El juez prolonga la prisi¨®n hasta el lunes a Gil y a cuatro de sus colaboradores en el Ayuntamiento de Marbella

El juez Juan del Olmo acord¨® ayer mantener en prisi¨®n incondicional, aunque ya no incomunicados, a Jes¨²s Gil y a cuatro de sus seis colaboradores, si bien esta situaci¨®n desaparecer¨¢ previsiblemente el pr¨®ximo lunes, en cuanto declaren algunos testigos a los que el juez hab¨ªa citado y no se presentaron. Del Olmo mantiene encarcelado a Gil para que las pruebas sobre la presunta malversaci¨®n de 30 millones de euros en el Ayuntamiento de Marbella 'gocen de la adecuada verosimilitud, veracidad y credibilidad, al impedir que dichas testificales puedan ser alteradas o manipuladas'.

Seg¨²n el auto del titular del juzgado n¨²mero 6 de la Audiencia Nacional, las declaraciones de los testigos que faltan 'agotar¨ªan las diligencias urgentes y necesarias que este juzgado central de instrucci¨®n se ha visto obligado a realizar en tan corto espacio de tiempo'.

Del Olmo a?ade que cuando est¨¦n 'presentes todos los testigos en dependencias de este juzgado desaparecer¨¢ la raz¨®n de la prisi¨®n provisional incondicional mantenida en los t¨¦rminos que ahora se justifican'.

A las cinco de la tarde de ayer, el juez levant¨® la incomunicaci¨®n de todos los presos por la presunta malversaci¨®n de 30 millones de euros (unos 5.000 millones de pesetas) del Ayuntamiento de Marbella entre 1991 y 1995, pero resolvi¨® mantener en prisi¨®n incondicional al alcalde de la localidad y presidente de Atl¨¦tico de Madrid, Jes¨²s Gil; a su ex abogado Jos¨¦ Luis Sierra; al gerente de la empresa municipal Contratas 2000, Jos¨¦ Luis Jim¨¦nez; al contable de varias empresas marbell¨ªes, Manuel Castel, y al gerente de Urbanismo de Marbella, Juan Antonio Roca.

Por el contrario, Eduardo Gonz¨¢lvez, contable de Planeamientos 2000, una de las empresas vinculadas a Contratas 2000, y Francisco Javier Herrera, empleado de la misma compa?¨ªa, podr¨¢n salir en libertad provisional en cuanto depositen la fianza de 150.000 euros (unos 25 millones de pesetas) decretada por Del Olmo. Los familiares de estos dos imputados recibieron entre l¨¢grimas y abrazos la noticia de la liberaci¨®n.

En cambio, el catedr¨¢tico Horacio Oliva, abogado de Jes¨²s Gil, visiblemente afectado por la decisi¨®n judicial, no pudo reprimirse cuando fue abordado por los periodistas: 'Me parece una barbaridad muy grande; qu¨¦ quiere usted que le diga'. Oliva indic¨® que en ese momento, las ocho de la tarde, sal¨ªa para la c¨¢rcel de Alcal¨¢- Meco para informar personalmente a su cliente: 'El recurso ya est¨¢ presentado', a?adi¨®.

Previamente, a las cinco de la tarde, el juez hab¨ªa levantado la incomunicaci¨®n a los siete imputados que se encuentran en prisi¨®n.

Del Olmo justifica su decisi¨®n de enviar a prisi¨®n incondicional e incomunicada a los imputados, los pasados d¨ªas 16 y 17, para 'asegurar las fuentes de prueba, cuya pr¨¢ctica pod¨ªa verse gravemente alterada o manipulada'.

Seg¨²n el juez, esta pruebas eran b¨¢sicamente declaraciones de testigos cuya comparecencia era ineludible. El resultado de estos testimonios ha sido 'clarificador', seg¨²n el juez, que se?ala que el 'inicial y urgente estudio' de los documentos encontrados en los registros 'permite aventurar un entramado que ha venido a corroborar extremos iniciales de la querella presentada'.

Del Olmo insiste en que ha debido acordar otras diligencias urgentes e inmediatas a ra¨ªz de las pruebas testificales y la documentaci¨®n obtenida de uno de los registros a uno de los nuevos querellados. Por eso afirma que la medida 'estricta y rigurosa' de la prisi¨®n incondicional e incomunicada es 'proporcional y justificada'.

El juez agrega que en el momento actual restan por practicarse diligencias de investigaci¨®n que no se han podido efectuar ante la incomparecencia de los testigos citados, lo que le lleva a practicarlas manteniendo el secreto de las actuaciones, aunque ya no la incomunicaci¨®n de los imputados.

El juez decreta la libertad bajo fianza de Eduardo Gonz¨¢lvez y Francisco Javier Herrera porque el riesgo de obstrucci¨®n en la labor judicial 'se ve restringido hasta extremos que hacen no justificable la prisi¨®n provisional'.

En cuanto a Gil y los dem¨¢s imputados, el juez aprecia que aparecen 'en un nivel m¨¢s elevado, relevante y de estructuraci¨®n de las actividades, dado el grado de presunta responsabilidad adoptado en la organizaci¨®n y toma de decisiones'. As¨ª, 'dado el grado de conocimiento y relaci¨®n con los testigos pendientes', cree procedente mantener la prisi¨®n incondicional hasta que declaren los testigos que no se presentaron. A tenor de la fianza impuesta a los menos responsables, la de Gil podr¨ªa ser espectacular, seg¨²n evaluaban ayer fuentes jur¨ªdicas.