Como todo el sector, nos preguntamos ?qu¨¦ est¨¢n esperando y por qu¨¦ tal dilaci¨®n?'.

Los organizadores creen que este a?o ser¨¢n muy pocos los legisladores, dirigentes pol¨ªticos y funcionarios que se atrevan a visitar la feria por temor a los insultos y a la reprobaci¨®n masiva del p¨²blico. A pesar de que al acto de apertura s¨®lo pueden asistir la prensa y los invitados especiales, los organizadores no pod¨ªan asegurar ayer, como es tradicional, la asistencia del presidente, Eduardo Duhalde, aunque estaba confirmada la del jefe de Gobierno de Buenos Aires.

La feria, montada nuevamente en el centro de exposiciones de la Sociedad Rural en el coraz¨®n del barrio de Palermo, al norte de la ciudad, ser¨¢, como lo ha sido siempre, la caja de resonancia del debate social. En un cartel estar¨¢n los nombres de los 157 diputados responsables de votar la Ley del Libro; los que ya adelantaron la aprobaci¨®n ser¨¢n distinguidos con una se?al verde; los que se niegan, con una en rojo, y los que a¨²n no respondieron a la encuesta, con un cart¨®n negro, para que el p¨²blico conozca a los responsables de la demora. Habr¨¢ espacios para que le gente escriba su opini¨®n en las paredes sobre el estado de las cosas, mesas de recolecci¨®n de firmas a cargo de ONG y se esperan espont¨¢neas asambleas de p¨²blico y vecinos. Los dirigentes piqueteros, grupos de choque de los desocupados que cortan rutas en todo el pa¨ªs, participar¨¢n en el acto de presentaci¨®n de un libro sobre la historia del movimiento.

Los expositores no tienen demasiadas expectativas sobre las ventas, no creen que la feria pueda ser 'una isla' recortada de la realidad. La devaluaci¨®n del peso en un 200% en enero provoc¨® un aumento del 20% en los precios de los libros impresos en Argentina y las ventas del primer trimestre disminuyeron un 60% con relaci¨®n al mismo periodo de 2001. Las tiradas se redujeron a 2.000 ejemplares. Las publicaciones que llegan desde el exterior triplicaron el precio. La propia feria, que el pasado a?o era de acceso casi gratuito porque contaba con un subsidio del Gobierno de Buenos Aires, debe cobrar ahora dos pesos la entrada. El presupuesto para la organizaci¨®n se redujo un 25% y participan 27 pa¨ªses de los 39 que levantaron puestos el a?o pasado.

El cantante y compositor espa?ol Joan Manuel Serrat, invitado especialmente por 'su trayectoria ¨¦tica irreprochable' y por ser 'un amigo incondicional' de Argentina, era esperado como uno de los protagonistas del arranque de la feria junto con el autor argentino Roberto Fontanarrosa. Adem¨¢s de Serrat, que dialogar¨¢ con el p¨²blico, se someter¨¢ a entrevistas p¨²blicas y participar¨¢ de la lectura colectiva del Mart¨ªn Fierro, en la cartelera de invitados destacan Paul Auster, Marcela Serrano, Carlos Monsiv¨¢is, Wei Hui, Enrique Rojas y Tom¨¢s Eloy Mart¨ªnez.