?Qui¨¦n dispar¨® en Miraflores?

Guillermo Garc¨ªa Ponce, director del Comando Pol¨ªtico de la Revoluci¨®n Bolivariana, anticip¨® resultados favorables a las tesis del Gobierno en la investigaci¨®n oficial sobre el asesinato de 15 personas el pasado d¨ªa 11. 'Van a asombrar a la opini¨®n p¨²blica', declar¨®. La matanza conmocion¨® a las Fuerzas Armadas y derroc¨® por unas horas a Hugo Ch¨¢vez. Francotiradores acribillaron la marcha opositora, corri¨® la sangre y se hizo realidad la metaf¨®rica y cuartelera invocaci¨®n del presidente durante el enconamiento de meses atr¨¢s: '?Plomo parejo!'.

Imposible, de momento, la reconciliaci¨®n y, sin haberse identificado la filiaci¨®n pol¨ªtica del primer plomazo, una Comisi¨®n de la Verdad independiente tratar¨¢ de esclarecer las circunstancias de aquella carnicer¨ªa junto al palacio de Miraflores. La oposici¨®n la atribuye a la represi¨®n de pistoleros bolivarianos apandillados, y el Gobierno, a maquinadores necesitados de muertos para activar un pronunciamiento castrense. 'Se est¨¢ investigando la provocaci¨®n, y los resultados de esa investigaci¨®n van a asombrar a la opini¨®n p¨²blica', subray¨® Ponce.

Los chavistas vaticinan que los resultados de las pesquisas 'van a asombrar' al p¨²blico

Cientos de miles de personas engrosaron una de las marchas m¨¢s numerosas de la historia de Venezuela. Exig¨ªan a gritos la destituci¨®n del jefe del Estado y, bajo fuego, cumplieron la arenga republicana de la guerra civil espa?ola: '?Ni un paso atr¨¢s!'.

Seg¨²n el comisario pol¨ªtico de la revoluci¨®n, los promotores del golpe colocaron tiradores en sitios estrat¨¦gicos para disparar contra la manifestaci¨®n opositora, y tambi¨¦n contra la concentraci¨®n que defend¨ªa la sede presidencial. Fernando Mendoza sinti¨® un pinchazo en la barriga. La bala qued¨® en el abdomen. 'Los tiros iban y ven¨ªan. ?C¨®mo se explica que la inmensa mayor¨ªa de las v¨ªctimas, de los que caen asesinados en esa masacre sean gente de Ch¨¢vez?'.

El ministro de Defensa, Jos¨¦ Vicente Rangel, calcula que 'el 90% de los muertos eran chavistas'. La versi¨®n de la oposici¨®n es diametralmente opuesta: los C¨ªrculos Bolivarianos y los sectores m¨¢s ultras del propio Gobierno desplegaron a esos tiradores de precisi¨®n en las azoteas para dispersar a una rebeli¨®n civil imparable.

Indagar¨¢ los tr¨¢gicos hechos la Comisi¨®n de la Verdad, que puede quedar constituida el pr¨®ximo lunes integrando en su seno a los diferentes sectores de la sociedad venezolana y a observadores extranjeros. Los muertos fueron armas arrojadizas en dos agitadas sesiones de la Asamblea Nacional. En ocasiones, el cruce de imputaciones sentenci¨® a los contrarios -'?asesinos!'- y el hemiciclo qued¨® transformado en una gallera sin espacio para la serenidad y la concordia.

La pretendida reconciliaci¨®n dista de haber comenzado en Venzuela. Rafael Mar¨ªn, de Acci¨®n Democr¨¢tica (AD), acus¨® al Ejecutivo de haber aplicado, durante tres a?os, pol¨ªticas y estilos que 'sembraron odios e instigaron a delinquir'. Carlos Tablante, del Movimiento al Socialismo, exigi¨® la desarticulaci¨®n de los C¨ªrculos Bolivarianos, que llam¨® 'c¨ªrculos del terror'.

El testimonio de Jos¨¦ Rivoli resume el de la mayor¨ªa: 'Empezaron a caer v¨ªctimas al piso y no se sab¨ªa de d¨®nde proced¨ªan los disparos'. La identificaci¨®n de los francotiradores aportar¨ªa una de las claves de la indagaci¨®n en curso. La militarizada Guardia Nacional y el oficialismo armado que proteg¨ªan el edificio del Gobierno el d¨ªa 11 atacaron y fueron atacados cuando la manifestaci¨®n hacia las oficinas centrales de Petr¨®leos de Venezuela (PDVSA) cambi¨® de rumbo y enfil¨® hacia la sede presidencial.

Polic¨ªas de la alcald¨ªa de Caracas, controlada por el regidor Alfredo Pe?a, opositor a Ch¨¢vez, tambi¨¦n hicieron uso de las armas. Desde las alturas de tres edificios, asesinos con armas largas disparaban a la cabeza y el coraz¨®n. Varias filmaciones atraparon a pistoleros del oficialismo disparado desde los parapetos de un puente, y militantes bolivarianos son alcanzados por las balas en el v¨ªdeo proyectado por el diputado gubernamental Juan Barreto.

Y en tanto los peritos trabajan, el debate pol¨ªtico y period¨ªstico aventura sus propias conclusiones. 'Barreto dice que la muchacha de Primero Justicia [partido de la oposici¨®n] fue asesinada por atr¨¢s', reaccionaba la periodista de oposici¨®n Marta Colominas, 'pero resulta que la bala le da en la mejilla, y cuando se ve la fotograf¨ªa, porque en efecto la toma est¨¢ por detr¨¢s, el pelo se le levanta porque simplemente la bala sale por el lado opuesto'.

La muchedumbre coloc¨® bombonas de gas para incendiar los edificios de los francotiradores. Fue in¨²til. 'No bajaban, ni dejaron de disparar', record¨® Luis Rodr¨ªguez, herido en una pierna.