Los ni?os expuestos a la coca¨ªna en el embarazo presentan deficiencias cognitivas y de desarrollo
Un reciente estudio sobre los llamados 'beb¨¦s del crack' ha disipado las dudas que pod¨ªan quedar sobre los graves riesgos de consumir coca¨ªna durante el embarazo. Estos riesgos se concretan en una tasa de retraso mental cinco veces superior a la normal y en un aumento de las probabilidades de sufrir disfunciones cognitivas y retrasos en el desarrollo durante los dos primeros a?os de vida.
'Nuestro estudio ha descubierto importantes deficiencias cognitivas, y que los ni?os expuestos a la coca¨ªna tienen el doble de probabilidades de sufrir retrasos significativos en los dos primeros a?os de vida', dicen los autores del trabajo, publicado en el ¨²ltimo Journal of the American Medical Association, (JAMA). Los investigadores a?aden que 'debido a que las puntuaciones del ¨ªndice de desarrollo mental a los dos a?os pronostican los posteriores resultados cognitivos, es posible que estos ni?os sigan teniendo dificultades de aprendizaje en la edad escolar'.
Para la realizaci¨®n de este estudio se ha hecho un seguimiento de 415 beb¨¦s (218 expuestos a la coca¨ªna y 197 no expuestos), que fueron reclutados entre 1994 y 1996 en un gran hospital urbano de Estados Unidos, hijos de madres que hab¨ªan sido identificadas como poblaci¨®n de alto riesgo por consumo de drogas. Luego se compararon las medidas homologadas de desarrollo cognitivo y motor de los beb¨¦s expuestos a la coca¨ªna con las de los no expuestos.
Los resultados indican que 'los ni?os expuestos a la coca¨ªna ten¨ªan menos edad de gestaci¨®n, peso al nacer, circunferencia craneal y longitud que los no expuestos', afirman los autores. 'La tasa de retraso mental del 13,7% (27 ni?os en los grupos expuestos a la coca¨ªna frente al 7,18% -13 ni?os- en el grupo no expuesto) es 4,89 veces superior a lo esperado en la poblaci¨®n en general, y el porcentaje de ni?os con retrasos ligeros o graves que requieren intervenci¨®n fue del 38%, casi el doble que la tasa (20,9%) del grupo no expuesto a la coca¨ªna, aunque s¨ª a otras drogas'.
Las madres consumidoras de coca¨ªna reconocieron que hab¨ªan consumido tambi¨¦n alcohol, marihuana y tabaco con m¨¢s frecuencia y en mayor cantidad que las no consumidoras de coca¨ªna durante todos los trimestres del embarazo.
Se calcula que desde mediados de la d¨¦cada de 1980, cuando empez¨® la llamada epidemia del crack debido a la aparici¨®n de una m¨¢s barata aunque potente forma fumable de la droga, han nacido s¨®lo en EE UU un mill¨®n de ni?os expuestos a la coca¨ªna durante el embarazo.
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