Trapos y personajes

Ram¨®n Barea apenas necesita presentaci¨®n. Director de cine y teatro y actor, su rostro se ha paseado por todos los medios y ha abarcado m¨²ltiples registros. ?ngela Arregui tampoco requiere muchas precisiones. Abanderada de la moda vasca en todo el mundo, sus colecciones se distinguen por su gran femineidad y elegancia. Los dos hab¨ªan o¨ªdo hablar el uno del otro muchas veces pero jam¨¢s hab¨ªan cruzado palabra.

La primera oportunidad de estos dos reconocidos profesionales de charlar, de compartir opiniones sobre sus trabajos, se present¨® en las instalaciones la Cadena Ser en Bilbao. Era el momento de preguntar aquello que siempre quisieron preguntar, ¨¦l sobre la moda; ella, sobre la labor actoral. Pero lo primero sobre lo que hablaron Barea y Arregui fue sobre su desencuentro, el haber estado tan cerca uno del otro, con profesiones que se entrecruzan, con ambientes parecidos, uy jam¨¢s haberse conocido personalmente. 'Ya ten¨ªa ganas', expresaron ambos.

?ngela Arregui: 'Yo regalar¨ªa mi ropa para que se viera Arregui por la calle'

Ram¨®n Barea: 'Eres alguien en cuanto sales por televisi¨®n, aunque lleves 30 a?os en esto'

A partir de ah¨ª, no hubo problemas. La moda y el cine, el teatro o la televisi¨®n tienen puntos en com¨²n, desde luego, pero adem¨¢s son campos abonados para la charla.

Barea quiso saber c¨®mo hab¨ªa llegado Arregui al mundo d ela moda. 'Me ha gustado toda la vida coser. Crear es lo bonito; crear trapos, eso es lo m¨¢s gratificante', afirm¨® ella. Y posteriormente asegur¨® que la pasarela no es lo imortante. 'Lo m¨¢s importante es que tus creaciones se vean en la calle, que se vea Arregui en la calle. Yo regalar¨ªa mi ropa para verla por la calle', coment¨® la dise?adora con una voz ronca por culpa de un fuerte catarro.

A ella le interesaba saber c¨®mo ve Barea la salud del teatro. El actor y director se mostr¨® satisfecho porque 'la gente ha vuelto otra vez al teatro'. Se quej¨®, sin embargo, de la actitud de los estudiantes de actores que, cuando Barea a acudido a darles una charla, lo primero que le preguntan de la profesi¨®n es en que medio se gana m¨¢s dinero. 'Me da una sensaci¨®n de carrera r¨¢pida, de querer llegar antes', dijo.

Tambi¨¦n recalc¨® Barea la fuerza de la televisi¨®n. Aunque su medio preferido es el tetro, reconoci¨® que con s¨®lo aparecer en un cap¨ªtulo de una serie 'el carnicero y el panadero te suben de categor¨ªa'. 'De repente, ya eres alguien, aunque lleves 30 a?os en esto', indic¨® el director de Pecata Minuta. 'En teatro, cuando una obra tiene much¨ªsimo ¨¦xito y lleno total es que la han visto 5.000 personas', apostill¨®.

Los dos profesionales se enfrentaron tambi¨¦n a si existe un cine vasco, una moda vasca. 'Esa pregunta est¨¢ siempre ah¨ª. En este pa¨ªs nuestro hay mucho arte, hay el regusto en todo. Pero no hay una se?a de identidad', afirm¨® Arregui. 'Yo soy vasca, t¨² eres vasco, pero yo no hago una moda vasca. Aunque s¨ª se nos diferencia en el buen vestir'.

Para Barea otro ejemplo de que no existe ese marchamo vasco es que el cine de 'Medem, Bajo Ulloa o Urbizu no tiene que ver nada el de uno con el otro'. Y, aunque los actores y directores vascos se cuentan por docenas, 'no formamos pe?a ni nada'. Barea recuerda que cuando se estren¨® Pecata Minuta, 'todo el mundo hablaba del humor vasco', algo que ¨¦l no ve¨ªa 'por ning¨²n lado' ni nunca ha averig¨¹ado qu¨¦ es. 'Hay much¨ªsimo humor en Euskadi', le advierte Arregui: 'Somos los mejores'.

S¨®lo hubo un peque?o desencuentro. Fue cuando Ram¨®n Barea pregunt¨®, 'por jugar', si el Rey se podr¨ªa considerar buen actor y ¨¦l mismo se respondi¨® que no, que dice mal el texto. 'En un casting, al Rey no le dar¨ªan el papel de rey', asegur¨®. ?ngela Arregui no estuvo de acuerdo y dijo muy firme: 'Yo admiro al Rey, much¨ªsimo. Da gusto hablar con ¨¦l, es entra?able, una persona extraordinaria, fant¨¢stica. Me faltan palabras para describirle'.

Se cerraron los micr¨®fonos y ?ngela Arregui y Ram¨®n Barea, que no se conoc¨ªan, siguieron charlando como dos viejos amigos, sobre futuros proyectos, sobre intercambio de ideas, sobre alguna posible colaboraci¨®n futura. Y as¨ª se perdieron por las calles de Bilbao.