Al alcalde de Alcorc¨®n
Sabemos todos, por la prensa y otros medios de comunicaci¨®n, y, obviamente, antes y mejor que nadie, usted debe conocer la decisi¨®n del juez titular del Juzgado n¨²mero 5 de Alcorc¨®n, en cuanto a su pretensi¨®n de archivar la querella interpuesta por cinco concejales de la oposici¨®n, a los que un panfleto de su partido (Partido Popular) les acusaba de haberse apropiado (cuando ellos gobernaban) de m¨¢s de 180 millones de pesetas, de las de entonces. Y esto, se?or Z¨²?iga, si es verdad porque lo es, y si no es verdad porque ser¨ªa inadmisible calumnia y vil difamaci¨®n, no es como para pasar p¨¢gina, as¨ª, sin m¨¢s.
Los imputados, como usted sabe, niegan los hechos, y en su autodefensa les acusan a ustedes de calumnia, y les presentan la consabida querella (cosa que ustedes no hicieron cuando estaban tan convencidos de su justa acusaci¨®n), y precisamente es ¨¦sta la querella que el juez, ahora, pretende archivar. ?l sabr¨¢ por qu¨¦ lo hace.
El pueblo honrado de Alcorc¨®n (sean de la 'margen' izquierda o de la 'margen' derecha, pues en ambas 'm¨¢rgenes' hay, sin duda, ciudadanos honrados) no puede permitir que algo tan grave sea archivado, achantado ni escamoteado. Preferimos y exigimos que se sepa toda la verdad, que siga adelante la querella, pese a quien pese, caiga quien caiga.
?Dice el se?or juez que para el correspondiente enjuiciamiento faltan pruebas? Pruebas ?sobre qu¨¦? Sobre los supuestos millones sustra¨ªdos hay que suponer que los acusadores presentar¨ªan pruebas 'irrefutables' de su 'sincera' y tan difundida acusaci¨®n. Porque sobre la autor¨ªa del Panfleto Popular (PP) bien poco falta por averiguar: documentadamente, lo redacta, imprime y distribuye, atiborrando nuestros buzones con decenas de miles de copias, el Partido Popular de Alcorc¨®n, organizaci¨®n pol¨ªtica de la que su presidente es Pablo Z¨²?iga, y su secretario general es Francisco Torres. Como asimismo ambas personalidades son, respectivamente, alcalde y primer teniente-alcalde de Alcorc¨®n. Es inimaginable m¨¢s legitimidad y autenticidad representativa ni m¨¢s supuesta o hipot¨¦tica responsabilidad o irresponsabilidad.
Es usted, se?or Z¨²?iga, en los casi tres ¨²ltimos a?os, timonel de este barco que se llama Ayuntan-miento de Alcorc¨®n. Pues procure que, como sucediera en los 20 a?os que le precedieron, navegue 'viento en popa a toda vela'. S¨ª por tan valiente y obligado proceder alg¨²n cargo tuviese que rodar por cubierta, emp¨²jele para que salga fuera de borda, indistintamente que sea por la banda de 'babor' o la de 'estribor'. Si desde el m¨¢s all¨¢ son contempladas estas cosas del m¨¢s ac¨¢, bien seguro estoy de que dos honestos alcaldes que tuvo nuestro Ayuntamiento, J. Aranda y J. Vilumbrales, lo agradecer¨¢n.
Diga, como dijo aquel monarca espa?ol, tras perder varios barcos de su flota, en cierta e hist¨®rica batalla naval: 'Vale m¨¢s honra sin cargos que cargos sin honra'.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.